"La mayoría de las críticas solo mencionaban que era animación por ordenador en una línea. Y tengo que decirlo, todos los técnicos se lo tomaron como un orgullo, porque no se trataba de tecnología, se trataba de contar una historia. Y ese ha sido el lema de la empresa desde entonces." Así habla uno de los fundadores de Pixar recordando el estreno de 'Toy Story (Juguetes)' hace ya 20 años.
Sí, la película que supuso el pistoletazo de salida de la carrera del estudio hacia la cima del éxito de la mano de Disney y de un puñado de brillantes cerebros, cumple este año las dos décadas desde su estreno. Y con dos secuelas a sus espaldas -y la tercera ya con fecha de estreno- lo celebra en un evento en San Francisco, donde John Lasseter, Catmull, Docter y Stanton, los cuatros fundadores de la compañía, se reunieron con un grupo de fans para descubrir los entresijos de la producción del largometraje.
Todos sabíamos que la famosa lámpara de Pixar surge del corto 'Luxo Junior', que le valió la atención del mismísimo Steve Jobs y de Disney. Pero antes de eso los inicios fueron duros, y Lasseter cuenta cómo tuvo que dormir en las oficinas de la empresa -y enseñó fotos que lo demuestran- para hacer frente al trabajo, o cómo Catmull aprendió en Lucasfilm a inventar los principios de lo que serían luego las bases de la técnica de animación digital.
Aún así, aunque ya respaldados por un grande, el nacimiento de 'Toy Story' no fue un parto sencillo: La historia empezó teniendo de protagonista a un Woody encarnado en un muñeco de ventrílocuo (reminiscencias de aquello es la cuerda de su espalda y su famosas frases de vaquero), que el estudio acabó por rechazar por ser "demasiado siniestro". La historia original contenía elementos "muy adultos", que casi llevan a la cancelación al proyecto. Solo el acuerdo de distribución Disney hizo que la historia del juguete se volviera a poner sobre la mesa.
Ante este panorama desolador, hubo que recomenzar el bocetaje varias veces, y después de que consiguieran un par de semanas de prórroga tras lo que ellos llaman "el viernes negro", el día que había que presentar el nuevo proyecto, todo dio un vuelco, y se trazaron las líneas de la relación entre un muñeco nuevo y uno viejo, y su importancia para el niño que los posee. Un par de semanas a cambio de abandonar la película si la idea no llegaba a buen puerto: "Cogimos las ideas que creíamos que hacían una mejor película y desechamos las que no. Y empezamos a seguir nuestro propio instinto a partir de ese punto". Estaban convencidos del éxito de la historia y nada iba a acabar con ellos: "Teníamos que conseguir entretener a adultos, adolescentes y niños con juguetes. Pero sabíamos que podíamos hacerlo."
Para sorpresa de todos, el esfuerzo tuvo como resultado luz verde por parte del estudio y el inicio de una carrera imparable hasta los libros de historia del cine. Habían conseguido retorcer las reglas del género, pero dejando intacto el proceso creativo. "No hay canciones, no hay ciudades felices ni villanos". De estos primeros días surgieron los principios de su metodología y de su manera de entender la industria.
Un éxito reflejado en taquilla
Y no solo por los 362 millines de dólares sue recaudó 'Toy Story' o los 485 de 'Toy Story 2', la tercera parte de la saga, 'Toy Story 3' recaudó un total de 1.39 billones de dólares en todo el mundo, y el estudio no ha dejado de arrasar en taquilla desde entonces. 'Del revés (Inside Out)' con todavía pocas semanas desde su arranque, lleva la friolera de 842 millones de dólares recaudados en todo el mundo. Esperemos que la próxima, 'El viaje de Arlo' y su dinosaurio protagonista, tengan el mismo éxito, y sea un escalón más en la leyenda de Pixar.
- Año: 1995
- 80 min. EE.UU. Animación Comedia
- Reparto: Tom Hanks Tim Allen José Luis Gil