Parece que Daniel Craig es tan proclive a un martini (mezclado, no agitado) como el mismísimo James Bond. A la fiesta del final dle rodaje de 'No Time To Die' en Matera, Italy, la 25ª entrega de la franquicia de '007', Craig admitió que estaba "bastante borracho" mientras pronunciaba un discurso de despedida delante del equipo.
"Solo quiero decir, y estoy bastante borracho en este momento y por eso no voy a seguir mucho, esta ha sido una de las experiencias mejores y más geniales que nunca he tenido," dijo Craig, al lado de un pastel temático de Bond. "Habéis hecho un trabajo maravilloso, todos vosotros. No podría estar más orgulloso de haber trabajado con cada uno de todos vosotros en esta producción. Me gustaría agradecerte, Barbara (Barbara Broccoli, la productora), por esta noche".
El alivio de Craig es comprensible, ya que el rodaje tenía tantos obstáculos antes de esta fiesta. Parecía que la película 'Bond 25', como se la conocía hasta hace poco, fue maldita desde el principio. Al concluir la película anterior, 'Spectre', Craig dijo que preferiría "cortarse las venas" antes que hacer otra película como el agente secreto. Esta energía negativa le persiguió al principio de la producción de 'No Time To Die'. Abundaron las heridas durante el rodaje - Craig necesitó cirugía para una lesión en el tobillo y un miembro del equipo resultó herido por una explosión controlada en Pinewood Studios. Además, el estudio tuvo problemas con el director original, Danny Boyle, y con una serie de incidentes con un mirón en el estudio.
Si fuéramos Daniel Craig, necesitaríamos un martini, también. Pero, como demuestra la fiesta, hay luz al final del túnel ahora que la producción ha concluido y la película se va a estrenar en abril de 2020 sin, esperamos, más contratiempos.
'No Time To Die' empieza en Jamaica, donde Bond se está relajando después de que abandonara el servicio secreto. Pero no tarda mucho en volver al mundo de agentes y acción cuando un agente de la CIA, Felix Leiter (Jeffrey Wright), le pide ayuda con una operación para rescatar a un científico secuestrado. Seguro que podemos esperar intriga, acción y, sin duda, algún que otro martini.