Mientras los dos bandos tratan de echarle la culpa al contrario, el público sigue rechazando la nueva versión de la querida familia de Marvel. Esta película ha pasado por una producción que tendrá que ser estudiada en las escuelas de cine para saber cómo no hay que actuar en cada paso de la creación cinematográfica.
Tras desvelarse que Josh Trank tuvo una actitud dubitativa en el set de rodaje y explosiva en el piso en el que se encontraba alquilado y que Fox le había puesto bajo una presión fuera de lo normal, THR ha recopilado nueva información acerca de esta complicada producción. Según la web: "Múltiples fuentes vinculadas al proyecto dicen que el director no produjo material que habría hecho el camino para una película rescatable. Y se resistió a recibir ayuda." De hecho, el realizador llegó a aislarse en una "tienda negra" bajo la que se encontraba el monitor y según una fuente: "Se iba a su tráiler y no se relacionaba con nadie."
En otros artículos ya se ha destacado la fría comunicación que mantenía con Kate Mara en el rodaje, pero al parecer sus manías no estaban dirigidas solo a ella: "Varias fuentes dicen que Fox se mantuvo al lado de Trank mientras forzaba un tono oscuro a jóvenes estrellas como Miles Teller, Michael B. Jordan, Kate Mara y Jamie Bell. 'Durante las tomas, le decía a los actores cuándo pestañear y cuándo respirar. Les seguía forzando para hacer su interpretación lo más plana posible.'"
Obviamente esas fuentes defienden la posición del estudio, pero hay otras que también confiesan que Fox no tuvo el mejor comportamiento posible: "La película estaba 'mal concebida, hecha por razones erróneas y no había visión tras la propiedad. Decid lo que queráis de Marvel, pero tienen una visión.'" También se destaca que se plantearon despedir a Trank antes de comenzar el rodaje, pero todo habría quedado retrasado. Al igual que se confirma el aglutinamiento de varios guionistas, como Drew Goddard, para cambiar el tercer acto de la película en el último momento.
"No lo creo"
Cuando todo el equipo de la película estaba esperando a que la película se estrenara para esconderse en sus casas y que pasara lo peor fuera, Josh Trank tuvo la idea de mandarles un correo en el que decía que la película es "mejor que el 99% de películas basadas en cómics que se hayan hecho." A lo que uno de los actores respondió: "No lo creo." Trank ya ha contratado a un abogado porque la situación se está saliendo de los límites de lo normal. A partir del 21 de agosto podremos comprobar en España si este caos se ha traducido en el producto final.
