¡Por fin! Nada menos que siete meses llevan cerrados los cines Ideal, en la calle doctor Cortezo, pleno centro de Madrid. ¿La razón? Una reforma integral, que los ha mantenido fuera de servicio desde el pasado 17 de abril. De hecho, la apertura de las salas estaba prevista para el 23 de octubre, pero, según Yelmo, imprevistos en la obra causaron un retraso en la planificación. La espera se acaba por fin: el viernes 1 de diciembre, las instalaciones abren sus puertas de nuevo para proyectar las mejores películas de la cartelera en versión original subtitulada.
Las características incorporadas al cine, según La Vanguardia, incluyen proyectores "de última generación" y pantallas "de alta calidad" de mayor tamaño que las que había anteriormente. Además, la reorganización de las salas garantiza un mayor tamaño de las butacas y mayor espacio entre filas, aunque haya un aforo menor. El sonido no se queda atrás: ahora las salas cuentan con mayor aislamiento acústico junto a mejores reproductores. Incluso han decidido incluir un ascensor en la nueva estructura con el objetivo de hacerlos totalmente accesibles para discapacitados. También han reformado los baños (no habrá ya baños dentro de las salas) y el bar, así que lo cierto es que no reconoceremos nada de lo que veamos allí, a excepción de la fachada, que se ha conservado prácticamente igual.
Además de incluir los grandes estrenos de la semana, como 'Coco', 'Wonder', 'Perfectos desconocidos' o 'El sacrificio de un ciervo sagrado', ya anuncian su primer gran evento, y es que el 14 de diciembre estarán preparados para albergar el maratón de 'Star Wars: El despertar de la fuerza' y 'Star Wars: Los últimos Jedi', así que si te quedaste sin entradas, corre a por ellas.
Nuevos tipos de cine
Parece ser que Yelmo se ha propuesto actualizar el concepto de cine, porque además de esta reforma, ha anunciado la llegada a San Sebastián de los Reyes de un cine de lujo, el Yelmo Cines Luxury, que ofrece unas salas mucho más cómodas, asientos regulables e incluso funciona como un restaurante, entre otras cosas.
8 razones por las que 'Casablanca' sigue siendo un clásico inolvidable
La química entre la pareja protagonista
Uno de los mayores atractivos de la película es la química existente entre los integrantes de la pareja protagonista: Humphrey Bogart e Ingrid Bergman. Si su sola presencia ya es un valor añadido, pues en sus apariciones individuales demuestran su calidad interpretativa, es en sus encuentros donde brillan con mayor fuerza, complementándose a la perfección y regalándonos algunos momentos tan potentes como bonitos. Si Bogart nos encandila con su labia, esa dialéctica que tanto le caracteriza y a través de la que se convierte en dueño y señor de sus diálogos, Bergman hace lo propio con su rostro, con su mirada y con la réplica constante que le ofrece a su compañero, encarnando además a un personaje que duda y que ama; y consigue transmitir ambos sentimientos a la perfección.
Los secundarios
El reparto de 'Casablanca' es brillante en su totalidad. Además de la pareja protagonista, destacan algunas caras conocidas entre el plantel de secundarios, como es el caso de Claude Rains, Peter Lorre, Sydney Greenstreet y Paul Henreid. Todos ellos llenan de vida a unos personajes de por sí jugosos, con mucho que ofrecer y mediante los que aprovechan cada minuto que tienen en pantalla, cada línea de guion que enuncian y cada encuentro con los dos colosos que protagonizan la película.
Tócala otra vez, Sam
Aunque su fama se debe a la confusión con el título de una película de Woody Allen, una de las frases más emblemáticas de 'Casablanca' es "Tócala otra vez, Sam". La frase original es "Tócala otra vez, Sam, en memoria de los viejos tiempos". Correcta o incorrecta, lo cierto es que esta frase ha trascendido en el tiempo y que hoy en día prácticamente todo el mundo la conoce. Pocas películas han calado de tal forma en el imaginario colectivo.
La maestría de Michael Curtiz
A pesar de no haber participado en la escritura de un guion que se revisaba todos los días antes de grabar, Michael Curtiz realizó un trabajo de dirección sobresaliente. Supo coordinar todos los elementos a las mil maravillas, elaborando uno de los trabajos de puesta en escena más brillantes que se hayan podido ver nunca. A la estupenda dirección de actores, en especial de los protagonistas, hay que sumarle el valor añadido que tiene haber suplido al gran William Wyler, que fue el primer nombre que se barajó para dirigir la película. En esta ocasión, es probable que nadie lo hubiera podido hacer mejor.
La música (y su uso)
Otro de los aspectos emblemáticos de esta obra maestra es su banda sonora, el empleo de la misma y su influencia en el comportamiento y la gestión sentimental de sus personajes. Sobre todo perdura en nuestro recuerdo el tema principal de la película, que, a pesar de haber sido creado diez años antes de su estreno, no fue reconocido hasta que acompañó a las imágenes del maravilloso film de Curtiz. Dicho tema se titula 'As Time Goes By', y seguro que es uno de los puntos clave de que el influjo de la obra haya trascendido hasta nuestros días.
Gestión de la incertidumbre
Es ejemplar la manera en que la película, a pesar de no ser ni mucho menos el típico film de intriga o suspense, mantiene en todo momento la incertidumbre ante lo que va a ocurrir a continuación, así como sobre cuál será el desenlace de la trama. Seguramente tenga mucho que ver la frescura que otorgaba esa reescritura matinal del guion, al mismo tiempo que el hecho de que los actores desconocieran el final de la película. Se respira espontaneidad, algo importantísimo para mantener enganchado al espectador y para hacer de esta obra una sumamente especial.
El amor y su idealismo
La historia de amor que hay en 'Casablanca', aunque mucho más verdadera y emotiva que la de prácticamente todos los filmes románticos, no es ni mucho menos convencional. Por una parte nos encontramos ante una mujer que quiere mucho a dos hombres, pero que sabe perfectamente cuál es el camino a seguir, aunque su corazón ofrezca alguna que otra duda. Por otro lado, ante un hombre que debe olvidar el idealismo romántico por una cuestión de integridad moral, pero también de amor. Por todo eso y por más cosas nos encontramos ante una película única, especial e indescriptible.
Un final poderoso
Aun haciendo un esfuerzo de memoria importante, sería muy complicado encontrar muchas películas con finales tan poderosos como el de 'Casablanca'. Sin que argumentalmente sea el final el soñado, el que muchos hubieran esperado, es sencillamente imposible imaginarse otra forma mejor de concluir. Es uno de esos cierres que nos deja pensando lo grande que es el cine y todas las posibilidades que ofrece. Es, definitiva, inolvidable; igual de inolvidable que la propia cinta.