Con Woody Allen relegado a retratar las intrigas de la alta burguesía europea, Abel Ferrara se ha quedado con el título de rey de Nueva York para él solito. Ningún otro director se podía aproximar al mito del hotel Chelsea, construido a finales del XIX y convertido en el alojamiento de la vida bohemia. Por él pasaron desde Dylan Thomas a Janis Joplin.
Ferrara entrevista en 'Chelsea on the rocks' a algunos ilustres recientes como Robert Crumb o Ethan Hawke, así como a uno de sus actores fetiches y residentes (como no) en el Chelsea, Dennis Hopper; a la vez que intercala la recreación de un incidente en torno a Sid Vicious.