Ya hemos perdido la cuenta de cuantos líos amorosos hemos visto en la serie de HBO 'Juego de Tronos', aunque hay algunos que recordamos mejor que otros. Recordamos la pasión de Daenerys y Khal Drogo, la incestuosa relación entre Cersei y Jaime y desgraciadamente el terrible matrimonio entre Sansa y Ramsay Bolton. Hay una pareja de 'Juego de Tronos' que probablemente sea la favorita de todos los fans de la serie, se trata de Ygritte y Jon Snow. El amor entre un miembro de la guardia de la noche y una salvaje que a todos nos hizo rezarle a los dioses antiguos y a los nuevos para que George R.R. Martin no se cargara a ninguno de los dos.
Los actores que dan vida a los dos personajes, Kit Harington y Rose Leslie, curiosamente están juntos también en la vida real. Recientemente el actor apareció en el programa de James Corden 'The Late Late Show' y se sentó junto a Nicole Kidman para ser entrevistado. En un momento dado, Harington explica cómo hace poco él y su Ygritte se mudaron juntos y cómo ella quería cambiar algunas cosas de la casa.
Nicole Kidman al escuchar que los dos vivían juntos le preguntó a Harington si tenían planes de matrimonio. Es una pregunta un poco incómoda para hacerle a alguien y mucho más en televisión. El actor un poco sonrojado dijo que primero querían tantear el terreno antes de tomar ninguna decisión, pero Kidman le dejó caer que es muy bonito prometerse a alguien si ya estás viviendo con esa persona. La actriz australiana lleva casada con el cantante de country Keith Urban desde 2006 y ha contado en alguna ocasión que se conocieron de verdad estando ya casados. Por lo visto a la actriz le va estupendamente así que quizás no es tan mala idea que Harington tome su consejo.
Ygritte y Jon
¡AVISO SPOILERS! Ygritte y Jon Snow se conocieron en una de sus expediciones al norte con la Guardia de la Noche. En un principio el debía matarla pero se apiadó de ella y le ordenó que le llevará ante su líder Mance Rayder. Su relación comienza con Ygritte lanzándole ataques verbales sin cesar mientras que Jon Snow ponía esa cara de tío serio que tiene Jon Snow. Al poco comienzan a respetarse entre ellos hasta que un día acaban en una cueva subterránea con pozas naturales y mantienen relaciones. De su relación nace la maravillosa expresión "You know nothing Jon Snow", una frase que Ygritte le soltaba cada dos por tres.
Cuando los salvajes deciden atacar el muro, Jon Snow no podrá traicionar a sus compañeros y huirá para avisarles. Ygritte se lo toma como una gran traición y le clava una flecha, aunque sabe que no es un tiro mortal. En la gran batalla del muro Ygritte muere en los brazos de Jon, demostrando que todavía se amaban aunque pertenecían a bandos distintos. Después de la muerte de Ygritte, Melissandre intentó seducir a Jon Snow pero se niega porque todavía ama a la salvaje. La mejor historia de amor de 'Juego de Tronos' de todos los tiempos.
Las muertes de 'Juego de Tronos', ordenadas de menos a más dolorosas
La muerte de Mance Rayder
El primer episodio de la quinta temporada de 'Juego de Tronos' contaba con la muerte del líder del Pueblo Libre. Mance Rayder fue la figura capaz de unir a todas las distintas tribus salvajes para atacar juntos el Muro. Aunque era enemigo de Jon Nieve, los dos llegaron a entenderse y respetarse mutuamente.
Los seguidores de la serie sentían cierta empatía hacia Mance Rayder, que el único pecado que había cometido era el de intentar que su pueblo pasara al otro lado del Muro y sobreviviese al invierno. Este pensamiento chocaba con el de la Guardia de la Noche, cuya principal misión es proteger el muro del peligro exterior.
Stannis le condenó a morir en la hoguera por no renunciar a sus ideales y arrodillarse ante él, pero Jon Nieve se vio obligado a acabar con su vida de un flechazo y así acabar con el sufrimiento de un hombre al que admiraba y comprendía.
La muerte del rey Tommen Baratheon
La sexta temporada de 'Juego de Tronos' se cerraba con un episodio sublime lleno de muertes. Una de las más impactantes fue la del rey Tommen, hijo de Robert Baratheon y Cersei Lannister. El joven regente decidía lanzarse por la ventana de su habitación tras descubrir que su amada, Margaery Tyrell, era asesinada en la explosión del Gran Septo de Baelor. Acababa así la vida de un personaje con un gran corazón pero injustamente manipulado por su madre.
Con el suicidio de Tommen se acababa la descendencia de Cersei, que ya había perdido a Joffrey y Myrcella, ambos envenenados. De este modo se cumplía la profecía que Cersei recibió de una bruja cuando no era más que una niña. La temporada acababa con su ascenso al poder, al asesinar también a Margaery, la hasta entonces actual reina.
La muerte de Margaery
El décimo episodio de la sexta temporada vino cargado de sorpresas, dejándonos uno de los mejores episodios de la serie hasta el momento. Cersei conseguía salirse con la suya, asesinando con una explosión de fuego valirio a todos los que habían atendido a su juicio. Muchos personajes morían en esa escena, entre los que se encuentran el Gorrión Supremo, Loras Tyrell y, como no, la querida Margaery Tyrell, reina de Poniente.
Margaery había conseguido abrirse camino hasta el reinado del continente junto a Tommen Baratheon. Se trata de uno de los personajes más queridos por los seguidores de la serie por ser inteligente y espabilada. Todo lo que luchó por ayudar a su hermano Loras no serviría para nada.
Mención especial para el ciudadano de Desembarco del Rey que muere aplastado por la campana del Gran Septo de Baelor al final del vídeo.
La muerte de Shae
Al final de la cuarta temporada, asistíamos aun momento trágico relacionado con Tyrion: La muerte de Shae. La prostituta de la que estaba enamorado el "medio-hombre" le traicionó declarando en su contra en el juicio al que este se enfrentaba. Esto hirió gravemente el corazón de uno de los personajes más queridos por los fans de la serie.
Cuando su hermano, Jaime, le libera de la prisión en la que está encerrado, antes de huir se pasa por los aposentos de su padre, Tywin. Allí encuentra a Shae, que no solo le ha engañado con palabras, sino también carnalmente. En una escena que busca producir una gran catarsis y profunda tristeza, Tyrion asesina entre lágrimas a su amada, vengándose así de su traición.
Después de este choque de emociones, Tyrion acabaría su venganza matando a su propio padre en el retrete, con una ballesta, en una escena digna de 'Pulp Fiction'.
La muerte de Khal Drogo
La primera temporada de 'Juego de Tronos' terminaba con la muerte de Khal Drogo en el último capítulo. El marido de Daenerys Targaryen fue herido en un combate contra un miembro de su tribu y el tratamiento de una curandera traidora consiguió dejarle en un estado vegetativo, además de acabar con la vida del hijo que el jefe de los dothraki y la Madre de Dragones esperaban. La propia Daenerys se vio obligada a acabar con el sufrimiento de su amado, ahogándole con una almohada.
Se trata de un punto de inflexión para Khaleesi, cuyo dolor por la muerte de Drogo consigue hacerle más fuerte. Recordemos que justo después de esto, Daenerys entra en la pila ardiente de su marido, de donde sale con vida y con sus tres dragones recién nacidos.
La muerte de la Princesa Shireen Baratheon
Una de las injusticias más grandes de la serie ocurría con la muerte de Shireen Baratheon en el episodio nueve de la quinta temporada. Nadie se podía creer que su padre, Stannis Baratheon, fuera capaz de sacrificar a su propia hija al Señor de Luz. Melisandre, la Mujer de Rojo, fue la artífice de este asesinato, convenciendo a Stannis y a su mujer de que sacrificando a la sangre de su sangre conseguiría que su ejército sobreviviese al invierno y así poder coronarse como rey de Poniente. Un poco más tarde descubriríamos que Melisandre se equivocaba y que el sacrificio de Shireen fue en vano.
Su madre no aguantó la culpa y se suicidó colgándose en el bosque. Cuando Ser Davos Seaworth se enteró del asesinato de su dulce amiga, consiguió que Jon Nieve expulsase a Melisandre del Castillo Negro.
La muerte de Ygritte
En el noveno episodio de la cuarta temporada de 'Juego de Tronos' ocurría una de las muertes más tristes de la serie. Ygritte, la pelirroja salvaje moría en los brazos de su amado, Jon Nieve. Sucedía mientras la Guardia de la Noche peleaba contra los salvajes que atacaban el Muro. Ygritte sujetaba su arco tensado apuntando a Jon, pensando si disparar o no, pero Olly se adelantó perforándola con una flecha. Sus últimas palabras a Jon Nieve son algo mágico y triste, en una escena en la veíamos cómo el corazón del bastardo se rompía en mil pedazos (metafóricamente, claro).
Jon e Ygritte deberían haberse quedado junto en la cueva, haciendo esas cosas con la lengua que tanto le gustaban a la salvaje. Sin embargo, el cruel destino y el odioso Olly acabarían con su complicada pero bonita relación. "No sabes nada, Jon Nieve".
La muerte de Oberyn Martell
La muerte más desagradable, violenta y gore de 'Juego de Tronos' ocurría en el octavo episodio de la cuarta temporada. Oberyn Martell se enfrentaba a Gregor Clegane, La Montaña, en el juicio por combate de Tyrion Lannister. El príncipe de Dorne decidió defender al acusado con el objetivo de vengarse de Clegane, el asesino de su hermana Elia Martell.
Cuando todo apuntaba a que Oberyn ganaría el combate, este se confió y bajó la guardia, momento que aprovechó La Montaña para derribarle, romperle los dientes de un puñetazo y finalmente explotarle la cabeza con sus propias manos, mientras admitía haber violado y asesinado a su hermana. Vaya pieza.
Así acababa la historia de uno de los personajes más carismáticos y queridos por los seguidores de la serie.
La muerte de Ned Stark
El asesinato de Ned Stark por orden del rey Joffrey Baratheon fue el primer gran shock de la serie. Ocurría en el noveno episodio de la primera temporada , y fue en este momento cuando todos descubrimos lo que significaba coger cariño a un personaje en 'Juego de Tronos'. Nos sentimos traicionados por una serie que no parecía que fuera a ser tan dura con sus protagonistas.
Ned Stark moría ante los ojos de sus dos hijas, Arya y Sansa, que un par de temporadas más tarde también se quedarían huérfanas de madre.
Mención especial a Sean Bean, que se embarcó en otra producción en la que su personaje fallecía, haciendo honor a su cuarta posición en el ranking de actores que más veces han muerto en películas y series.
La Boda Roja
La Boda Roja es uno de los momentos más sorprendentes de las primeras temporadas de 'Juego de Tronos'. En el noveno episodio de la tercera temporada, veíamos cómo una sangría planeada por los Lannister y los Frey acababa con las vidas de varios Stark. El legado de los Stark en el norte empezaba su fin con el asesinato de Robb, su madre Catelyn y su esposa Talisa. Esta escena cambió por completo el rumbo de los Stark que aún quedaban con vida, y revolvió por completo el mundo de 'Juego de Tronos'.
Muchos lectores de los libros grabaron a sus familiares y amigos viendo el capítulo y subieron sus reacciones a la red, dejando una gran cantidad de vídeos graciosos por el impacto de unas muertes que no esperaban ver.
La muerte de Jon Nieve
Uno de los mayores shocks de 'Juego de Tronos' fue la muerte de uno de sus mayores protagonistas, Jon Nieve en el episodio 10 de la quinta temporada. Engañado y asesinado por sus hermanos de la Guardia de la Noche, el bastardo fallecía solo en el patio del castillo, tras haber sido acuchillado varias veces. Todos conocemos el afán que tiene la serie de acabar con la vida de personajes importantes, pero nadie esperaba a Jon desangrándose tendido en la nieve (excepto los lectores de los libros, claro).
Los fans se volvían locos con este final de temporada. Menos mal que la Mujer de Rojo conseguiría resucitar a Jon al principio de la siguiente, en otra brillante y emocionante escena.
La muerte de Hodor
Ninguna otra muerte de este top nos ha dolido tanto como la de Hodor. Uno de los personajes más queridos por los fans de la serie murió en el quinto episodio de la sexta temporada. Sucedió protegiendo a Bran Stark de la hueste de no-muertos que les perseguía en la guarida del Cuervo de Tres Ojos.
Por fin descubrimos el significado de "Hodor", lo que el personaje repetía una y otra vez. "Hold the door", le decía Bran en la versión inglesa que, con sus poderes afectaba a un joven Hodor, dejándole en un estado catatónico, repitiendo la frase hasta que formó la palabra "Hodor".
Se trata de una de las escenas más tristes y lacrimógenas de todo 'Juego de Tronos'. Ahora sabemos qué era lo que Hodor decía, pero a qué precio.