Durante gran parte de su historia, Disney tuvo el monopolio del cine de animación. Aunque no siempre fue un camino de rosas para la Casa de Mickey. Actualmente, la compañía disfruta de una gran época de esplendor, un Renacimiento impulsado por éxitos descomunales como 'Frozen: El reino del hielo' o 'Zootrópolis', pero para recuperar el trono ha tenido que atravesar por bastantes baches creativos y comerciales, así como un par de etapas "negras".
Una de ellas, la de los 80, coincidió con (o potenció, según se mire) el auge de otros estudios de animación que llegaron a hacerle sombra. Algunas de las películas más olvidadas de Disney, 'Oliver y su pandilla', 'Taron y el caldero mágico' o 'Basil, el ratón superdetective', aparecían en esta década, mientras que Fox, Universal, Warner y otras compañías aprovechaban las horas bajas de su principal competidora para estrenar cintas animadas que se colaban en la sala de estar de toda una generación.
Fue entonces cuando nos dimos cuenta de que Disney no era imbatible, como se volvió a demostrar en la primera década del nuevo milenio, cuando su división de animación tradicional tuvo que cerrar tras varios fracasos consecutivos, y estudios como DreamWorks vieron cómo aumentaba su repercusión hasta desafiar el monopolio de Disney.
Dinosaurios, ratones judíos y otras princesas
La animación no-Disney de los 80 y principios de los 90 tiene un nombre propio, Don Bluth, director de clásicos como 'En busca del valle encantado' o 'Fievel y el nuevo mundo', un hombre que durante aproximadamente diez años logró lo imposible: hacer sombra a Walt Disney (para quien, por cierto, había trabajado entre los 50 y los 70). Hoy en día, puede que sus películas no estén tan bien consideradas como las de Disney, pero no se puede negar que los espectadores que crecimos con ellas les guardamos un hueco muy especial en nuestro corazón nostálgico.
Pero en la siguiente lista no solo encontraréis films de Bluth, sino también otros clásicos pertenecientes a otros estudios que también vimos sin parar hasta gastar nuestros VHS. Hasta 16 títulos que seguro que os traen muchos recuerdos de la infancia.
16 películas animadas que no eran de Disney y te encantaban
'Fievel y el nuevo mundo'
Una de las cintas animadas no-Disney más inolvidables de los 80. Esta aventura dramática protagonizada por un pequeño ratón ruso que se se separa de los suyos en su travesía hacia la tierra prometida de Nueva York tocó la fibra sensible de toda una generación. ¿Quién no ha llorado con el emotivo reencuentro de Fievel y su familia? La película fue nominada al Oscar a mejor canción ('Somewhere Out There') y su éxito propició tres secuelas, de las cuales la más popular es 'Fievel va al Oeste', que si bien no caló tan hondo como la original, también se hizo un hueco en las meriendas de miles de niños de los 90.
'La Princesa Cisne'
Los 90 fue la década de las princesas y las heroínas Disney. Pero Ariel, Bella, Jasmine o Pocahontas no estaban solas. Otros estudios aprovecharon el tirón de películas como 'La Sirenita' para crear sus propias versiones de los cuentos de hadas. Y así nacía 'La princesa cisne', basada en el ballet 'El lago de los cisnes' de Tchaikovsky y dirigida por un ex animador de Disney, Richard Rich. En la película queda patente en todo momento la influencia de la Casa de Mickey y la intención de emular su fórmula de éxito, con un estilo de animación similar y un componente musical que le valió una nominación al Globo de Oro. Aunque palidece comparada con sus contemporáneas disneyanas, no se puede negar su impacto, sobre todo en el mercado de vídeo.
'Todos los perros van al cielo'
Los 80 fueron una etapa de experimentación para el cine de animación. Mientras Disney hacía cosas radicalmente diferentes ('Oliver y su pandilla') y sorprendentemente oscuras ('Taron y el caldero mágico'), Don Bluth se desmarcaba de los cuentos de hadas clásicos con propuestas también peculiares. Una de ellas fue 'Todos los perros van al cielo', sobre un pastor alemán, Charlie, que tras ser asesinado por su dueño debe demostrar que merece su entrada en el Cielo con la ayuda de una niña. La película coincidió con 'La Sirenita', lo que impidió que su éxito en taquilla fuera mayor, pero poco después se convertiría en uno de los VHS más vendidos de la historia.
'La espada mágica'
Warner Bros. nunca ha apostado demasiado por los largometrajes animados más allá de sus franquicias insignia (DC, Looney Toons, Tom y Jerry), pero en los 90 probó suerte con 'La espada mágica: En busca de Camelot', aventura musical basada en las leyendas de Arturo y los caballeros de la Mesa Redonda. La película se intentaba asemejar al estilo de animación de Disney (hasta tenía su versión de Timón y Pumba), pero se alejaba adoptando un tono más épico, apropiado para una fantasía sobre la leyenda artúrica. 'La espada mágica' no funcionó muy bien en taquilla, pero encontró una segunda vida en el mercado de vídeo, donde muchos niños la descubrieron, y la vieron hasta gastarla.
'Anastasia'
Anastasia es la princesa no-Disney por antonomasia. La película, estrenada en 1997, en plena nueva era dorada de Disney, suponía el salto de Don Bluth a un tipo más comercial de dibujos, o lo que es lo mismo, una aventura animada que cumplía las reglas de su principal competidora. Una princesa protagonista, un villano mágico, un animal parlante como alivio cómico, números musicales... Hasta fue nominada al Oscar en las categorías que Disney siempre acaparaba (banda sonora y canción original). 'Anastasia' seguía el manual Disney al pie de la letra, pero con el estilo propio de Bluth y un uso más evidente de la animación por ordenador. El resultado fue un éxito moderado en cine y una vida muy próspera en vídeo. Recientemente, la película se ha convertido en un musical de Broadway.
'En busca del valle encantado'
Seguimos con Don Bluth, pero esta vez volvemos al pasado, concretamente a la era de los dinosaurios. En 1988, dos años después del éxito de 'Fievel y el nuevo mundo', Bluth estrenaba 'En busca del valle encantado', aventura prehistórica que seguía un esquema parecido al de su anterior film: una cría de dinosaurio se separa de su familia y debe vivir peligrosas aventuras para reencontrarse con ellos. Con un metraje que no llega a los 70 minutos y un tono marcadamente triste y dramático, 'En busca del valle encantado' se convirtió en una de las películas favoritas de los niños, funcionando como antesala de la dinomanía que llegaría unos años después. Tanto fue así que ha generado hasta ¡trece secuelas!, desvirtuando para muchos el impacto de la original.
'El último unicornio'
Esta película no es tan conocida como las demás de la lista, pero merece un hueco en ella por su naturaleza de cinta animada de culto. Estrenada en 1982, 'El último unicornio' está basada en el popular libro de Peter S. Beagle y dirigida por Jules Bass y Arthur Rankin Jr., tándem creativo que fue una auténtica institución del fantástico en los 70 y 80 gracias a películas como 'El Hobbit' o 'El vuelo de los dragones'. Sin embargo, como ocurre con esos dos títulos, 'El último unicornio' es recordada sobre todo por los amantes del cine de animación y los fans de la fantasía marginal de los 80.
'NIMH, El mundo secreto de la señora Brisby'
'NIMH, el mundo secreto de la señora Brisby' es el ejemplo más claro de lo que decíamos antes sobre Bluth: ya desde el comienzo de su carrera como director (esta película supone su debut tras trabajar con Disney), este arriesgaba con historias mucho más oscuras y dramáticas que sus competidores. Basada en la trilogía de novelas de 'La señora Frisby y las ratas de Nimh' de Robert C. O'Brien, 'NIMH' narraba la historia de una ratona que emprende una aventura para salvar a su hijo enfermo y poder mudarse de casa antes de que esta sea destruida. Un ejemplo de película animada de los 80 que no descansaba su peso en las canciones y no tenía miedo a ponerse demasiado dramática, aunque esto conllevase algún que otro trauma para los niños. MGM prepara un reboot desde hace unos años.
'FernGully'
'FernGully: Las aventuras de Zak y Crysta' suponía el intento de Fox de subirse al carro del cine de animación a principios de los 90, con una aventura colorista ambientada en un bosque mágico que pretendía inculcar un mensaje ecologista a los niños. La película no fue un éxito de taquilla, pero como le ocurrió a tantos otros títulos de la época, funcionó muy bien en vídeo, hasta el punto de dar lugar a una secuela muy inferior en 1998. 'FernGully' tiene el dudoso honor de contar con el por aquel entonces popular humorista Ángel Garó doblando a todos los personajes del film, una "hazaña" que le valió la entrada en el Libro Guinness de los Récords. Por otro lado, además de ser comparada sobre todo con 'El último mohicano' y 'Pocahontas', 'Avatar' guarda un sospechoso parecido con 'FernGully'.
'Pulgarcita'
'Pulgarcita' es la precursora directa de 'Anastasia', película animada de la primera mitad de los 90 que adaptaba un cuento clásico de Hans Christian Andersen con la esperanza de cosechar el mismo éxito que Disney, cuyo ejemplo seguía al pie de la letra. La película fue un fracaso en taquilla (solo recaudó 11 millones en Estados Unidos), pero eso no impidió que los niños y niñas de los 90 se prendasen de esta aventura romántica viéndola en su televisor.
'El guardián de las palabras'
'El guardián de las palabras' fue más un efecto secundario del fulgurante éxito de Macaulay Culkin que otra cosa. Con ecos a 'La historia interminable', la película contaba la historia de un niño apocado que se refugiaba en una biblioteca durante una tormenta y se adentraba, convertido en un dibujo animado, en los mundos fantásticos de los clásicos de la literatura. No causó mucho impacto, pasando sin pena ni gloria por las salas de cine, pero los afortunados que la descubrieron encontraron en ella una emocionante historia de aventuras que además de entretener educaba a los niños en la importancia de la lectura. Está pidiendo a gritos un remake.
'El jardín mágico de Stanley'
Un título menor en la filmografía de Don Bluth (en este caso dirigida junto a Gary Goldman) que, sin embargo, también sirve como muestra de su creatividad. En 'El jardín mágico de Stanley' un simpático y bondadoso troll enfada a su Reina y es exiliado a Central Park, donde se hace amigo de dos niños. Su caso es parecido al de 'FernGully', una aventura ecologista que no funcionó en taquilla pero sí en muchos hogares familiares.
'Rex: Un dinosaurio en Nueva York'
Nacida como acompañamiento animado de 'Parque Jurásico', 'Rex: Un dinosaurio en Nueva York' se estrenaba rodeada de mucha expectación el mismo año que la película de Steven Spielberg. 'Rex' era un extraño híbrido de aventura, drama, comedia y ciencia ficción que sin embargo no lograría sacar partido del filón de la dinomanía. Eso sí, el argumento de la película era tan peculiar que resultaba fascinante: un hombre viaja en el tiempo y da de comer a los dinosaurios unos cereales que los convierten en seres mansos e inteligentes que acceden a viajar al presente para hacer felices a los niños. Aunque fuéramos pequeños, sabíamos que no era una gran película, y aun así no podíamos dejar de verla. La culpa es de Spielberg, claro.
'Balto'
'Balto. La leyenda del perro esquimal' es la siguiente película del director de 'Rex: Un dinosaurio en Nueva York', Simon Wells, uno de los principales creativos de DreamWorks. En ella daba un salto considerable de calidad, con una aventura basada en una historia real sobre un husky siberiano de Alaska que se convierte en héroe durante el invierno de 1925 al liderar una manada para obtener medicinas contra la difteria. 'Balto' se distancia considerablemente de los musicales de Disney, con énfasis en la acción y el drama.
'El prícipe de Egipto'
Y como no hay dos sin tres, no podíamos dejar de mencionar 'El príncipe de Egipto', la primera película de DreamWorks Animation, también dirigida por Simon Wells. Cuando 'El príncipe de Egipto' se estrenó en 1998, el cine de animación se encontraba en pleno proceso de transición, y esta película es un claro ejemplo de ello. Aunque en teoría se adscriba a la animación tradicional (hecha a mano), la película fue realizada apoyándose fuertemente en las técnicas de animación por ordenador, algo que salta a la vista. 'El príncipe de Egipto' es un cuento bíblico de gran ambición, una aventura épica ganadora del Oscar a mejor canción que dejó impresionados a muchos. Aunque también hay que decir que su tono excesivamente oscuro y solemne no casó muy bien con parte del público infantil.
'El gigante de hierro'
Joya de la animación tradicional donde las haya, 'El gigante de hierro' es una de las películas de dibujos previa al boom del cine de animación por ordenador más queridas por el público. Dirigida por Brad Bird ('Los Increíbles'), este film recupera la tradición de las aventuras clásicas de la Amblin con la entrañable historia de un niño y un robot gigante (realizado por ordenador y excelentemente integrado en el entorno 2D) que se hacen amigos inseparables. Aunque la box office no se portó bien con ella, el tiempo la ha convertido, muy merecidamente, en una película de culto.