La esperada segunda ola del coronavirus está resultando aún más catastrófica para el mundo del cine que la primera. Aunque las medidas de seguridad han permitido que se puedan reabrir salas y retomar rodajes, los preocupantes niveles de contagio en EE.UU. han causado movimientos como el retraso de 'Sin tiempo para morir', y como consecuencia cientos de cines cerrarán ante la falta de grandes estrenos en lo que queda de año.
En España, uno de los países más afectados por estos rebrotes, siguen echando la persiana pequeñas salas como el icónico Cine Paz del centro de Madrid. Mientras tanto, Cinesa llega con una propuesta que podría revitalizar la asistencia: alquilar las salas de cine a grupos privados.
Se trata de una opción que en EE.UU. ha funcionado bastante bien en los últimos meses. La cadena de cines Alamo Drafthouse lanzó un programa similiar con el que se puede alquilar una sala por 300 dólares (150 el alquiler y mínimo 150 más por la comida), y según ellos ha resultado ser un movimiento muy exitoso, llegando a alquilar hasta a 700 grupos en su primer mes.
¿En qué consiste?
La oferta de Cinesa es incluso algo más económica: 250 euros el alquiler de una sala, que incluye la proyección de una película, la entrada y un menú para cada asistente hasta 20 personas. Aunque 250 euros puede parecer un precio muy alto, dividido entre 20 sale a 12,50 euros por cabeza, incluyendo película y comida en una sala privada. Precisamente ese es el precio que costaría cada asistente extra, en el caso de que el grupo consista en más de 20 personas.
Cinesa anima a los clientes a hacer uso de esta opción para organizar cumpleaños o cualquier evento privado, e incluso ofrece posibilidades de tematizar las fiestas poniendo imágenes o vídeos antes de la película proyectada, ofreciendo un regalo al homenajeado o a todos los asistentes o sirviendo un pastel de cumpleaños.
La reserva, que puede hacerse también de las salas LUXE (a 275 euros el alquiler y 13,75 euros la persona extra), debe hacerse con mínimo diez días de antelación, y la cadena se reserva el derecho de limitar los alquileres dependiendo de la afluencia que esté teniendo el cine en esa época.
En cuanto al menú ofrecido, hay modalidad para adultos (palomitas medianas y agua o refresco) e infantil (palomitas mini, zumo o agua y chocolate), aunque también se puede cambiar alguno de los ingredientes por una pizza o un perrito caliente, por ejemplo.
Esta opción puede ser interesante tanto para los que han dejado de ir al cine porque no quieren exponerse a encerrarse en un espacio cerrado con decenas de desconocidos como para los que siempre han querido celebrar un cumpleaños viendo una película en pantalla grande. Entre las películas que hay ahora mismo en cartelera, que son las que se pueden elegir para los eventos privados, están 'Eso que tú me das', 'Explota explota', 'Rifkin's Festival' o 'After. En mil pedazos'. ¿Qué os parece la idea, alquilaréis alguna sala?