Todos sabemos el descontento que siente Stephen King hacia la visión que Stanley Kubrick realizó de su novela en 'El resplandor'. Sin embargo, no conforme con sus declaraciones en el pasado, el escritor ha aprovechado su última novela, 'The Outsider', para cargar una vez más contra la cinta de 1980.
En su última novela, King introduce un personaje que en un momento dado de la historia afirma estar viendo 'Senderos de gloria' de Kubrick porque, en sus propias palabras, "es mejor que 'El resplandor'".
A pesar de todo, en el pasado King no ha dudado en elogiar a Kubrick repetidas veces, llamándolo "un tipo realmente inteligente, que ha hecho algunas películas que significan mucho para mí", dejando claro que no tiene nada en contra del realizador, sino que se trata de un problema aislado con la visión que tuvo de su obra.
De hecho, en uno de sus primeros comentarios acerca del film de Kubrick, el autor aseguró tener mucha fe en el proyecto: "Admiraba a Kubrick desde hacía mucho tiempo y tenía grandes expectativas con el proyecto, pero me decepcionó profundamente el resultado final".
El problema con las actuaciones
Quiénes no se libraron tampoco de las críticas de King fueron los protagonistas del film, Shelley Duvall y Jack Nicholson. El autor se refirió al personaje de Wendy como "uno de los personajes más misóginos de la historia, está ahí básicamente para gritar y ser estúpida, y esa no es la mujer que escribí".
Mientras que su problema con el personaje de Jack se remite a que, a diferencia que en su novela, "el personaje parece que está loco desde el principio". "Todo lo que hace es volverse más loco. En el libro, es un tipo que está luchando con su cordura y finalmente la pierde. Para mí, eso es una tragedia. En la película no la hay, porque no hay un cambio real", sentenció hace unos años durante la promoción de 'Doctor sueño', la secuela de 'El resplandor'.
Curiosidades de 'El Resplandor'
Cuidado de los pequeños
A pesar de su fama, Stanley Kubrick fue muy protector con el pequeño Danny Lloyd. Por ello, durante el rodaje le hizo creer que estaban grabando un drama y no una película de terror. Para que Lloyd no estuviera en algunas escenas peliagudas se usaron grandes muñecos que le sustituyeron.
El joven actor solo supo la realidad de su trabajo años después cuando vio la versión del director a los 17 años, 11 años después de haberla grabado.
Estratega Kubrick
Cuando se estrenó la película, la MPAA era la encargada de no permitir la representación de la sangre en los tráiler que después se verían en los cines. Pero Stanley Kubrick quería que su tráiler se centrara exclusivamente en la escena en la que la sangre sale del ascensor. Sorprendentemente Kubrick convenció a la junta de que no era sangre, sino un montón de agua oxidada. Un genio.
Queso para desayunar, comer y cenar
Para la película el director usó varias estrategias con las que conseguir que sus actores se sintieran tal y como él quería. Kubrick quería estresar a Jack Nicholson, y para eso solo le ofrecía sándwiches de queso para comer, los cuáles Nicholson odia.
Pero la estrategia parece que funcionó, pues el actor improvisó algunas de las partes más míticas como el lanzamiento de la pelota de tenis que su personaje hacia sin parar. En el guion solo ponía: "Jack no está trabajando", el intérprete creó el resto.
Nicholson 'El Fuerte'
Según la actriz Shelley Duvall, la famosa escena de "¡Aquí está Johnny!" se tardó tres días en rodar y se usaron seis puertas. Los encargados de arte habían construido una puerta que se rompiese fácilmente, pero como Jack Nicholson había trabajado varias veces como voluntario de bombero, las rompía demasiado fácil. Se tuvo que construir una puerta más fuerte para que todo quedase tal y como quería el director.
Actores celosos
En el momento del estreno, los actores protagonistas sintieron que el director se llevó todo el crédito de la película por parte de los críticos, obviando el gran esfuerzo de los actores, el equipo y el relato de Stephen King. Tanto Nicholson como Duvall consideran 'El resplandor' como el trabajo más duro que hayan hecho jamás. Además, el actor piensa que el trabajo de Duvall es el mejor que una actriz haya interpretado.
Nicholson... 'El Cansado'
La actriz Shelley Duvall sufrió un agotamiento nervioso muy severo mientras rodaba la película, algo que hizo que acabase perdiendo gran parte del cabello.
Según comentó Anjelica Huston (pareja de Jack Nicholson durante esa época), el actor llegaba tan agotado después de tantas horas de rodaje y de repetir tantas tomas. Nicholson abría la puerta de su casa, iba directo a la cama y se dormía. Así día tras día.
Gesto improvisado
Otro de los grandes momentos improvisados lo realizó Danny Lloyd. El niño le dio un toque especial a su personaje en su primera audición. A pesar de lo que podamos pensar, el gesto de mover el dedo cuando hablaba con Tony fue de su cosecha propia. Algo que a Stanley Kubrick le encantó.
1 año para 1 toma
Stanley Kubrick tuvo que aceptar que tendría que rodar la escena de la sangre y el ascensor en solo tres tomas. Pero finalmente el director necesito casi un año para grabarla como quería. Cada vez que el ascensor se abría (después de preparar cada toma durante una semana más o menos) y salía la sangre, el director comentaba que no parecía sangre en absoluto, que había que volver a empezar.
Táctica de Kubrick
Aunque Jack Nicholson comentó que tenía una buena relación con Stanley Kubrick, el director era una persona totalmente diferente con Shelley Duvall.
Kubrick se metía constantemente con la actriz y la menospreciaba comentándole que hacía perder el tiempo a todo el equipo. Con el paso de los años Duvall entendió que Kubrick lo hizo para sacar lo mejor de ella como actriz. Una de las tácticas del director fue obligar a todo el equipo a que fuera arisco con ella y no le hablasen salvo que fuera necesario.
Casting alternativo
Antes de completar el reparto, otros actores como Robin Williams o Robert De Niro fueron considerados para el papel de Jack Torrance. Pero Stanley Kubrick pensó que De Niro no era lo suficiente psicótico para el papel después de verle en 'Taxi Driver', y que Williams lo era demasiado.
También se consideró a Harrison Ford por un breve periodo hasta encontrar en Jack Nicholson al actor perfecto.