La picaresca española, esa supuesta naturaleza nuestra que queda tan graciosa en los clásicos de literatura, en las películas y en sitcoms como 'La que se avecina', no es más que una de las peores facetas de nuestra cultura. Se ve a todos los niveles, desde la política al ciudadano de a pie, y supone un obstáculo para nuestro desarrollo como país. Sirve de ejemplo la noticia que vemos ahora en medios como El País y eldiario.es.
La fiscalía pide dos años de prisión para el exdirector de la Academia, productor y exhibidos Enrique González Macho, por haber falseado los datos de taquilla de una película para obtener subvenciones. González Macho forma parte del caso del taquillazo, en el que empresas españolas exhibidoras y productoras de cine hinchaban el número de espectadores de las películas para así poder recibir las ayudas económicas pertinentes.
El productor se enfrenta a dos años de cárcel y una multa de un millón de euros, que si no fuera pagada se traduciría en medio año más en prisión. El mismo castigo se pide para el productor Juan Romero Iglesias.
Entre las producciones de González Macho se encuentran 'Te doy mis ojos' y 'La noche de los girasoles', pero el caso de la fiscalía se centra en el fraude relacionado con la exhibición de 'La isla interior', película dirigida por el tándem formado por Félix Sabroso y la fallecida Dunia Ayaso. Estrenada en diciembre de 2009 por Alta Clasics y producida por Mecanismo Films, la empresa de Romero Iglesias, en 2011 el productor certificó que la recaudación había sido de unos 335.000 euros. Por haber obtenido esa retribución en la taquilla, la empresa recibió casi 300.000 euros, que ahora la fiscalía pide que se devuelvan al Ministerio de Cultura.
El proceso era este: se inventaban sesiones matinales y se hinchaban los datos de los asistentes a las sesiones de tarde, que por otra parte no se anunciaban ni se publicitaban en ninguna parte.
A vueltas con las subvenciones
Un delito bochornoso y que hace muy flaco favor al cine español. No nos cansamos de preguntar a los actores y directores en las entrevistas cómo creen que se podría mejorar la imagen de la industria de cara al público general en España. Los espectadores tienen una visión sesgada y desinformada de cómo funcionan las subvenciones, y de cuánto trabajo, dinero y esfuerzo se agota en una producción española. La historia de la productora de 'Tarde para la ira', la ganadora de los últimos Premios Goya, es muy esclarecedora: con una película multipremiada y con grandes críticas en sus manos, ella sigue hipotecada.
Pero poco se puede hacer por esa imagen distorsionada que el público tiene del cine español si sigue habiendo fraudes de este tipo por parte de unos pocos.
11 directores y directoras españolas a tener en cuenta en los próximos años
Jonás Trueba
A estas alturas, el hijo de Fernando Trueba no necesita presentación alguna. Con tan solo 36 años, el cineasta madrileño, tan aplaudido como criticado, cuenta en su haber con nada menos que cuatro largometrajes, todos ellos, como mínimo, interesantes. Ha sido con su última película, 'La reconquista', con la que se ha confirmado definitivamente como un cineasta a tener en cuenta de cara al futuro. Además de ser posiblemente su mejor trabajo, ha sido con el que más división crítica ha generado. Jonás es mucho más que un imitador de la nouvelle vague, como muchos se empeñan en argumentar en su contra.
Rodrigo Sorogoyen
Otro que no necesita ninguna presentación, por la relevancia que han tenido sus dos largometrajes en solitario, es Rodrigo Sorogoyen. Tras sorprendernos a todos con su ópera prima 'Stockholm', el director madrileño ha sido capaz de dejarnos con la boca abierta en la sensacional 'Que Dios nos perdone', su primera aproximación al thriller policíaco. Una vez visible la versatilidad del cineasta, es lógico tener muchas ganas y curiosidad de ver qué es lo que nos puede ofrecer de ahora en adelante.
Su próxima película contará la historia de un político corrupto a lo largo de los años. Estaremos muy atentos.
Raúl Arévalo
Podríamos decir sin ningún miedo que la sorpresa de 2016 en el cine español ha sido 'Tarde para la ira', la ópera prima del también actor Raúl Arévalo. Además de por ser uno de los trabajos patrios más potentes de la presente década, el debut de Arévalo sobresale gracias a contar con una dirección ejemplar, un pulso narrativo que en una situación normal nos haría pensar en un realizador mucho más experimentado. Un actor que, en su faceta de cineasta, consigue sacar lo mejor de todos y cada uno de los intérpretes. Que no os extrañe que 'Tarde para la ira' sea la sorpresa de los próximos Goya.
Lara Izagirre
Aquí tenemos una figura que sí necesita ser presentada e incluso reivindicada hasta la saciedad, y no precisamente por tratarse de una directora (que también). La carta de presentación de Lara Izagirre fue una de las películas más maduras que hayamos podido ver en los últimos años, una obra que se elevaba a la categoría de imprescindible gracias a su gran coherencia entre fondo y forma. 'Un otoño sin Berlín' ha pasado injustamente desapercibida, pues es un trabajo mayúsculo que nadie debería dejar de ver. Con solo 31 años, la directora vasca es una de las voces más interesantes y prometedoras de nuestro cine.
Carlos Vermut
El éxito cosechado por 'Magical Girl' fue suficiente para convertir a Carlos Vermut en un cineasta conocido por todos, e incluso sirvió para reivindicar esa pequeña joya que es 'Diamond Flash'. Vermut es la prueba evidente de la diversidad que encontramos entre nuestros cineastas, con estilos y miradas muy diferentes entre sí. Uno de los acontecimientos de 2018 será 'Quién te cantará', su nueva película protagonizada por Najwa Nimri.
Fernando Franco
Este montador sevillano decidió dar el paso a la dirección de largometrajes en 2013, cuando nos regaló a todos una película tan desgarradora e inolvidable como 'La herida'. Con el rodaje de su nuevo trabajo ('Morir') terminado, el cual también estará protagonizado por la gran Marian Álvarez, solo nos queda esperar para confirmar que nos encontramos ante uno de los cineastas más coherentes y contundentes no ya de España, sino a nivel internacional.
Paco León
Tres películas le han servido a Paco León para convertirse en el nuevo baluarte de la comedia española. El actor y cineasta sevillano es capaz de sacar a relucir los instintos más bajos y vulgares del ser humano con una clase y elegancia sorprendentes, siempre con una facilidad innata para hacer reír al espectador. Tras el díptico de Carmina, León se ha convertido en una realidad con 'Kiki, el amor se hace', probablemente la mejor comedia española del año.
Pablo Hernando
Aunque conocido en el panorama independiente debido a su reciente colaboración con Julián Génisson y Juan Cavestany en la película 'Esa sensación', Pablo Hernando posee las dotes necesarias para que su obra logre abrirse a un público mucho más amplio. El cineasta nacido en Vitoria únicamente tiene 30 años, pero ya ha conseguido presentar un trabajo digno de mención. Su 'Berserker' es un thriller insólito, como si hubiese querido filmar la versión arriesgada e imprevisible de 'Tesis'.
Nely Reguera
Esperemos que, gracias a lo fácil que es empatizar con 'María (y los demás)', su ópera prima, y con su personaje protagonista, interpretado por una sensacional Bárbara Lennie, Nely Reguera consiga hacerse un hueco entre los cineastas nacionales a tener en cuenta. Sin ser ni mucho menos redondo, su primer trabajo tiene, además de un guion estupendo y un trabajo actoral de diez, muchísima verdad. Es muy difícil no sentirse identificado con algunas cosas que nos cuenta la película, así que se puede decir que es un motivo más que suficiente para que no se nos olvide el nombre de esta directora barcelonesa.
Oliver Laxe
Aunque nacido en París y afincado en Marruecos, Oliver Laxe es de origen gallego. Para certificar la presencia de este cineasta en la lista, solo debéis conocer que 'Mimosas', su segunda película, ganó el premio Semana de la crítica en la pasada edición del Festival de Cannes. Ya reconocido a nivel internacional, Laxe tiene unos proyectos muy ambiciosos y eclécticos de cara al futuro, así que debería contar desde ya mismo con toda nuestra atención.
Paula Ortiz
Tampoco necesita ninguna carta de presentación la cineasta aragonesa Paula Ortiz, que con 'La novia' se hizo conocer entre el público español. La simple tarea de adaptar a Lorca hubiera servido para captar el interés de la gente, pero el resultado sorprendió a propios y extraños, consiguiendo un gran número de nominaciones para unos Premios Goya donde muchos consideraron injusto que no arrasara. Lo que es un hecho es que Paula Ortiz ya es mucho más que una promesa.
