También conocido como Southern Gothic, el concepto de American Gothic viene directamente de la corriente literaria que en Estados Unidos empezaría a tener relevancia en el siglo XIX, y la cual nos presentaba elementos propios de una nación traumada por la guerra civil, y que derivaría a ese drama sureño en el que las confrontaciones entre norte y sur, los roles de género, la esclavitud, el racismo y la violencia eran partes inamovibles de una serie de arquetipos que tienen como principal impulsor a la figura de Mark Twain.
En el cine, son ya parte de su historia algunos de los títulos más aclamados por público y crítica de todos los tiempos, los cuales se adscriben a la perfección en lo que se denomina como drama sureño, siendo dos de los grandes ejemplos los de 'La noche del cazador' o 'Matar a un ruiseñor'. En ellos, se refleja a la perfección ese espíritu del sur que se ha convertido en tópico para el cine venidero, y que ya en los sesenta encontraría un nuevo filón que explotar: el del terror y el thriller psicológico.
Horror en la América profunda
Tras el éxito de '¿Qué fue de Baby Jane?', Robert Aldrich volvía a contar con Bette Davis para protagonizar su siguiente apuesta por el cine de género, 'Canción de cuna para un cadáver', título que no solo pasaría a la historia por la no interpretación de Joan Crawford, quien sería sustituida por Olivia de Havilland, sino porque en él se reflejarían todos los elementos que posteriormente han estado presentes en el American Gothic.
Desde entonces, y teniendo en cuenta que a la hora de presentar historias estremecedoras, siempre han jugado a su favor elementos del folclore como el vudú, el paganismo y los ritos ancestrales ligados a las comunidades de fanáticos religiosos, han sido varios los ejemplos que, tanto en el cine como en la televisión, han ido conformando un universo propio que sigue siendo objeto de fascinación a día de hoy para el público.
Es por ello que en el presente especial hacemos un recorrido que se inicia en 1964 y que nos deja varios apuntes sobre lo que podemos entender como ese gótico americano con claras reminiscencias al horror.
American gothic exploitation
'Canción de cuna para un cadáver'
Año: 1964.
Dirección: Robert Aldrich.
Sinopsis: Bette Davis se convierte en Charlotte Hollis, una rica viuda que deberá afrontar el hecho de que quieren expropiar su plantación y que se verá en la obligación de pedir ayuda desesperada a su prima, interpretada por Olivia de Havilland. El lugar, donde la protagonista lleva recluida desde hace décadas tras la muerte de su marido, se convertirá en el enclave perfecto para desarrollar un thriller psicológico con todos los elementos del drama sureño, el cual pasaría a ser uno de los ejemplos más notorios del American Gothic.
'The Legend of Boggy Creek'
Año: 1972.
Dirección: Charles B. Pierce.
Sinopsis: Convertido por méritos propios en uno de los mockumentaries de culto más aclamados por ciertos sectores de la crítica, 'The Legend of Boggy Creek' se adentraba en la profundidad de los bosques de Arkansas para arrojar algo de luz sobre la leyenda del Bigfoot, mucho antes de que Ruggero Deodato sorprendiera al mundo con 'Holocausto caníbal' y dejando plasmada en el celuloide la atmósfera de ese horror intangible, que muchos han adscrito al American Gothic desde hace décadas.
'El más allá'
Año: 1981.
Dirección: Lucio Fulci.
Sinopsis: Tuvo que venir uno de los maestros del terror italiano para presentarnos el que pasó a ser uno de los ejemplos de American Gothic más terroríficos e hilarantes de todos los tiempos. Así, 'El más allá' no solo servía como segunda entrega de la Trilogía de las Puertas del Infierno de Fulci, sino que pasaba a ser por méritos propios film de culto del terror de los ochenta en el que Catriona MacColl servía como protagonista de una historia de casas encantadas como pocas veces vista en pantalla.
'El corazón del ángel'
Año: 1987.
Dirección: Alan Parker.
Sinopsis: A camino entre el neo noir y el drama sureño, esta historia en la que Mickey Rourke encarnaba a un detective que era contratado por un misterioso Robert De Niro. El caso llevará al protagonista a adentrarse en el oscuro mundo del vudú y la magia negra.
'El cabo del miedo'
Año: 1991.
Dirección: Martin Scorsese.
Sinopsis: A principios de los noventa llegaba la segunda versión de la novela de John D. MacDonald, después de que en 1962 J. Lee Thompson dirigiese 'El cabo del terror' con Gregory Peck y Gregory Peck como protagonistas. En esta ocasión, Robert De Niro encarnaba a Max Cady, el violento delincuente que convertirá en una pesadilla la existencia de la familia del abogado al que acusa de haberle metido en prisión.
'Escalofrío'
Año: 2001.
Dirección: Bill Paxton.
Sinopsis: El American Gothic de manual se representa en esta historia en la que Matthew McConaughey encarna a un hombre que acude a un agente del FBI para revelar la identidad de un asesino conocido como La Mano de Dios. Será entonces cuando se desvele una historia de fanatismo religioso propiciada por el padre de este (Paxton), quien crió a sus hijos atemorizándolos y haciéndoles creer que el mundo estaba plagado de demonios a los que tenían que liquidar, siguiendo una especie de revelación profética.
'La llave del mal'
Año: 2005.
Dirección: Iain Softley.
Sinopsis: Con un guion de Ehren Kruger, Kate Hudson se convertía en la protagonista de una historia en la que, tras haber llegado hasta una siniestra casa en Nueva Orleans para cuidar de un anciano que acaba de sufrir una embolia, iría adentrándose en un oscuro mundo de secretos y tradiciones legendarias en torno a magia negra hasta llegar a un sorprendente desenlace que convertía 'La llave del mal' en uno de los títulos más sugerentes de principios de siglo.
'True Detective'
Año: 2014.
Dirección: Cary Fukunaga.
Sinopsis: La primera temporada de la aclamada 'True Detective' no solo ponía a Matthew McConaughey y Woody Harrelson en primera línea de batalla en cuanto a portentos interpretativos de la pequeña pantalla, sino que servía como viaje hasta el corazón de Luisiana para abrirse camino a través de los traumas de un par de detectives, quienes deberán lidiar con el espeluznante caso de un asesinato con ecos a un crimen ritual, que hace referencia a mitos Lovecraftianos y que alcanza un nivel de horror inimaginable.
'La seducción'
Año: 2017.
Dirección: Sofia Coppola.
Sinopsis: Tomando como referencia la novela de Thomas Cullinan, la cual ya había sido llevada a la gran pantalla por Don Siegel en 1971 como 'El seductor', Coppola toma todos los elementos de aquella y los dota de cierto aroma a 'Picnic en Hanging Rock', el film de culto de Peter Weir que sirve como espejo directo en el que se refleja este drama de época donde el romance y los celos alcanzan un nivel de perversidad tan elevado que le acabarán otorgando esa atmósfera enrarecida más cercana al horror que al melodrama.
'Heridas abiertas'
Año: 2018.
Dirección: Jean Marc Vallée.
Sinopsis: Sin duda, 'Heridas abiertas' es el caso más notorio de American Gothic que hemos podido ver recientemente en pantalla, y pese a que muchos puedan pensar que se trate de un drama sureño como otro, el hecho de que su ambiente vaya enturbiándose a medida que vayamos ahondando en los traumas de una ebria y fabulosa Amy Adams, hará que la deriva a la que el público deba enfrentarse termine por ser algo mucho más cercano al psychothriller de los noventa (con madre dominante incluida, interpretada por una siniestra Patricia Clarkson) que al melodrama televisivo sureño con tintes de culebrón, que es la etiqueta con la que muchos tacharon en un primer momento esta nueva adaptación de la perversa obra de Gillian Flynn.