å

CRÍTICA

'¡A todo tren! Destino Asturias': Santiago Segura se mantiene fiel a sí mismo, en lo bueno y en lo malo

Tras 'Padre no hay más que uno', Santiago Segura trae una nueva comedia familiar donde vuelve a apostar por la misma fórmula.

Por Alberto Cano Rodríguez 8 de Julio 2021 | 10:02

Comparte:

¡Comenta!

Santiago Segura se ha propuesto crear una cita habitual en los cines cada verano con sus comedias familiares. Tras el éxito de 'Padre no hay más que uno' y su secuela, que literalmente salvó el verano a las salas en medio de la pandemia el pasado 2020, el cómico español apuesta por tercer año consecutivo por la misma fórmula con '¡A todo tren! Destino Asturias', remake de la película francesa 'Attention au départ' que vuelve a contar con una banda de niños ansiosos por realizar travesuras y con unos adultos inmersos en una odisea repleta de peripecias e imprevistos.

Santiago Segura en ¡A todo tren!'

Segura juega en terreno conocido con otra historia sobre un padre lidiando con un montón de críos descontrolados, aunque esta vez en un viaje en tren hasta un campamento en Asturias y contando con un extravagante Leo Harlem como acompañante que pone todo aún más patas arriba. Básicamente es 'Padre no hay más que uno sobre raíles', pero el director y actor consigue perfeccionar su fórmula abriendo el espectro de público de la película.

Y es que el detonante de la trama, los niños quedándose solos en el tren después de que los adultos lo pierdan, da juego a dos partes muy bien diferenciadas. Por un lado, la de los chicos y chicas haciendo sudar la gota gorda al revisor del vehículo ferroviario, a quien da vida un excéntrico Florentino Fernández en su habitual registro cómico; y por otro, la de los adultos lidiando con todo tipo de contratiempos para tratar de alcanzar el tren. En la primera se encuentra la parte más familiar, con un humor blanco a la vez que gamberro que encantará a los más pequeños, mientras que en la segunda Segura consigue implementar una comicidad más subida de tono con la que logra recuperar el espíritu de 'Torrente'.

Los niños y niñas de ¡A todo tren!'

A nivel comercial ha dado en el clavo con este enfoque, puesto que tanto adultos como niños van a encontrar a lo que agarrarse para disfrutar de '¡A todo tren! Destino Asturias'. El problema es que la mezcla no está siempre bien medida, dando lugar a escenas con críos que a veces cargan un poco y a momentos más adultos muy fuera de lugar para una comedia familiar. Y no lo digo por contenido especialmente explícito, sino por los comportamientos inapropiados y bromas retrógradas que desfilan por pantalla.

Por ejemplo, vemos al personaje de Leo Harlem preguntándole al de Cristina Pedroche "¿Te la meto?" para después aclararle que se refería a su maleta, al rol de David Guapo borracho ofreciendo billetes a una Guardia Civil pensando que es una stripper de su despedida de soltero, por no hablar de los chistes sobre machismo o lenguaje inclusivo que, sinceramente, he encontrado más ofensivos que graciosos.

Las situaciones no chocan tanto en el conjunto de la película, puesto que la experiencia de Santiago Segura manejando este humor a lo largo de su ya extensa trayectoria le hacen implementarlas de manera orgánica dentro de esta propuesta familiar. Además, la buena química en pantalla entre Segura, Harlem y el conocido rapero y actor El Cejas consigue despertar a carcajada y evitar reacciones incómodas. Pero creo que en pleno 2021 va siendo hora de dejar atrás este tipo de humor.

¿Nuevo fenómeno de taquilla?

Santiago Segura sigue manteniéndose fiel a sí mismo, tanto en lo positivo como en lo negativo. Es un placer volver a ver en 'A todo tren' todo aquello que tan bien le ha funcionado a lo largo de su carrera, como ese festival de cameos de celebrities en situaciones de lo más desternillantes. También lo es ver de nuevo su soltura con el cine familiar, como bien demuestra su buena mano dirigiendo a sus carismáticos intérpretes infantiles y tejiendo el conglomerado de situaciones cómicas para toda la familia. Pero una vez más, vuelve a cometer el error de no atinar al manejar las implicaciones de su humor.

Aunque no me queda duda que 'A todo tren' volverá a convertirse en un fenómeno. Tras las buenas sensaciones que dejaron 'Padre no hay más que uno' y su secuela, los niños y niñas estarán deseando arrastrar a sus padres a ver esta nueva comedia familiar. Y doy por hecho que gustará en igual medida, puesto que vuelve a tener los mismos ingredientes que aquellas. Eso sí, con el plus añadido de que esta vez Segura ha tratado de abrir la película hacia el espectador adulto. Aunque como digo, pese a que la fórmula funcione, no es algo precisamente positivo.

Nota: 5

Lo mejor: Gustará a todos los que disfrutaron con 'Padre no hay más que uno'.

Lo peor: Sus chistes rancios sobre machismo y lenguaje inclusivo.

Rostros