¿Qué sería de millones de espectadores sin los clásicos de Disney? ¿Qué sería de la historia del cine, anulando los límites del género animado, sin este conjunto de obras maestras que han marcado a varias generaciones a lo largo de las décadas? Mejor ni llevar a cabo el ejercicio de imaginarlo, porque hablaríamos de un séptimo arte mucho más triste, apagado y vacío.
Y es que, incluso en sus momentos más bajos, hablamos de un estudio que nos ha regalado tantas películas maravillosas, tantos momentos inolvidables, tantas canciones míticas y tantos personajes que son ya iconos absolutos que, más allá de análisis sesudos, solamente podemos mostrar nuestro agradecimiento. Y si pensamos en su legado correspondiente a la década de los noventa, sumar una ovación cerrada.
Volvemos a las preguntas. ¿Cuántos clásicos caben en solamente diez años? ¿Cuántas veces se puede superar un listón ubicado en el infinito? ¿Volverá a repetirse una década en Disney tan apabullante en términos de calidad y cantidad como la que recordamos aquí? A esta última cuestión resulta imposible responder, aunque la última década del estudio no baja del notable en ningún caso, pero, en los que respecta a los dos primeros interrogantes, la solución tratamos de darla en este mismo especial.
Los clásicos Disney de la década de los 90, de peor a mejor
'Los rescatadores en Cangurolandia'
Más ambiciosa que su predecesora y apoyada en una mayor cantidad de acción y despliegue visual, 'Los rescatadores en Cangurolandia' fallaba en algo tan esencial como capturar, transmitir y contagiar ese encanto tan característico de la primera entrega. Y eso que, especialmente durante su primer tramo, la película entrega algunas escenas realmente deslumbrantes desde el punto de vista tanto técnico como narrativo, pero todo termina resultando demasiado caótico, previsible y ruidoso en un desmedido clímax final. Mucho ruido y pocas nueces. O queso.
'Fantasía 2000'
Pese a que su título indique lo contrario, el estreno de 'Fantasía 2000' se llevó a cabo el 17 de diciembre de 1999 en el prestigioso Carnegie Hall de Nueva York, lo cual justifica su presencia en este especial, aunque sea ocupando uno de los puestos más bajos. Una ubicación en la lista que, por encima de todo, sirve para comprender el altísimo nivel que mantuvo Disney a lo largo y ancho de esta década, ya que estamos ante una película que, de haber nacido en la siguiente década, estaría peleando por el oro. Temas clásicos inolvidables e imágenes de una belleza arrolladora para un clásico siempre dispuesto a ser reivindicado y al cual solamente le afectó (muy) negativamente surgir en una etapa tan excelsa de Disney.
'Pocahontas'
El listón estaba situado en el mismísimo infinito. Disney acaba de entregar tres obras maestras de incalculable valor ('La bella y la bestia', 'Aladdin' y 'El rey león'), así que 'Pocahontas' lo tenía entre complicado e imposible. Y pasó lo inevitable: bajón en las cifras de recaudación y una respuesta mucho menos entusiasta por parte de la crítica. Sin embargo, el tiempo ha ido sumando defensores a la propuesta de Mike Gabriel y Eric Goldberg, revalorizando así una propuesta que, vista a día de hoy, resulta un notable entretenimiento de aventuras, romance, épica y sentido del humor. Y temazos, claro, pero eso ya se valoró en su momento.
'Mulan'
Todavía mejor valorada tras el desastroso remake en acción real estrenado hace un par de años, 'Mulan' ya era una extraordinaria película en 1998. Una historia potentísima, una protagonista inolvidable, personajes secundarios que aportaban un humor siempre efectivo, una banda sonora magistral, dosis extra de épica y uno de los mejores clímax finales de la historia de Disney. Un rotundo éxito creativo de la primera a la última escena.
'Hércules'
Solamente por su banda sonora, de las mejores de la historia de Disney, 'Hércules' merece ovación cerrada y en pie por parte de cualquier amante del universo animado del estudio. Pero es que, además, hablamos de una joya total que cuenta con un villano memorable, una pareja protagonista carismática, acción deslumbrante y secundarios cómicos que funcionan a las mil maravillas. Resumiendo: un clásico con todas las letras.
'El jorobado de Notre Dame'
Por encima de todo, 'El jorobado de Notre Dame' sigue siendo una de las obras maestras más infravaloradas del catálogo Disney. Épica, oscura, vibrante y de una belleza visual más allá del elogio, el clásico dirigido por Gary Trousdale y Kirk Wise ha necesitado del paso del tiempo para alcanzar su merecido reconocimiento como una de las cimas incontestables del estudio, pero más vale tarde que nunca cuando se trata de películas tan magníficas. Conviene no volver a olvidarlo: 'El jorobado de Notre Dame' es una de las mejores propuestas con sello Disney de los 90 y una de las propuestas animadas más memorables de aquella década.
'Tarzán'
No son pocas las películas realizadas por la factoría Disney que merecen una reivindicación, especialmente por la injusta manera en la que han terminado perdidas en mitad de clásicos con mayor reconocimiento comercial. Una de las más destacadas de este conjunto es, sin lugar a dudas, 'Tarzán', una de las mejores y más inspiradas propuestas estrenadas por el estudio en la década de los noventa. Y en su historia.
Y es que, a la hora de la verdad, la joya dirigida por Kevin Lima y Chris Buck puede mirar perfectamente de igual a igual a obras maestras animadas de la talla de 'El jorobado de Notre Dame', 'Aladdin', 'Mulan' o 'Hércules', trabajos con los que 'Tarzán' comparte más de una virtud. Diversión, emoción, grandes canciones, acción trepidante, un maravilloso sentido de la aventura y, sobre todo, un conjunto de personajes inolvidables, auténtica alma, corazón y músculo de todo un vibrante conjunto.
'La bella y la bestia'
A la hora de establecer una lista ordenada de los clásicos del estudio, 'La bella y la bestia' siempre está en los primeros puestos, manteniendo un vigor popular que no ha disminuido en absoluto, tal y como quedó demostrado con la respuesta mundial a su remake en acción real. Y es que son tantos los puntos de conexión entre esta historia y los espectadores que uno no puede cansarse de regresar una y otra vez a ese castillo inolvidable, dejándose acompañar por una colección de personajes de los que llegan a la memoria dispuestos a quedarse para siempre.
Por eso, siempre es un buen momento para revisar 'La bella y la bestia', para dejarse llevar por uno de esos cuentos a los que el término 'mágico' no le viene grande. Varias décadas después de su estreno, esta cima del cine de animación se mantiene incapaz de envejecer, demostrando un poder hipnótico en generaciones y generaciones que han crecido junto a sus protagonistas, emocionándose siempre como si fuera la primera vez que los vieras. Canciones inolvidables, un acabado visual maravilloso, un ritmo endiablado, un encanto contagioso...Son solamente algunos de los factores por los que podemos considerar 'La bella y la bestia' como uno de los mejores y más importantes clásicos de la factoría Disney.
'Aladdin'
Si no existiera 'El rey león', estaríamos hablando de la gran película de la segunda edad dorada de Disney entre el final de la década de los ochenta y el inicio de los noventa. Capaz de mezclar aventuras con romanticismo en la mejor tradición del estudio, 'Aladdin' tenía un as en la manga que la llevaba del notable al sobresaliente: su genio de la lámpara. La creación de Robin Williams sigue siendo hoy El Referente cuando se habla de secundarios cómicos con capacidad para robar el protagonismo a cualquiera y es, sin lugar a dudas, uno de los personajes más carismáticos e inolvidables de la historia del cine de animación.
'El rey león'
¿Os acordáis de la primera vez que visteis esa estampida? ¿Recordáis ese último instante entre Simba y Mufasa? A su lado, los inicios de 'Bambi' o, más reciente, 'Buscando a Nemo', parecen sonar a broma. 'El rey león', además de convertirse en El Clásico Disney definitivo para toda una generación que la sigue señalando como la obra maestra del estudio, nos retaba a aquellos niños que la veíamos fascinados a aceptar un nuevo golpe dramático capaz de convertir la infancia en un lugar mucho más oscuro. Pero también mucho más real.
Llorar con la historia de estos personajes inolvidables no tiene demasiado mérito, entra dentro de la coherencia y la sensibilidad, lo realmente importante es que no haya perdido ni una pizca de capacidad para seguir provocando esas sensaciones reconocibles en el espectador. Es lo que tienen los clásicos. Y aquí está uno de los más dorados y queridos de la historia del cine.
