La empresa dedicada a la exhibición cinematográfica en España, Cinesa, quiere aportar su granito de arena para la lucha contra la COVID. Las salas de cine llevan sufriendo unos largos y duros meses por el coronavirus, que ha obligado a echar el cierre a muchas de ellas de forma ininterrumpida y a limitar aforos y horarios; la situación ya ha generado cierres, definitivos o indefinidos, de muchos cines en nuestro país. Por ello, Cinesa quiere contribuir a poner fin a esta dramática situación ofreciendo sus salas para la campaña de vacunación contra el COVID-19.
La compañía informa que se ha puesto en contacto con las autoridades sanitarias locales y autonómicas, que son las encargadas de llevar a cabo las campañas de vacunación, para ofrecer sus salas de cine como espacios donde poder acoger gente para vacunarse. Y la verdad es que la propuesta no suena nada descabellada: las salas son espacios muy amplios y ventilados, lo que permitiría reunir a un gran número de personas de forma segura para inmunizarlas.
Uno de los inconvenientes que podría hacer inviable esta idea es el nivel de tensión eléctrica que estos espacios deben soportar para tener el equipo médico necesario. Cinesa ha destacado que sus cines podrían ofrecer la electricidad suficiente para poder acoger pacientes y soportar los requisitos energéticos que los congeladores exigen para mantener las vacunas. La mayoría de salas de la compañía se sitúan en centros comerciales, lo que daría muchas facilidades para el acceso a ellas de pacientes y equipos médicos, debido a la accesibilidad que tienen en cuanto a transporte y aparcamiento.
La tercera ola de malas noticias para los cines
La tercera ola de la pandemia de coronavirus vuelve a suponer un obstáculo enorme para la exhibición cinematográfica. Las nuevas medidas restrictivas y la falta de estrenos importantes han obligado a las salas, incluso de grupos tan importantes como Cinesa o Yelmo, a volver a cerrar temporalmente o a reducir sus horarios para compensar la falta de público. Otros más pequeños, por desgracia, han echado el cierre definitivamente.
