Me resulta preocupante la falta de aventuras que llegan a los cines últimamente. Sí, sé que probablemente todas las cintas de superhéroes tengan su punto de aventura, o que de vez en cuando tenemos una 'Piratas del Caribe' o similar, pero me refiero a las aventuras de explorar templos o tumbas, de buscar tesoros. Puede que sea un género que solo me interesa a mí, pero echo mucho de menos cine como el de 'Los Goonies' o 'La búsqueda', de mapas del tesoro y palomitas. Por suerte, sigue estando ahí Tadeo Jones.
La primera película del albañil con aspiraciones de arqueólogo de Enrique Gato fue un éxito de taquilla, por lo que no es nada sorprendente que llegue a los cines 'Tadeo Jones 2: El secreto del Rey Midas'. Esta nos lleva unos años después de los hechos de la primera película. Tadeo ha vuelto a la obra y la compagina con estudiar la carrera de arqueología, mientras echa de menos a Sara, convertida ahora en una estrella del mundillo, lo que le ha hecho alejarse de Tadeo entre viajes, tours y expediciones. Pero Sara quiere compartir con Tadeo su último descubrimiento: por fin tiene la pista para poder iniciar la búsqueda del collar de Midas, un artefacto que otorgaría a que lo portara la capacidad de convertir todo lo que toca en oro.
He empezado hablando del cine de aventuras porque me ha sorprendido gratamente esta secuela al darme justo lo que creo que falta más por las salas: una aventura de las de toda la vida. Esta segunda parte cumple con creces la norma de que las secuelas siempre tienen que ser más grandes que la anterior. Esta vez tenemos un viaje internacional, que nos lleva de Chicago a Las Vegas, y de Las Vegas a Granada o Estambul. Y lo hace con una búsqueda del tesoro de manual: recuperando pistas en textos antiguos, resolviendo acertijos, encontrando accesos secretos en monumentos muy visitados y explorando tumbas, cuevas y catacumbas. Para los que adoramos las aventuras del profesor del sombrero y el látigo, la versión "para los más pequeños" es toda una delicia.
Uno de los puntos fuertes que tiene esta secuela es que la han intentado hacer más familiar, menos infantil que la primera. 'Las aventuras de Tadeo Jones' contaba con un desarrollo demasiado simple y un exceso de humor dedicado a los niños, olvidándose de que esos niños van al cine acompañados. 'Tadeo Jones 2' ha logrado entretenerme mucho más, ha colado sus chistes destinados a un público más adulto, y ha creado una historia más entretenida para cualquier edad.
Ayuda mucho el trasladarnos a escenarios tan maravillosamente dibujados con la animación por ordenador, como es la Alhambra de Granada o los templos en los que se guardan las reliquias de Midas. Es en los escenarios donde se ve el mayor salto técnico, ya que los personajes siguen siendo bastante simples. Mención especial merece el juego que les da el oro y lo bien hechos que están los brillos o el vuelo de las partículas brillantes.
Hablemos de los personajes. Mientras que Tadeo se mantiene como un bonachón bastante torpe, pero con madera de protagonista, Sara, a pesar de su éxito, se queda un poco estancada esta vez en la damisela en apuros, lo que es una pena porque, en este sentido, la película está totalmente descompensada y el personaje podría ser mucho más fuerte e independiente del papel que tiene en la aventura. También vuelven el perro de Tadeo, Jeff, y el loro de Sara, Belzoni y sus carteles. Ambos están utilizados con mesura para ser buenos alivios cómicos (y vender peluches). Quien también está de vuelta es Momia, que fue desterrado de su ciudad perdida y ha recorrido medio mundo para encontrar a sus únicos amigos. Él es realmente el gran secundario que está para hacer reír, y aunque a veces roce el punto del hartazgo, tiene sus momentos gracias a su arte del disfraz, capaz de enfundarse un traje de Elvis o de flamenca. Aunque hay chistes que, simplemente, no funcionan. Aunque tengan un claro porqué.
Quienes no convencen tanto son el nuevo villano y la nueva chica del equipo, Tiffany. Rackham es el típico villano de voz profunda y grandes ambiciones, y aunque entiendo que todo 'Tadeo Jones' es un homenaje al género, este villano no consigue quedarse grabado en la cabeza por haberlo visto cientos de veces. Tiffany es el eslabón más débil de la película, se trata de un personaje que aporta más bien poco, llega a entorpecer incluso, y su arco evolutivo no está muy bien desarrollado. La becaria ambiciosa podría haber dado mucho más de sí pero se queda en el vértice necesario para un innecesario triángulo amoroso que tampoco está lo suficientemente trabajado. Por mucho que hayan intentado meter este tipo de tramas para dar vidilla a la parte más adulta de la película, no han encontrado la forma de encajarlas bien en el resto de la historia.
El problema de la internacionalización
Muy bonito el gesto de llevar a Tadeo a España en esta película. Ya tocaba. Sin embargo, la obvia ambición del equipo capitaneado por Enrique Gato y David Alonso (y las productoras) de internacionalizar la película hace que ciertos detalles no funcionen en el terreno patrio. La parte de Granada está llena de topicazos como la mención de la sangría y la paella (aunque nunca se ha usado mejor una paellera en una película), o la inclusión de un taxista que es el estereotipo andaluz por excelencia (que da un poco de vergüencita, aunque no es ni por asomo el desastre que resultaba el personaje de José Mota de la primera, el peruano que les ayuda en la travesía). Todo eso hay que entenderlo como algo diseñado no para nosotros, sino para los de fuera, aunque no voy a negar que es imposible ignorar lo mucho que cantan todos esos estereotipos. Granada, eso sí, luce bien, sobre todo la Alhambra y la trepidante persecución por el Albaicín llena de gags físicos, aunque las calles (también en el caso de Estambul) resulten un poco vacías.
Pero volvamos a lo positivo. Lo importante es que 'Tadeo Jones 2: El secreto del Rey Midas' es un paso hacia delante respecto a la primera, acercándose más a un público de edades más variadas (aunque siga predominando el tono infantil) y aumentando mucho su escala. Es entretenida, es divertida y muestra la técnica a la que llega la animación española cuando cuenta con un presupuesto relativamente digno para jugar. Y el alma de la cinta, que sigue siendo ese gran homenaje a Indiana Jones, sigue estando intacto. En eso tiene tan poca competencia ahora en salas que le permitirá brillar como si realmente hubiera sido tocado por los poderes de Midas.
Nota: 6
Lo mejor: Mucho más equilibrada para pequeños y mayores. La sensación de que es una aventura como las de antaño.
Lo peor: Los topicazos rancios, los nuevos personajes y ciertas tramas poco trabajadas.