Junto con Megaupload cae también Megavideo, la web de la compañía de streaming de vídeos y principal plataforma para ver películas online, y Megaporn, hermana picante con vídeos de carácter pornográfico. Esta decisión de las autoridades norteamericanas llega en un momento de importante debate acerca de las descargas ilegales y la piratería, con las leyes SOPA y PIPA en entredicho por gigantes de Internet como Google o Wikipedia.
En cuanto saltó la noticia, los usuarios comenzaron a protestar de forma masiva, convirtiendo el cierre de la web en un fenómeno en las redes sociales, en las que por ejemplo se comenzaron a pedir 72 minutos de silencio por su muerte, en referencia al tiempo de espera cuando superamos el uso gratuito de Megavideo.
Pero no han sido los únicos en reaccionar rápidamente. La organización de hackers Anonymous ha visto en Megaupload su nuevo motor para protestar, y con la conocida como "Operación Megaupload" han cerrado varias webs gubernamentales y de algunas empresas en represalia.
No hablamos de pequeños organismos. Todo comenzó con la página del Departamento de Justicia y la web de Universal Music. Posteriormente pasó a la Recording Industry Association of America y la Motion Picture Association of America, las organizaciones de música y cine, además de la página de la ley anti piratería francesa que permite a los jueces cortar conexiones de los infractores.
La joya de la corona: el FBI
El plato fuerte de la vendetta se sirvió con la caída de la web del FBI, los organizadores del arresto que, según ellos, llevan dos años investigando las entrañas de Megaupload y que la página, que representa el 4% del tráfico total en la Red, ha causado pérdidas de más de 500 millones de dólares a los titulares de copyrights.
Por lo pronto se ha pedido prisión preventiva a los empleados de Megaupload que han sido arrestados, mientras que Anonymous avisa que "Somos una legión, nunca perdonamos, nunca olvidamos. Estad pendientes", dando posibilidad a nuevos ataques.
Mientras, el descontento de muchos usuarios sigue aumentando. No sólo los miles de personas que utilizaban Megaupload para el streaming de películas o las descarga de las mismas, sino por que no hay que olvidar que la web fue creada para guardar y compartir todo tipo de archivos, y ninguno de ellos, sea del tipo que sea, es accesible ahora. ¿A dónde llevará todo este culebrón anti piratería?