Después de acercarse a la crisis de los 30 y la maternidad en 'Embarazados', Juana Macías continua explorando los problemas relacionales de pareja con 'Bajo el mismo techo', comedia en la que Jordi Sánchez y Silvia Abril se convierten en matrimonio cuyo divorcio va a ser sinónimo de una auténtica batalla campal.
Adrián y Nadia son un matrimonio ideal con una hija adolescente. Los dos compran un lujoso chalet a las afueras de Madrid en plena burbuja inmobiliaria. Todo parece ir bien, él trabaja en vendiendo coches en un concesionario y ella tiene una tienda de juguetes eróticos y da talleres sobre feminismo y sexualidad. La estupenda estampa burguesa se resquebraja cuando deciden divorciarse. En plena crisis económica, su lujoso chalet en las afueras vale menos de la mitad de lo que costó, esto provoca que Adrián y Nadia tengan que convivir juntos, un hecho que irá tensándose hasta tal forma que se inicie una brutal lucha conyugal.
Jordi Sánchez y Silvia Abril, una pareja muy 'destroyer'
Con clara inspiración en 'La guerra de los Rose', 'Bajo el mismo techo' tiene un perfil más comercial y también más convencional, en el sentido de que Macías, que coescribe el guion junto con Daniel Corpas, Anna R. Costa y Juan Moreno, quiere crear un retrato actual de los matrimonio de mediana edad cuya llama se ha apagado, con el añadido de la crisis económica como trasfondo.
El resultado es bastante irregular. Por un lado están dos actores en estado de gracias, Jordi Sánchez y Silvia Abril son dos humorísticos con dilatada experiencia capaz de crear comedia incluso en los momentos más tensos. Con escenas auténticamente destroyer, que guardan cierto parecido con la brutal comedia negra 'Papá o mamá', su talento no está del todo aprovechado, debido a que los guionistas no quieren ser más ácidos e irónicos, cuando se trataba, justamente, de una propuesta para crear humor de situaciones auténticamente grotescas.
Una comedia que no quiere incomodar a nadie
Tampoco ayuda el perfil de los secundarios, Daniel Guzmán, Cristina Castaño, Malena Alterio y Álvaro Cervantes son actores magníficos, los tres primeros con amplia experiencia en la comedia. Sin embargo, sus personajes están muy desaprovechados, especialmente el de Alterio, que hubiera estado genial como figura redentora.
El trasfondo de la crisis económica hubiera podido ofrecer más juego pero los guionistas tampoco quieren ser más satíricos de lo que la trama hubiera podido haber sido. Da la sensación de que 'Bajo el mismo techo' quiere ser una comedia negra pero no quiere hacer un humor sangrante, con lo cual, tira de chascarrillo fácil y humor blanco para evitar tocar ciertas sensibilidades.
Pese a todo, da mucho gusto volver a ver juntos en pantalla a Jordi Sánchez y Silvia Abril, dos actores que tienen mucha química y a los que sería genial volver a ver una película más ambiciosa. No obstante, ambos en 'Bajo el mismo techo' dejan escenas muy brutales que el público disfrutará.
Nota: 5
Lo mejor: Jordi Sánchez y Silvia Abril, más películas con ellos, por favor.
Lo peor: Su humor no pasa del chascarrillo ya visto.