"No sé si nos lo puedes confirmar, pero he escuchado un rumor de que puede haber una película de 'Breaking Bad'", le dice Jimmy Fallon a Bryan Cranston, quien interpretó al incombustible Walter White en la serie. "Puedo decir, y anunciar esta noche, delante de tu audiencia, una noticia exclusiva: Puedo confirmar que hay rumores de una película de 'Breaking Bad' circulando por ahí", bromeó el actor.
Cranston no confirma ni desmiente nada. El pasado noviembre, The Hollywood Reporter afirmaba que Vince Gilligan, el creador de la serie, había escrito un guión titulado 'Greenbier', que iban a comenzar a rodar de manera inminente en Nuevo México. Desde entonces, se ha rumoreado sobre si la posible película sería una precuela al estilo 'Better Call Saul', o una secuela y si Aaron Paul la protagonizaría.
En una entrevista en Entertainment Weekly, Bryan Cranston ha dicho: "Si ahora mismo me llamara Vince Gilligan para hacer la película, que no sé si va a ocurrir, le diría que sí en ese mismo momento". El actor asegura que 'Breaking Bad' fue la película que le cambió la vida y le debe todo el resto de su carrera a Gilligan. Aunque sí que asegura que no está dispuesto a cambiar el final de la serie: "No quiero que Walter White al final no muriera y que se vuelva a continuar la serie desde entonces. Tiene un comienzo, un desarrollo y un final perfecto".
Expandiendo los universos de las series
En el caso de que se confirme la película de 'Breaking Bad', no sería la única serie que está intentando expandir su universo a través de otros formatos. 'The Walking Dead' tiene confirmadas tres películas, que se estrenarán en televisión, sobre Rick Grimes (Andrew Lincoln) en la que narrarán la vida del personaje después de dejar la serie de manera definitiva. Otras series como 'Juego de Tronos', 'Orange Is the New Black' y películas como 'El Señor de los Anillos', están buscando nuevos caminos en la televisión mediante nuevas ficciones.
10 curiosidades de 'Breaking Bad'
No sin nuestro Jesse
¿Os imagináis 'Breaking Bad' sin Jesse Pinkman? Pues, aunque parezca absolutamente increíble, los principales responsables de la serie sí. Y es que, mientras se estaban escribiendo los guiones de la primera temporada de la serie, Vince Gilligan y su equipo tenían la idea fija de matar al personaje que interpretó, de manera inolvidable, Aaron Paul.
Sin embargo, la combinación entre la huelga de guionistas de 2007 y el trabajo abrumador del actor provocó un cambio de decisión que, a la vista de los resultados, supuso el primer gran triunfo de la serie.
Drogas no
La metanfetamina funcionó casi como un personaje más dentro de 'Breaking Bad', pero lo cierto es que nunca se llegó a mostrar con la precisión exacta. La culpa, en este caso, fue de los profesionales de la mismísima Administración para el Control de Drogas, la famosa DEA, quienes le pidieron a Vince Gilligan que, por favor, no enseñaran la manera en la que los personajes de Walter y Jesse daban forma a la droga puesto que, si lo hacía de una manera fiel y explícita, muchos espectadores podrían sentir la tentación de probar en casa. Y acertar. Y acabar mal. Muy mal.
Lo sentimos, Samuel
Entre los fans más destacados de 'Breaking Bad' encontramos a, nada más y nada menos, que Samuel L. Jackson. El actor, quien confesó en numerosas ocasiones su devoción por la serie, estaba tan entusiasmado con ella que se puso en contacto con los productores para pedirles salir en ella. Eso sí, con una condición muy clara: Ir vestido de Nick Fury. Gilligan y los suyos, en un alarde de coherencia y sentido común, no dudaron ni un segundo en rechazar la oferta de Jackson.
Bryan y los polis
Los problemas de Bryan Cranston con la policía no son solamente cosa de 'Breaking Bad', como confesó el propio actor en un podcast estadounidense donde contó una experiencia sucedida mucho antes de que se empezara a ganar la vida en el mundo de la interpretación. En palabras de Cranston, todo sucedió cuando trabajaba como camarero en un restaurante de Florida bajo las órdenes de un chef insoportable llamado Peter Wong. Al parecer, un tiempo después de comenzar en aquel trabajo, se encontró el cuerpo sin vida de Wong, lo que provocó que la policía investigara, entre otros, a todos los profesionales del local.
Y eso incluía a un Cranston que, al ser preguntado por los agentes, no tuvo mejor idea que asegurar que todo el mundo que conocía a Wong quería acabar con él. A partir de ahí, la policía le siguió investigando durante un tiempo en el que fue señalado como sospechoso del asesinato. Ya sabéis, la realidad siempre supera a la ficción.
La Química y La Casualidad
La coincidencia y 'Breaking Bad' nunca se llevaron bien. Vince Gilligan sabía que cada elemento que apareciera en pantalla terminaría teniendo, antes o después, un sentido para la historia. Habría mil ejemplos para demostrar esta teoría, pero el mejor, sin duda, son los que tienen a la química como gran protagonista:
- La serie cuenta con 62 capítulos, una cifra que, en la tabla periódica, corresponde al Samario, un isótopo utilizado para tratar el cáncer de pulmón.
- El título del último episodio, 'Felina', está formado por las sílabas 'Fe' (Hierro), 'Li' (Litio) y 'Na' (Sodio), elementos presentes en la sangre, la fabricación de metanfetaminas y en las lágrimas. Por si os lo preguntáis, sí, todos estos factores se dieron cita en aquel desenlace inolvidable.
Final a lo grande
A pesar de que el desenlace de 'Breaking Bad' parece la despedida perfecta para la serie, no fue la última escena en ser rodada. Ese indudable honor corresponde a aquel último flashback donde nos encontrábamos a Walter y Jesse trabajando a la vieja usanza, un momento brillante con el que el equipo se despedía de la serie para siempre.
Motivo suficiente para, una vez finalizado el trabajo de rodaje, celebrar el adiós a lo grande. Un entusiasmo general tan desmedido que, al día siguiente, Bryan Cranston apareció con un tatuaje en el dedo con el logo de la serie. Genio y figura.
Los pasos hasta AMC
El proyecto de 'Breaking Bad' pasó por los despachos de, atención, Showtime, FX, TNT y hasta la mismísima HBO, antes de ser comprado por AMC. El canal, que por entonces ya contaba con una obra maestra en su poder, 'Mad Men', sumaba otra pieza fundamental en su historia. El resto de canales, por el contrario, tuvieron que estar mirándose con cara de tontos durante los años de emisión de la historia de Vince Gilligan.
Siguiendo las coordenadas
Si alguno de vosotros se planteó, o lo sigue haciendo, la posibilidad de seguir las coordenadas que aparecían en el boleto de lotería de Walter White que guiaba al personaje hacia el escondite de su dinero, ya os confirmo que no terminaríais bañados en dólares. Eso sí, acabaríais en los Q Studios de Albuquerque, donde se rodó gran parte de la serie. Menos es nada, ¿no?
El mérito de Gus
Otro de los cambios inesperados que tuvieron que realizar los guionistas de 'Breaking Bad' fue motivado por la inolvidable interpretación de Giancarlo Esposito. Y es que, en un primer momento, los responsables de la serie tenían claro que el villano, a partir de la tercera temporada, sería Hector Salamanca (Mark Margolis), una decisión que varió por completo tras descubrir el tremendo potencial del personaje de Gus Fring. Incontestable.
Buscando a Walter
La interpretación de Bryan Cranston como Walter White es, sin lugar a dudas, una de las más impactantes y memorables que se han visto en la historia de la televisión. Sin embargo, estuvimos muy cerca de perdernos este recital por culpa de los productores del canal AMC, quienes le ofrecieron el papel a, ojo, Matthew Broderick y John Cusack. Afortunadamente, Vince Gilligan se plantó y dijo que no haría la serie sin Cranston. Menos mal.