148 días después del inicio de una huelga histórica en Hollywood, los coordinadores de las ramas de la costa este y costa oeste del Sindicato de Guionistas de Hollywood han votado volver al trabajo a partir de las 00:01 horas del miércoles 27 de septiembre. Culmina así un parón que, sumado a la huelga del Sindicato de Actores, había puesto en jaque a la industria como nunca.
Hace pocos días se anunciaba un principio de acuerdo entre guionistas y la Alianza de Productores (AMPTP), que será votado por los miembros del sindicato a partir del 2 de octubre. Sin embargo, consideran que el acuerdo es lo suficientemente bueno como para permitir la vuelta al trabajo. De hecho, lo describen como "excepcional".
El sindicato ha publicado un resumen del acuerdo, que tendría vigor hasta el 1 de mayo de 2026 y que refleja todo lo que han ganado en su pugna contra los estudios y compañías de entretenimiento.
Los guionistas han conseguido una subida del salario mínimo empezando por el 5% en cuanto se firme el contrato. Es la misma subida que consiguieron los directores hace unos meses cuando renegociaron su acuerdo con los productores. También aumentan las compensaciones base por residuales (por las reposiciones de series, por ejemplo), aunque con un porcentaje menor.
Respecto a los residuales en la era del streaming, el nuevo acuerdo obligará a las plataformas a proporcionar al sindicato los datos de audiencias, tanto nacionales como internacionales, pero estarán sujetos a un acuerdo de confidencialidad por lo que no podrán hacerlos públicos. Les servirá, eso sí, para conocer la extensión del éxito de sus trabajos y recibir compensaciones acordes con las reproducciones, incluidas las que vengan del extranjero, donde la mejora es sustancial.
Las bonificaciones por grandes éxitos en streaming (una serie o película vista por el 20% o más de los usuarios de una plataforma en Estados Unidos en los 90 días posteriores al estreno) serán de entre 9.031 y 16.415 dólares por capítulo (dependiendo de su duración), o 40.500 dólares en el caso de una película de presupuesto superior a 30 millones de dólares.
Otra de las "patatas calientes" de la negociación era la composición de las salas de guionistas y asegurar un mínimo de tiempo de trabajo. Han logrado un mínimo de tres guionistas en el desarrollo de series nuevas, con diez semanas de empleo garantizado. Una vez la serie recibe luz verde, el mínimo de guionistas dependerá del número de episodios: tres guionistas para series de seis episodios o menos, cinco para series de siete a doce episodios, y seis para series de más de trece capítulos.
La IA no será un guionista
Uno de los puntos más controvertidos de la huelga ha sido el papel de la inteligencia artificial en el futuro del sector. Los guionistas han conseguido protección frente al uso de la IA en la elaboración de guiones, prohibiéndose la escritura o reescritura de material literario mediante IA y todo texto generado por una IA no podrá ser utilizado como sustitutivo del trabajo de un guionista. Los guionistas podrán utilizar una inteligencia artificial a la hora de escribir, con el consentimiento de la compañía, pero la compañía no puede obligarles a usarla. La empresa debe informar a los guionistas si un material está generado por una IA. Por último, remarcan su derecho de recordar que está prohibido utilizar el trabajo de un guionista para entrenar una IA.
Los encargados de la negociación afirman estar muy orgullosos del acuerdo al que han llegado con los estudios, que les otorga una mayor estabilidad laboral, transparencia respecto a las audiencias y mejoras en sus condiciones. Ahora quedará ver si los miembros del sindicato ratifican el acuerdo y se pone fin, oficialmente, a la huelga.
Los que siguen saliendo a las calles son los actores y actrices, que llevan 75 días de huelga y todavía no hay un final claro en el horizonte. Se dice que el Sindicato de Actores y los productores podrían volver a reunirse para negociar a finales de la semana que viene. Veremos si consiguen también desatascar su situación como los guionistas. Por lo pronto, el pasado 25 de septiembre votaron masivamente a favor de que los actores de videojuegos también se unieran a la huelga.