'Capitana Marvel' ha aterrizado en los cines, y, con ella, los comentarios de los fans del Universo Cinematográfico Marvel que ya la han visto. Entre críticas y alabanzas, existe una pregunta repetida por muchos seguidores de la franquicia: ¿Por qué Nick Furia no llamó antes a Carol Danvers?
La relación entre Samuel L. Jackson y Brie Larson es casi tan buena dentro, como fuera de la pantalla, al menos así lo confesó el actor que interpreta a Nick Furia en una entrevista con eCartelera. Por eso nos extraña que, aunque sea por nostalgia, tardara tanto en llamarla.
Un periodista de Slash Film ha sido el primero en atreverse a preguntárselo directamente al mismísimo Kevin Feige. El presidente de Marvel Studios ha respondido con dos argumentos, que, como apunta el entrevistador, parecía traer preparados de casa. En primer lugar, Feige ha recordado que la Capitana explica a Furia que solo deberá llamarla cuando se trate de una "emergencia real", y, por tanto, los aprietos anteriores a 'Vengadores: Infinity War' no habrían sido lo suficientemente importantes (una ciudad no es lo mismo que el mundo entero).
No obstante, Feige destaca también que, aunque, por primera vez, viéramos el símbolo de 'Capitana Marvel' en el intercomunicador de Furia al final de 'Infinity War', el personaje de Samuel L. Jackson podría haberla llamado antes. "Que no le hayamos visto apretarlo, no significa que nunca lo haya hecho", ha explicado el directivo de Marvel Studios.
¿Qué opina Samuel L. Jackson sobre el tema?
En una entrevista con IGN, el intérprete de Nick Furia respondió a la misma pregunta que Feige, y su argumentación fue parecida.
"Ella dijo solo para emergencias. Otras emergencias pudieron solucionarse. Solo es una invasión alienígena, algo que se pudo solucionar. La mitad de la población no estaba muriendo, desapareciendo o lo que sea. Finalmente vimos una emergencia con la que sentí que necesitábamos su ayuda. Esto no tiene precedentes. ¿Cómo vas a pelear contra eso? Yo no puedo. Si yo no estoy aquí, necesito encontrar a alguien que venga y se encargue. Todas esas personas eran inservibles. Son geniales para lo normal, para un desastre mundial de cada día. Pero un tipo intergaláctico que tiene todas las Gemas del Infinito necesita un poco más", explicó Jackson.
Curiosidades de Samuel L. Jackson
Portero de lujo
Casi todos los actores han tenido comienzos difíciles en el inicio de su carrera. Y también es habitual que hayan trabajado de alguna que otra profesión diferente antes de llegar a ser estrellas del celuloide. El bueno de Samuel L. Jackson no es ninguna excepción, y es que trabajó como portero en los apartamentos del Manhattan Plaza; conocido hogar de diversos actores y artistas.
Adicciones varias
A pesar de lo bien que le ha ido en el negocio del espectáculo, Jackson no pareció pasarlo tan bien cuando era más joven. El intérprete confesó que, hasta el año 1991, tenía un problema muy serio de adicción al alcohol y a las drogas. Finalmente, entró en rehabilitación y está limpio desde entonces. Justo dos semanas después de acabar su programa, interpretó a un drogadicto en el film 'Fiebre salvaje'.
Extrañas proezas
Como comentábamos, Samuel L. Jackson se ha podido divertir a lo largo de su carrera con todo tipo de papeles imaginables. Además, entre sus logros, cuenta con una curiosa proeza que no podemos dejar de mencionar. El actor no siempre sobrevive en sus películas, y es que ha sido comido por un tiburón en 'Deep Blue Sea', y por un dinosaurio en 'Parque Jurásico'.
Estudiante rebelde
Además de ser un actor dedicado, Samuel L. Jackson también es una persona comprometida con las desigualdades sociales, hasta un punto insospechado. De hecho, en el año 1969 fue expulsado de la Morehouse College tras tomar como rehenes a varios miembros de la junta directiva, entre los que se encontraba el padre de Martin Luther King. ¿Su queja? Que no había suficientes miembros negros en esa junta directiva, y que no existía programa de estudios afro-americanos.
Loco por el golf
Samuel L. Jackson es un enamorado del golf. Hasta ahí todo normal, pero las estrellas son excéntricas y, en ocasiones, lo llevan todo al extremo. Al intérprete le gusta tanto ese deporte que, en todos los contratos que firma, incluye una cláusula en la que, se ruede donde se ruede la película, tenga acceso fácil a campos de golf cercanos.
Tartamudo
Cualquiera lo diría viéndole en pantalla ahora como uno de esos actores omnipresentes, pero Samuel L. Jackson sufría de tartamudez en su infancia. Acudió a un logopeda, y le recomendó que se presentara al casting de una obra, lo que podría ayudarle a eliminar su problema. Lo consiguió, y vio que eso era a lo que se quería dedicar para toda su vida.
Trabajando para Cosby
Entre sus primeros trabajos en el show business, Samuel L. Jackson tuvo que ganarse el pan como pudo, y le tocó ser "stand-in" de Bill Cosby en su propio programa. Su trabajo era sustituir al actor antes de comenzar a grabar, para fines puramente técnicos. Jackson cuenta que, durante dos o tres años, le pusieron todos los suéteres de Cosby a él.