La ficción parece tener límites y con la ley hemos topado. 'A serbian film' continúa su tour de polémica ahora con el respaldo de la Fiscalía de Barcelona, que ha denunciado a Ángel Sala, director del Festival de Sitges, por exhibirla en el último certamen.
El País desveló ayer que se habían tomado medidas legales contra Sala por permitir el pase, en una única sesión a medianoche y fuera de concurso, de la cinta de Srdjan Spasojevic. Se le acusa de exhibición de pornografía infantil a causa de dos imágenes donde se abusa de un recién nacido y un niño de cinco años. En el primer caso se trata de un muñeco y en el segundo no se ve por pantalla la acción.
En el XXI Semana de Cine Fantástico y de Terror de San Sebastián se prohibió su exhibición y en Reino Unido se recortaron 5 minutos. Ayer mismo, la cinta también se llevó uno de los premios especiales de Fantasporto.
Mi compañero Óscar pudo verla Sitges y estas fueron sus impresiones:
"'A serbian film', la película que más morbo y expectación había creado entre el personal. Desgraciadamente, el film de Srdjan Spasojevic contiene más pretenciosidad que calidad, en un torture porn extremo a ritmo de música industrial y filmación atropellada, que desfallece en el momento de filosofear en torno a la perversidad del ser humano. Así pues, el film serbio parece querer supeditar en todo momento el fondo a la forma, cuando debería ser precisamente a la inversa."
La cinta nos presenta a Milos, padre de familia y antigua estrella del porno, que echa de menos sus tiempos de gloria, cuando podía proporcionar a su mujer e hijo una vida de lujo. Cuando un misterioso director de cine le propone un suculento trabajo, decide volver al ruedo. Lo que no espera es que lo que están a punto de filmar sea desgarradoramente real.