Cuando se anunció que el nuevo proyecto de Michael Bay después del fracaso en taquilla de 'La isla' sería llevar a los personajes de Transformers al cine, muchos le dieron automáticamente por muerto. Una historia de robots alienígenas que llegaban al planeta Tierra para pelear por su supervivencia y salvarnos a todos de una destrucción mundial no parecía la mejor opción posible para una carrera que necesitaba un éxito de manera inminente. Grave error. 'Transformers' llegó y arrasó con todo.
La crítica se mostró más benevolente que nunca con Bay y la taquilla respondió de manera más que contundente. No merecía menos. Teníamos ante nosotros un blockbuster familiar perfecto, la comunión total entre un director y un modelo de cine elevado a la categoría de arte a través del fuego y los escombros. Todo funcionaba a la perfección en una película que dignificaba un género siempre acosado por el prejuicio y la crítica fácil. Bay consiguió la victoria que necesitaba, resucitaba de la manera más épica posible y entregaba la cima de su trayectoria hasta la fecha.
Por supuesto, hablar de su argumento o intentar analizar los detalles de su historia estaría de más. Sí, es absurda, aunque comparada con las tramas vistas en el resto de la saga parece Shakespeare. En cualquier caso, no importa. Es una excusa, hay que entenderlo así, para sumar espectacularidad, espectacularidad y espectacularidad. Un derroche de set pieces de acción incansables en su búsqueda de La Escena Más Espectacular Del Año. En definitiva, DNI de Michael Bay impregnando absolutamente todo. A continuación, repasamos diez curiosidades y anécdotas de la mejor película del director. Grande, tonta, divertida, espectacular. Imprescindible para entender el universo de su director de la manera más completa.
10 curiosidades de 'Transformers'
Cambio de coche
A estas alturas (de saga), es imposible no relacionar a Bumblebee con un Camaro, pero en los primeros momentos del proyecto no estaba tan claro. De hecho, la primera opción era que el robot más entrañable de 'Transformers' se convirtiera en un Volkswagen Beetle, una posibilidad que Michael Bay anuló de inmediato al pensar que los espectadores compararían al personaje con Herbie. Sí, ESE HERBIE.
En cualquier caso, tampoco habría sido posible contar con un Volkswagen, ya que la empresa negó todos los permisos a Hasbro para usar cualquiera de sus modelos de vehículos para la película. Sus razones, contundentes, eran que no querían que sus coches se relacionasen con una trama marcada por la guerra. Y un no es un no.
Favoritismos
Una propuesta como 'Transformers', con un catálogo de robots tan espectacular como acertado, permite que el espectador tenga la oportunidad de elegir a su personaje favorito con especial facilidad. Una tentación a la que tampoco pudieron resistirse alguno de sus principales responsables.
Por ejemplo, Shia LaBeouf, antes de empezar a despotricar sobre la saga, confesaba que su transformer favorito era Bumblebee, personaje con el que compartía la mayor parte de escenas. Una elección que, por cierto, también compartía Steven Spielberg, productor de la película. En el caso de Megan Fox y Michael Bay, las preferencias van hacia el lado de los villanos, quedándose la primera con Starscream y el director con Bonecrusher. Para todos los gustos.
¿Robots hablando?
No es nada complicado imaginar a los productores de 'Transformers' contando dólares durante los meses posteriores al estreno de una película que arrasó con todas las taquillas que se encontró a su paso. Sin embargo, ese baño de éxito podría haber sido muy diferente si se hubiera decidido hacerles caso en los primeros momentos del proyecto.
Y es que, esos productores que se colocarían las medallas del triunfo, son los mismos que, cuando recibieron por primera vez la posibilidad de realizar la película, aseguraron que no veían nada claro que los robots tuvieran la capacidad de hablar ya que eso provocaría la carcajada de los espectadores. Visionarios.
Ayuda militar
El patriotismo es un elemento esencial, perfectamente reconocible, dentro de la trayectoria de Michael Bay. Nunca lo ha ocultado, es más, lo ha convertido en algo similar a un nexo común a lo largo de su carrera. En el caso de 'Transformers', claro, no fue diferente.
De hecho, esa relación pasional fue más recíproca que nunca ya que el ejército norteamericano participó directamente en el rodaje, prestando aviones, vehículos y uniformes para aumentar la sensación de realismo. Eso sí, los soldados involucrados en esta colaboración recibieron entradas gratis para ver la película después de su estreno. No todo iba a ser generosidad.
Sorpresa para Megan
No tenemos una certeza absoluta, pero estamos bastante seguros de que ningún otro miembro del reparto disfrutó tanto del rodaje de 'Transformers' como Megan Fox. La actriz, que tuvo aquí su primer gran papel dentro de la industria, confesó que no tenía ni idea de que era la coprotagonista de la historia hasta los últimos compases del rodaje: "Nadie había leído el guión entero. Mientras rodábamos no tenía ni idea de que yo era la chica de la película. Es decir, sabía que era la chica de Shia, pero no creí que mi papel fuera tan grande". Tampoco podemos echarle la culpa, después de todo, hablamos de un guión que estuvo protegido todo el tiempo para evitar su filtración.
(In)Coherencia Bay
Decir Gran Presupuesto y Michael Bay en una misma frase, más que una noticia, es algo obvio. Hablamos de un director acostumbrado desde prácticamente sus comienzos a contar con recursos millonarios para llevar a cabo sus películas. Los productores le dan su dinero con la confianza plena de que se va a observar en la pantalla y, aún más importante, van a recuperar la inversión.
Sin embargo, después de 'La isla', una de las pocas propuestas del cineasta que no terminó de reventar las taquillas como se esperaba, Bay estaba decidido a abandonar este tipo de proyectos y probar suerte con historias más pequeñas y sencillas, de un carácter más personal y autobiográfico, lo más alejado de Hollywood posible. Meses después, cuando se decidió por 'Transformers', Bay aseguró que nunca había hecho una película tan grande en toda su vida. Ya sabéis eso de que la cabra siempre tira al monte.
Pobre Arcee
En una primera versión del guión, 'Transformers' iba a contar con una presencia femenina de peso: Arcee, Autobot que controla 3 cuerpos diferentes y que iba a formar parte del ejército liderado por Optimus Prime. Sin embargo, la reacción de millones de espectadores alrededor del mundo al enterarse de esta noticia fue tan negativa que Bay y su equipo decidieron reemplazarla por Ironhide, un cambio cuestionable cuanto menos.
Datos espectaculares
Para entender la magnitud de un proyecto como 'Transformers', y reiterar la espectacularidad que rodea toda película firmada por Michael Bay, no hace falta más que comprobar datos. Seis meses de postproducción, más de 300 personas trabajando con horario de jornada intensiva, cerca de 10.000 partes animadas, de media, por cada uno de los Transformers y 18 horas de renderización por cada segundo con un robot en pantalla. Si eran seis personajes en plano, 108. Todo esto, hablando simplemente del apartado del proceso relacionado con los efectos especiales. Una absoluta barbaridad.
Sacrificios económicos
Siguiendo en la línea de hablar de cifras imposibles, los altos costes que requería una película de las dimensiones de 'Transformers' tuvieron un impacto directo en otros apartados del proyecto. El primero de ellos, el salario de Michael Bay, director que tuvo que reducir su salario en casi un 30%. Por supuesto, con la recaudación de la película, y sus secuelas, el balance terminó siendo más que positivo para él. Con mucha diferencia.
La influencia Spielberg
Steven Spielberg, culpable directo de convencer a Michael Bay para que se pusiera al frente de 'Transformers' tras una negativa previa por considerar que se trataba de un proyecto demasiado infantil, quiso también participar en aspectos relacionados directamente con la historia de la película.
Dentro de sus recomendaciones/consejos/ordenes, destaca su propuesta de que los protagonistas de la trama fueran un joven algo alocado y marginado y un transformer perdido y desorientados en un mundo que no es el suyo. Marca Spielberg dentro del espectáculo Bay. Combinación ganadora.