Se suele decir que las actores de Hollywood son personas tremendamente inseguras. Ya sea por un nivel alto de exigencia personal o por la presencia de complejos más de un intérprete huye de las salas de cine cuando se avecina el estreno de su última película. Porque verse a uno mismo en pantalla grande no tiene que ser una experiencia demasiado fácil.
Algunos intérpretes han decidido evitar el visionado posterior de sus trabajos. Una vez finalizado el rodaje, no experimentarán la tentación de comprobar la selección de planos que conformarán el montaje final. Tal es el caso de veteranos como Julianne Moore o Tom Hanks. Ambos manifiestan un rechazo absoluto a observar con lupa sus intervenciones. Para estos, todo aquello que escape del proceso actoral a pie de set carece de interés.
En otras ocasiones, el artista termina cediendo ante la presión aunque no disfrute sentándose en el patio de butacas. Andrew Garfield, por ejemplo, reconoció haber esquivado la proyección de su cinta 'Nunca me abandones' aunque no pudo hacer lo mismo con 'La red social' de David Fincher. Un caso similar vivió nuestra querida Nicole Kidman, quien tuvo que asistir a la premiere de 'Australia' en Sidney para contentar a su colega Baz Luhrmann. ¿El resultado? Una experiencia traumática que la actriz de 'Moulin Rouge' nunca olvidará. "¿Estoy haciendo algo bien en esta película?", le preguntaba una y otra vez a su marido Keith Urban.
Casos extremos
Aunque si hablamos de episodios críticos parece obvia la mención a Megan Fox y Robert Pattinson. Y es que por increíble que parezca, ambos intérpretes han llegado a sufrir ataques de pánico al topar con su propia imagen en movimiento. Una botella de champán y una huida exprés funcionaron como botes salvavidas. Ver para creer.
10 actores que se oponen a ver sus propias películas
Ben Foster
Aunque el actor reconoció haber visto 'Comanchería', el estadounidense también confesó que se trataba de una de las pocas películas que ha visionado dentro su filmografía en años. "La mayor parte del tiempo no disfruto viendo lo que hago", comentó a Metro. Y es que parece que el intérprete no siempre está de acuerdo con muchas de las decisiones comerciales que se toman dentro de la industria cinematográfica. "Cineastas y directores financieros trabajan bajo presión para obtener un resultado concreto que no coincide necesariamente con el que perseguíamos en un principio", explica. "Yo intervengo y trabajo, y a veces el proyecto se maneja bien y a veces no. Trato de no preocuparme mucho al respecto y pasar a otro nuevo".
Andrew Garfield
Andrew Garfield también se muestra reacio a consumir sus propios materiales. Aunque tal y como informa The Hollywood Reporter, el actor se vio obligado a ver 'La red social'. ¿El motivo de su escasa predisposición a contemplar su interpretación? Analizarse a sí mismo en exceso. "No quiero ser consciente de lo que estoy haciendo. Tan pronto como comienzo a serlo dejo de estar abierto. Solo quiero estar completamente abierto a la historia y lo que ese momento subjetivo implica", establece el actor.
Johnny Depp
En más de una ocasión, el intérprete de 'Piratas del Caribe' ha comentado su escaso interés en contemplar sus propios films. De hecho, todo apunta a que sus hijos han visto a Jack Sparrow en la gran pantalla muchas más veces que él."Hace tiempo que tomé una decisión y creo que es mejor no ver mis propias películas. Es un rollo porque te pierdes el increíble trabajo de tus compañeros", declaró a The Independent durante la promoción de 'El llanero solitario'. A lo que añadió: "Una vez has terminado de encarnar a tu personaje ya no es asunto tuyo". Una decisión a la altura de la fuerte personalidad del estadounidense.
Angelina Jolie
Jolie no es una de esas artistas que rechace radicalmente sus primeros planos. No obstante, la actriz nacida en Los Ángeles reconoció haberse perdido algún que otro trabajo dentro de su filmografía. "Hay una película o dos que no he visto", comentó a The Telegraph en 2009. "Me gusta el proceso de hacer películas más que verlas. En realidad no me gusta ver películas. Me gusta ver las películas de Brad"", explicó la intérprete de '60 segundos'. Imaginamos que tras su sonado y repentino divorcio Jolie no mantendrá los mismos gustos.
Billie Piper
La actriz británica es incapaz de soportar su participación en cualquier tipo de secuencia. Es más, la intérprete de 'The Calcium Kid', 'Cosas que hacer antes de los 30' o 'Doctor Who' llegó a impedir que su entorno revisase sus trabajos. De hecho, en una entrevista de 2008 Piper reconoció prohibir a Laurence Fox (su marido por aquel entonces) visionar algún que otro episodio de 'Doctor Who' en el que apareciese. "Sentarse a ver tu propia actuación me hace llorar. Es peor verla con otro actor porque él puede diseccionar tu interpretación", señala.
Julianne Moore
A pesar de que dedica su vida a protagonizar películas y derrocha talento en cada una de sus intervenciones, Moore se niega a comprobar el resultado final. Pues tal y como recogió el Daily Express en 2013, la actriz de 'Magnolia' no encuentra especialmente divertido observarse en escena. "No he visto ninguna de mis películas. No puedo sentarme durante una premiere", llegó a confesar. "Me gusta más estar en una película que verla. Resulta mucho más emocionante que ver el producto terminado", explicó. Gracias a Dios, el resto de mortales podemos disfrutar de su presencia.
Megan Fox
A pesar de su evidente atractivo, Megan Fox muestra serias reticencias a la hora de contemplarse encarnando a un personaje. De hecho, la modelo estadounidense detesta verse en pantallas, espejos o incluso fotografías. "Nunca me miro a mí misma, ni siquiera en fotografías. No miro nada. Entro en pánico si hay un monitor en la sala y de forma inmediata empiezo a sufrir una especie de ataque de ansiedad", confesó a Fox News. A modo de anécdota sabemos que la actriz tuvo que ingerir importantes cantidades de champán para poder enfrentarse a un visionado de 'Transformers 2: La venganza de los caídos'. Sorprendente.
Robert Pattinson
Parece que en principio Pattinson está más tranquilo lejos de las salas de cine cuando se estrena una de sus películas. Pues tal y como reveló en uno de sus reportajes para GQ, el actor tuvo que abandonar una de las primeras proyecciones de 'Crepúsculo' para poder aislarse en su coche. Al parecer Pattinson sufrió un serio ataque de pánico consecuencia de la presión a la que se vio sometido. Imaginamos que el actor ha ido controlando poco a poco estos periodos de crisis.
Nicole Kidman
Al igual que las grandes divas del Hollywood clásico, Nicole Kidman es de esas artistas que prefieren alejarse de los monitores y las pantallas una vez finalizado el rodaje. Según declaró al Daily Mail, la intérprete prefiere alejarse de las salas de cine porque desarrolla una actitud muy crítica y exigente consigo misma. "Generalmente no veo mis películas, pero debido a Baz Luhrmann he tenido que hacerlo. Solo he visto 'Moulin Rouge' y Australia en toda mi carrera", confiesa al medio. Y al parecer le resulta complicado no experimentar un sentimiento de decepción. "No puedo ver esta película y estar orgullosa de lo que he hecho", comentó tras un visionado traumático de 'Australia' en Sidney.
Tom Hanks
El protagonista de 'Forrest Gump' encuentra contraproducente y absurdo echar la vista atrás y rescatar antiguos proyectos. Sabe de sobra que su interpretación está condenada a mantenerse invariable y prefiere no rescatarla. Eso sí, Hanks cuenta a ShortList que podría realizar una pequeña excepción. "La única película que podría ver con cariño es una cinta modesta que dirigí en la que apenas salgo: 'The Wonders'. Me encantó tanto hacerla que cuando la veo todavía sonrío", señala el actor.
