Affleck terminó llevándose tres máscaras doradas: montaje, película y, por supuesto, director. Ese premio que no se llevará en la gala de la Academia de Hollywood. Pero eso poco importa ya, teniendo en cuenta que se ha llevado la mayoría de las menciones a director del año.
'Lincoln' era una de las favoritas, con siete nominaciones, y casi se va de vacío, de no ser por el evidente Daniel Day-Lewis. En su lugar, ha reaparecido 'Skyfall' con sus premios a mejor película británica y banda sonora. Cada país parece tirar para casa. En las categorías interpretativas hubo pocas sorpresas, con Anne Hathaway y Christoph Waltz como actriz y actor de reparto. Waltz dejó sin premio a Javier Bardem. Emmanuelle Riva y su premio a mejor actriz fue quizás el premio más inesperado de la noche, pero de nuevo, este año ese hueco es siempre un misterio. Juno Temple se llevó el premio, votado por el público, a estrella emergente.
Tarantino, el escritor
Quentin Tarantino pudo subir al escenario para recoger el premio a mejor guión original por 'Django desencadenado', una estatuilla muy bien recibida por el público. 'El lado bueno de las cosas' tuvo que conformarse con mejor guión adaptado. En las categorías técnicas despuntaron 'Los Miserables', 'Anna Karenina' y 'La vida de Pi', siendo 'Brave (Indomable)' la triunfadora en la estatuilla de cine animado. Otra ceremonia más en la que 'The Master' se queda con las manos vacías.
Recordad que ya podéis leer la lista completa de nominados y ganadores a los BAFTA 2013. La gala, presentada con mucha elocuencia por el gran Stephen Fry, tuvo lugar en la Royal Opera House de Londres. Hubo risas (los chistes de Fry). Hubo lágrimas (las de Bradley Cooper cuando 'El lado bueno de las cosas ganó el BAFTA' a Mejor guión adaptado). Hubo desapariciones (la de Eddie Redmayne, supuestamente vomitando en el backstage). Hasta hubo una mención al Barça por parte de Danny Boyle. La Academia británica nos ha dejado una noche muy ágil aunque sobria, una buena forma para calentar de cara a los próximos Goya y Oscar. La carrera sigue tremendamente interesante.