Stan Lee, creador de 'Spider-Man', 'Iron Man' o 'Hulk' y padre de Marvel Comics, fallecía a causa de una neumonía el pasado 12 de noviembre a los 95 años en el hospital Cedars-Sinai de Hollywood. Casi de inmediato, muchos de los intérpretes que tuvieron el placer de trabajar con Lee, entre ellos Tom Holland o Hugh Jackman, llenaron sus redes sociales con mensajes de despedida y fotografías junto al creador de algunos de los héroes más grandes de la compañía. Lejos de seguir el ejemplo del resto de sus compañeros de profesión, Armie Hammer ha tomado su cuenta de Twitter para manifestar que no está de acuerdo con la forma en la que la industria ha decidido despedir al fallecido:
Sabéis que adoro a Armie Hammer, pero a veces... https://t.co/n3MjDBPlAl Why so bitter, Armie? pic.twitter.com/vMMkdWFPw7
? Pedro J. García (@fuertecito) November 13, 2018
El actor de 'Call Me By Your Name' tuiteaba: "Estoy tan emocionado con todos esos famosos compartiendo fotografías de ellos mismos junto a Stan Lee... No hay una manera mejor de conmemorar a una absoluta leyenda que publicar una fotografía de ti mismo". Los comentarios contra las acusaciones del intérprete no se hicieron esperar. Un usuario le respondió: "¿Ellos... trabajaron con él...?", a lo que el actor contestó: "¿Yo... también...?".
what else u supposed to do when someone dies armie pic.twitter.com/Q8n9rtnoAu
? ? (@josiehunt_) November 12, 2018
"¿Qué se supone que debes hacer cuando alguien se muere Armie?", preguntaba una usuaria.
If your answer is "post a selfie" then I think we need a cultural revamp across the board.
? Armie Hammer (@armiehammer) November 12, 2018
"Si tu respuesta es «colgar un selfie» creo que necesitamos una renovación cultural en todos los ámbitos", contestó el intérprete.
Kudos to you for finding the strength at a time like this to school everyone on the proper way to grieve or remember someone who impacted their life.
? Tired (@CamilaCaBowYo) November 12, 2018
"Enhorabuena por encontrar la fuerza en una situación como esta para enseñar a todo el mundo la forma correcta de estar triste o recordar a alguien que causó un impacto en sus vidas".
Everyone greives differently; he obviously believes that posting a pic of his work would be better BUT also posting a pic with him is harmless. Ppl are remembering the enjoyable moments they were able to have with him while he was still alive.
? ?happi chil? (@CocoxGallagher) November 13, 2018
"Todo el mundo atraviesa una pérdida de forma diferente; obviamente él cree que publicar una foto de su trabajo sería mejor, PERO poner una foto junto a él no hace daño a nadie. La gente tan solo recuerda los momentos que pudieron pasar con él mientras estuvo vivo".
Maybe meeting him was the moment that touched them most ???
? Noelle ? ?? (@WakandanBucky) November 12, 2018
It's an honor when you're finally able to meet someone that you've always looked up to.
"¿Quizás conocerle fue el momento que más emocionó a estas personas? Es un honor poder conocer a alguien a quien siempre has admirado". El intérprete de 'La red social' decidió dar por zanjado el tema respondiendo: "Si Stan causó algún tipo de impacto en vuestras vidas con su trabajo, compartid el trabajo que más consiguió marcaros. Subir un selfie solo hace que su muerte trate sobre ti y lo guay que te sentías sacándote una foto junto a él".
Un último adiós
Por suerte, los fans de Marvel podrán despedirse una última vez del creador en la gran pantalla. Según Kevin Feige, presidente de Marvel Studios, Lee grabó varios cameos para las próximas películas de la compañía (por lo menos hasta 2019): "No os voy a decir en qué películas específicamente, pero a Stan Lee siempre le gustó una buena sopresa". De ser cierto, podemos esperar la presencia de Lee al menos en 'Capitana Marvel' y 'Vengadores 4'.
'Capitana Marvel' llegará el próximo 8 de marzo a nuestros cines.
Armie Hammer, de peor a mejor
'Blancanieves (Mirror Mirror)'
Pobre Armie Hammer. Tras 'La red social' (David Fincher) y 'J. Edgar' (Clint Eastwood), el actor se ponía a las órdenes del director indio Tarsem Singh en 'Blancanieves (Mirror Mirror)', nueva versión del clásico de los hermanos Grimm que, en esta ocasión, terminaba en aburridísimo despiporre.
Un caos narrativo, un circo visual repleto de elementos horteras y pasados de rosa, unas novedades argumentales de llevarse las manos a la cabeza y un Hammer perdido en medio del naufragio, teniendo que interpretar algunas de las escenas de mayor vergüenza ajena de su carrera. Un cuento con final infeliz.
'Mine'
El problema de 'Mine' no está, ni mucho menos, en Armie Hammer, quien realiza una de las interpretaciones más notables de toda su trayectoria profesional. Lo negativo de este debut cinematográfico de Fabio Guaglione y Fabio Resinaro reside en que se trata de una película muy aburrida. Mucho.
Incapaces de contagiar en el espectador el drama y el sufrimiento por el que está pasando este marine atrapado en un campo de minas, los directores prefieren apostar todo a la casilla de lo onírico y lo empalagoso, la torpe ensoñación y el desenlace más absurdo. Y ahí está Hammer aguantando todo el peso de la cinta, ofreciendo un trabajo impecable entre las limitaciones del contexto. No es que el actor sea lo mejor de 'Mine', es que está muy por encima de ella.
'Operación U.N.C.L.E.'
Para venir firmada por Guy Ritchie, 'Operación U.N.C.L.E', sorprendía, y mucho, por apostar de manera tan rotunda por la contención, el detalle y hasta la delicadeza. Un juego de espías, organizaciones criminales, secuestros, mentiras y persecuciones que, por tener, tiene hasta científicos malvados de manual. Un homenaje sentido y honesto al género que, por desgracia, termina siendo un irregular espectáculo a pequeña escala con Armie Hammer y Henry Cavill perdidos en busca de su carisma.
Afortunadamente, el encanto y sensualidad de Alicia Vikander y un acabado visual elegante y mimoso con los detalles terminando salvando los muebles. Tras un prólogo correcto, la película decide descansar en ratos muertos, lagunas de ritmo que dejan a la película en tierra de nadie. A última hora, demasiado tarde, Ritchie decide imprimir algo de su talento visual, elevando el nivel. Un pasatiempo con destellos, una pequeña gran decepción con la que Hammer desaprovechó la (evidente) oportunidad de machacar en talento a esa piedra en forma de compañero de reparto apellidado Cavill.
'J. Edgar'
Saltar de David Fincher a Clint Eastwood no está nada mal para unos primeros compases de trayectoria en los que Armie Hammer empezaba a mostrar un envidiable buen olfato para escoger proyectos. Esa indiscutible virtud se tambalearía en el futuro, pero, en este instante de su carrera, todo parecía a favor. 'J. Edgar', biopic de una de las figuras más controvertidas de la historia de Estados Unidos, el hombre gracias al cual existe el FBI tal y como lo conocemos, sí, pero también un ser humano lleno de fisuras e incertidumbres, dudas y secretos, inseguridad y temores, le sirvió a Eastwood para ofrecer otra de esas lecciones de cine clásico y comedido con despuntes de genialidad abrumadora. La crítica y los espectadores, sin embargo, no terminaron de conectar con ella, acusándola de, vaya sorpresa, aburrida y reiterativa.
Y es una pena, porque estamos ante una película que, en su considerable lista de elementos a favor, cuenta con un reparto por encima del notable. Comenzando con un tremendo Leonardo DiCaprio, pasando por la siempre excelsa Judi Dench y finalizando en el estupendo trabajo de Armie Hammer, 'J. Edgar' se mantiene a flote como una de las cintas más incomprendidas de la última etapa de su director.
'Animales nocturnos'
Armie Hammer no necesita ocupar demasiado tiempo en pantalla para que el espectador sepa entender lo que está pasando por la cabeza y el corazón de su personaje en la notabilísima 'Animales nocturnos'. Relegado a un papel claramente secundario, el actor aprovecha cada una de sus escenas para transmitir, con suma delicadeza y precisión, los conflictos que marcan su arco dramático. Eclipsado por una soberbia Amy Adams, Hammer mantiene siempre la calma y el espacio, brillando desde la aceptación de lo mínimo. Complicado extraer más virtudes de menos espacio.
'Final Portrait. El Arte de la Amistad'
Este biopic sobre uno de los tramos vitales de la historia del pintor suizo y escultor Alberto Giacometti, escrito y dirigido por Stanley Tucci, es uno de esos ejemplos claros de películas orientadas, de manera casi exclusiva, a mostrar una especie de 'batalla' interpretativa entre dos actores que deben cargar con todo el peso del conjunto. En esta ocasión, esta responsabilidad recae sobre los hombros de Armie Hammer y Geoffrey Rush. ¿La victoria? Para el segundo de ellos.
Poca sorpresa, por más que admiremos a Hammer, quien, insisto, realiza un trabajo espléndido, Rush es uno de los grandes, un tipo que hace que todo parezca fácil, real, natural, interesante. De hecho, durante gran parte de 'Final Portrait. El Arte de la Amistad', Hammer parece embobado, disfrutando de la interpretación de su legendario compañero de reparto.
'Free Fire'
Después del éxito crítico obtenido con la notable 'High-Rise', el director y guionista Ben Wheatley regresaba con una propuesta que se movía constantemente en el terreno del disparo y el diálogo, la bala y el verbo, la sangre y la réplica. 'Free Fire' tardaba cerca de veinte de sus noventa minutos en presentar a sus personajes y, a continuación, comenzaba un tiroteo que ocupaba todo el tiempo restante.
Una cinta que quedaba por debajo de sus posibilidades (y expectativas), que miraba a Scorsese y Tarantino con devoción, pero sin rozar talones, y que, finalmente, dejaba cierto sabor agridulce por lo que pudo haber sido y no fue. Sin embargo, quedaba fuera de toda duda un reparto maravilloso en el que Armie Hammer cumplía a la perfección con su papel de tipo tan obsesionado por sobrevivir como por mantener su traje intacto. Mención especial para su primera aparición, al más puro estilo John Wayne. Clase y elegancia pura.
'El nacimiento de una nación'
Sepultada por completo a raíz de la polémica que rodeó a su director, guionista y protagonista Nate Parker, 'El nacimiento de una nación' pasó de fenómeno cinematográfico destinado a arrasar con todos los premios del mundo, Oscar incluidos, a cinta casi invisible en todo el mundo. En cualquier caso, y centrándonos exclusivamente en sus méritos artísticos, la película de Parker vendría a ser algo parecido a una combinación de 'Braveheart' con '12 años de esclavitud' tan carente de sutileza como sobrada de épica y rabia emocionante.
Rozando el ensimismamiento y el exhibicionismo más gratuito en su mirada hacia la esclavitud y el racismo, 'El nacimiento de una nación' prefiere siempre el hachazo antes que el susurro. Una opción tan respetable como cualquier otra que funciona gracias a la contundencia de su director y a un reparto en el que destaca un Armie Hammer capaz de pasar de la comprensión al odio en lo que dura un trago de ron a palo seco. Una interpretación que tenía todas las papeletas para haber sido un festival del exceso, especialmente tras el punto de inflexión que sufre en el nudo de la historia, pero que el actor maneja siempre con equilibrio y control.
'El llanero solitario'
Aquí, justo aquí, fue el punto en el que la carrera de Armie Hammer estuvo muy cerca de hundirse para siempre. Y habría sido una injusticia demasiado grande. Y es que es una auténtica pena que esta adaptación de un serial radiofónico que conquistó a millones de oyentes haya pasado a la historia, exclusivamente, por su espectacular batacazo en la taquilla. Las expectativas, y los prejuicios, se encargaron de vender 'El llanero solitario' como una especie de 'Piratas del Caribe' en versión indios y vaqueros. Grave error. Gore Verbinski y Johnny Depp eran lo único en común que podían tener dos propuestas completamente diferentes entre sí.
En el caso que nos ocupa, tanto el director como su protagonista, un Hammer entregado a la causa de inicio a fin, demuestran un cariño y un respeto total por el personaje y la aventura tradicional, casi de cuento para dormir, consiguiendo una película claramente imperfecta e irregular pero repleta de hallazgos visuales y escenas mayúsculas. El público terminó de hundir un trabajo que la crítica recibió entre la frialdad y la decepción. Algunos, pocos pero fuertes, seguiremos defendiendo 'El llanero solitario' como un blockbuster notable, una de esas películas que merecen ser reivindicadas. No, no fue el trampolín al éxito esperado para Hammer, pero queda como una de las joyas ocultas de su trayectoria.
'La red social'
David Fincher lo tuvo claro: Armie Hammer interpretaría a los gemelos Winklevoss, fuente de la idea original de Facebook, sin ayuda extra. Para ello, el genio detrás de 'La red social', se sirvió de los avances más espectaculares que la tecnología puso a su disposición para convertir la idea en brillante realidad. Uno de los elementos más destacados en relación a una de esas interpretaciones que llegan para marcar trayectorias profesionales.
De hecho, Hammer vivió aquí su primer gran momento de popularidad, recibiendo aplausos y un buen número de críticas positivas gracias a un trabajo que, naciendo de la seriedad, lo gélido e, incluso, la frustración, termina calando en el espectador. Por momentos, uno parece sentirse más cerca de los Winklevoss que de ningún otro personaje de la película. Méritos para Armie.
'Call Me By Your Name'
Esta adaptación de la novela de André Aciman es, sin lugar a dudas, una de las historias de amor más seductoras, apasionadas, melancólicas e inolvidables que se ha visto en el cine en mucho, mucho tiempo. Un primer romance que llega para poner todo patas arriba y, al mismo tiempo, colocar cada cosa en su justo lugar. Incluyendo las heridas y cicatrices quemadas al calor de una chimenea.
Comandada por un cineasta en pleno estado de inspiración, Luca Guadagnino, esta obra maestra deposita el tremendo peso de sus emociones sobre los hombros del maravilloso Timothée Chalamet y un Armie Hammer que entrega su mejor interpretación hasta la fecha. Cuerpo y alma, sensualidad y misterio, presencia y ausencia. Hubiera merecido mucha más suerte en una carrera de premios en la que la industria dejó pasar una oportunidad perfecta para reivindicar y celebrar el talento de un actor que se fundió con su personaje hasta el mismo límite de desaparecer en la pantalla. Y de quedarse a vivir en nuestra memoria. Todo Hammer empieza y termina en 'Call Me By Your Name'.