Siete temporadas, más de 150 capítulos, casi 100 premios y una de las mejores series de todos los tiempos. Así es 'El ala oeste de la Casa Blanca'. Tal día como hoy hace 11 años decía adiós a la primera producción que hizo que los telespectadores se interesasen por la política.
Antes que las diabólicas tácticas de 'House of Cards' o los líos amorosos de 'Scandal' hubo otros ocupantes de la Casa Blanca televisiva. Muy diferentes. Con diálogos imposibles de seguir si no les prestabas atención, discursos tras los que te levantabas del sofá a aplaudir, conflictos (personales y políticos) y escenas que ya forman parte de la historia de la televisión.
Lanzamiento del elenco y Sorkin
'El ala oeste de la Casa Blanca' supuso un lanzamiento para buena parte del elenco, al que hemos seguido viendo en años sucesivos en numerosos trabajos. Incluso en ocasiones han vuelto a juntarse. Fue también un impulso espectacular para la carrera de Aaron Sorkin. No habría existido 'La red social' o 'The Newsroom' sin 'El ala oeste de la Casa Blanca'.
Las siete temporadas que se emitieron de la serie dieron para un buen puñado de curiosidades. No es de extrañar con tantos actores, cambios de personajes e incluso de guionistas. Repasamos las más peculiares.
Curiosidades de 'El Ala Oeste de la Casa Blanca'
Bartlet apenas iba a ser un secundario
Bartlet no iba a tener tantísimo protagonismo. De hecho, el personaje del presidente apenas iba a aparecer durante un puñado de capítulos por temporada, pero las cosas cambiaron cuando vieron lo bien que encajaba en el piloto y el de Martin Sheen se convirtió en uno de los personajes más representativos de 'El ala oeste de la Casa Blanca', por no decir el principal. Sale en 155 de los 156 capítulos emitidos e hizo mítica su peculiar manera de ponerse la americana. Tanto fue así que llegó a despertar algún que otro recelo. Dicen las malas lenguas que a Rob Lowe no le gustó nada que la serie no fuera tan coral como se había previsto en un principio. Llegó a plantearse abandonar, pero no lo hizo en un primer momento. Se iría años después.
Sidney Poitier iba a ser el presidente
No sabemos si el hecho de que Martin Sheen interpretara al presidente ayudó a que ganara peso, pero lo cierto es que él no fue el primero en que se pensó para el papel. Ni siquiera el segundo o el tercero. Sidney Poitier fue la primera persona a la que llamaron para encarnar a Bartlet, pero no hubo acuerdo económico. Jason Robards y Alan Alda también fueron tenidos en consideración. Este último acabó en la serie como el senador Arnold Vinick, que se enfrentaba a Bartlet.
Una foto de Kennedy como inspiración
Una de las imágenes más míticas de 'El ala oeste de la Casa Blanca', que se usó como imagen promocional, es la del presidente apesadumbrado y de espaldas en su despacho. Mostraba a Barlet pero era una reproducción de una instantánea de J.F. Kennedy, cuando la Crisis de los Misiles de Cuba. Más curioso aún es que Martin Sheen había interpretado a ese mismo presidente en una miniserie que se emitió con motivo del 20 aniversario de su asesinato.
Un despacho oval reutilizado
El despacho oval que aparece en 'El ala oeste de la Casa Blanca' no era nuevo, de hecho si nos fijamos podemos reconocerlo de haberlo visto en otras producciones. Se usó primero en 'Dave, presidente por un día' y 'El Presidente y Miss Wade', película escrita también por Sorkin. Los escenarios de la serie son de los más impresionantes y grandes de los que se habían construido por entonces ya que son una réplica exacta de los originales de la Casa Blanca y no pueden visitarse, precisamente, por cuestiones de seguridad nacional.
El "walk and talk" no lo inventó Sorkin
Aaron Sorkin es el alma de 'El ala oeste de la Casa Blanca', es la serie que lo lanzó al estrellato. Todo lo que hizo después se compara con ésta y se le adjudica todo lo que pasa en ella, pero no es así. El recurso "walk and talk", utilizado para que los espectadores no se aburrieran durante los largos diálogos que él mismo escribía, no es suyo. Es una idea del director de la serie, Thomas Schlamme, que usó en 'Sports Night' y que Sorkin (guionista también de esa serie) acabó adoptando en sus futuros trabajos.
El origen del "mandyville"
Hay series que llegan a alcanzar tal nivel de influencia que incluso crean términos propios, como del "walk and talk" del que ya hablamos. En el caso de 'El ala oeste de la Casa Blanca' dio lugar también al "mandyville", expresión con la que se hace referencia a la desaparición inesperada e inexplicable de un personaje. Fue lo que ocurrió con Mandy, interpretado por Moira Kelly.
Sorkin, la cadena y los guionistas
Sorkin dejó la serie en la cuarta temporada, aunque siempre lo asociamos con ella. Lo hizo tras una discusión con responsables de la cadena. Tiene fama de no ser una persona de trato fácil y además de con los jefes también tuvo problemas con guionistas. Aseguraba que él hacía el trabajo, que el resto aportaban datos e ideas, lo que a los otros escritores no les sentaba demasiado bien. La tensión fue mayúscula cuando se llevó el Emmy al mejor capítulo por 'In Excelsis Deo', cuya trama estaba basada en lo vivido por el padre de otro guionista (Rick Cleveland), quien reclamó su autoría.
Casi cien premios
La calidad de 'El ala oeste de la Casa Blanca' es innegable, incluso para quienes no adoren a Sorkin ni sean devotos de las series políticas. Es una de las series que más premios acumula: 92. Y llegó a ser nominada para otro centenar de ellos. Entre las distinciones destacan 26 Emmys, siendo una de las series que más de estos galardones atesora. Nueve de ellos se los llevó en la primera temporada. De hecho casi todos los actores principales de la serie tienen su propio Emmy en casa.
Reacción al 11-S
Hoy en día las series están muy pegadas a la actualidad, y buen ejemplo de ello son las repercusiones en la televisión de la llegada al poder de Donald Trump. Hace 15 o 20 años no era tan habitual, menos aún cuando se trataba de asuntos tan preocupantes como el ataque a las Torres Gemelas. 'El ala oeste de la Casa Blanca' fue la primera serie que lo hizo, abordando el terrorismo internacional. Fue tres semanas después del ataque.
CJ y Danny existen en la vida real
Las relaciones entre los responsables de prensa de los políticos y los miembros de la prensa son habituales en cualquier país. No hubo que imaginar mucho para crear la de CJ (Allison Janney) con Danny Concannon (Timothy Busfield). Tan poco tuvieron que imaginar que, de hecho, se basa en la del periodista del New York Times Toodd Purdum y su esposa Dee Myers, secretaria de prensa de la época de Clinton y consultora en la propia serie.
El infarto real de Leo
Hay otra clase de realidades que afectan a las series y son las vidas reales de sus actores. John Spencer murió en 2005 de un infarto, lo que obligó a los responsables de la serie a dar una salida a su personaje. Leo también falleció, en un hotel. Aunque en los últimos capítulos Spencer no aparece se le reconoce en los créditos.
Reunión para una candidatura
Son muchas las series que años después hacen una reunión del equipo. En el caso de 'El ala oeste de la Casa Blanca' hubo reencuentro, pero de lo más peculiar. Muchos de los actores grabaron un vídeo de cuatro minutos en apoyo de la candidatura de Bridget Mary McCormack a la Corte Suprema de Michigan. Es la hermana de Mary McCormack. Se titulaba 'Walk and Talk the Vote' y la candidata, como no podía ser de otra manera, ganó.