Jennifer Lawrence fue una de las responsables de dar visibilidad a algo que todo el mundo conocía pero pocos tenían la intención de hablar. El mundo del espectáculo no se libra de la desigualdad salarial que sufren las mujeres, ya que como en la mayoría de trabajos, no existe un equilibrio entre ambos géneros que realizan una misma labor.
La actriz, que tras descubrir por el ciberataque a Sony que cobró infinitamente menos que sus compañeros de reparto en 'La gran estafa americana', no tardó en pronunciarse mediante una carta pública. Ahora su compañera de reparto Amy Adams, a través de una entrevista en la edición británica de GQ, se ha pronunciado al respecto además de aportar un curioso detalle del rodaje de dicha película.
La actriz revela que sabía que cobraba menos que Bradley Cooper, Christian Bale o Jeremy Renner pero que no había querido hablar de ello antes porque " estaba en desacuerdo, no con Jennifer [Lawrence] en concreto, sino con la gente que tenía una opinión en cómo las mujeres tenían que negociar". La actriz, que ha estado nominada 5 veces a los premios Oscar, expresó su opinión sobre las negociaciones en Hollywood alegando: "La verdad es que contratamos a gente para que negocien en nuestro nombre, hombres y mujeres... Sabía que estaba cobrando menos y aun así acepté el trabajo porque la opción, al final, es o lo haces o no. Por lo que tienes que decidir si merece la pena. Eso no significa que me gustara".
La pesadilla de Amy
¿Pero realmente le mereció la pena su trabajo en la película de David O. Russell? A pesar de sus 10 nominaciones a los premios Oscar, incluyendo la nominación de Adams a Mejor Actriz Principal, las opiniones sobre este largometraje dividieron tanto a la crítica como al público sin saber, a día de hoy, si fue una buena película o la peor que David O. Russell ha hecho. Además, en el mismo artículo, Adams admite que el director norteamericano consiguió hacerla llorar más de una vez durante el rodaje.
"Lo hizo... Estaba desolada en el set. Quiero decir, no todos los días pero sí la mayoría. A Jennifer Lawrence no parece importarle, es como anti adherente. Yo no lo soy". A lo que añade que "no me gusta ver que tratan mal a las personas, no me parece bien. Para mí, la vida es más preciada que hacer películas. Esto me enseñó a separar el trabajo del hogar, porque no podía llevar mi mala experiencia en el rodaje a casa con mi hija". Dejando a O. Russell de lado, la actriz vuelve bajo la dirección de Zack Snyder en 'Batman v Superman: El amanecer de la Justicia', en cines el próximo 23 de marzo.