Ya ha llegado a los cines la tercera entrega de 'AAnimales fantásticos', los spin-off/precuelas de 'Harry Potter' centrados en Newt Scamander (Eddie Redmayne) y Albus Dumbledore (Jude Law). 'Animales Fantásticos: Los secretos de Dumbledore' nos lleva de nuevo a un Wizarding World en el que la amenaza de Gellert Grindelwald (Mads Mikkelsen) es cada vez mayor a pesar de que sigue en busca y captura. Esta nueva entrega está marcada por un importante momento político dentro del mundo mágico: las elecciones a jefe supremo de la Confederación Internacional de Magos.
Aunque puede que este organismo te pille por sorpresa cuando vayas a ver la película, J.K. Rowling lleva mencionando la Confederación desde los primeros libros de 'Harry Potter'. Si cada país tiene su Ministerio de Magia, la Confederación Internacional de Magos es descrita como las Naciones Unidas del mundo mágico. Está compuesta por delegados de los Ministerios de Magia de todos los países y cada cierto tiempo se celebran elecciones a nivel mundial en las que se elige al presidente, llamado jefe supremo. En el caso de 'Los secretos de Dumbledore', el actual jefe supremo es el alemán Anton Vogel (Oliver Masucci), y los principales candidatos a sucederlo serán Liu Tao (Dave Wong), de China, y la brasileña Vicência Santos (María Fernanda Candido).
El Estatuto Internacional del Secreto Mágico
Como las Naciones Unidas, este organismo nació con el objetivo de impulsar la paz y cooperación entre los distintos gobiernos mágicos del mundo. Pero su principal aportación al mundo de los magos y brujas fue establecer en 1692 el Estatuto Internacional del Secreto Mágico. Esta polémica normativa consignó a todos los magos del mundo a ocultar a los muggles todo lo que tuviera que ver con la magia para evitar que las "cazas de brujas" fueran a más. Por eso los magos y brujas tienen que vestir como muggles, no se permite hacer magia delante de muggles (salvo en contadas excepciones o casos de fuerza mayor) y todas las instituciones mágicas, como el Ministerio, los colegios o áreas como el callejón Diagon permanecen ocultas entre las calles de las ciudades transitadas por la población no mágica. La Confederación pasó a encargarse de que se preservara ese Secreto, interviniendo por ejemplo con los alistamientos de yetis en el Tibet o impulsando la Ley Rappaport en Estados Unidos en el siglo XVIII, llevando a la segregación total de magos y nomaj cuando la sociedad mágica estuvo a punto de ser revelada por un nomaj llamado Bartholomew Barebone. También tienen un comité encargado de la educación de brujas y magos a nivel internacional, llevando un control de las principales escuelas de magia del mundo, y colaboran para la organización de eventos globales como el Mundial de Quidditch.
El Estatuto Internacional del Secreto Mágico ha sido siempre una "patata caliente" en el mundo mágico porque son muchos magos los que no entienden por qué tienen que ser ellos los que se esconden cuando podrían doblegar a los muggles con bastante facilidad. Entre ellos se encuentra Grindelwald, que busca la hegemonía del mundo mágico, pero claro, aplastando el mundo muggle. ¿Qué intereses tendrá en las elecciones a jefe supremo de la Confederación? ¿Cómo encajará con su plan? ¿Qué harán Albus Dumbledore (quien, por cierto, llegó a ser Jefe Supremo muchos años después) y los demás para impedirlo? Ya podemos descubrirlo en cines con 'Animales Fantásticos: Los secretos de Dumbledore'.
