En el verano del año pasado, en el inicio de la recuperación de la asistencia a las salas de cine en Europa; en Francia, hubo una comedia que logró llevar al gran público a los cines, junto con 'Tenet' de Christopher Nolan, demostrando que el cine francés sigue siendo el principal músculo económico del país galo. Ahora, ese éxito llega a España. Está hablándose de 'Borrar el historial', la nueva comedia del tándem de directores formado por Benoît Delépine y Gustave Kervern.
'Borrar el historial' parte de una premisa digna de la comedia absurda, tres vecinos de un barrio residencial de las afueras de la ciudad de Arras, en la región de los Altos de Francia, le declaran la guerra a los gigantes tecnológicos. Evidentemente, es la crónica de un fracaso anunciado, con unos protagonistas igual de vehementes que los mapaches de la cinta de animación 'Pompoko'. No obstante, lo importante aquí es el camino, pues en esa lucha absurda es donde surge el humor y una serie de situaciones que dejan en evidencia a una sociedad alelada por las aplicaciones de los móviles, las redes sociales, las series de televisión, las plataformas en streaming y la compra online.
Aunque la dupla realizó de manera notable títulos recientes como 'I Feel Good', 'Saint Amour' o 'Le grand soir', es 'Borrar el historial' su película más redonda. Su trama parece fragmenta en escenas desternillantes de las sitcoms más incómodas -en algunos momentos recuerda al humor de Juan Cavestany en 'Vergüenza' o 'Vota Juan'-. Ahora bien, detrás de esa carcajada hay una feroz crítica a la sociedad de la comunicación actual, presa del móvil, que ha convertido en un círculo vicioso aún más profundo ciertas malas prácticas como el acoso escolar, las adicciones o el acoso sexual a mujeres.
Una sátira humorística maliciosamente divertida
Esa combinación de crítica social y humor absurdo convierten a 'Borrar el historial' en una brutal sátira, con tres actores que bordan sus papeles: Blanche Gardin, Corinne Masiero y Denis Podalydès, este último miembro de la Comédie Française. A ello hay que añadirle una buena cantidad de estrellas invitadas que aderezan esta soberbia comedia; como Benoît Poelvoorde y su negrísimo retrato de la realidad de los riders de Glovo o Deliveroo, Michel Houllebecq como el mejor sinónimo de la decadencia de la sociedad o Vincent Lacoste como el machista y misógino acosador del siglo XXI.
Revestida de comedia caótica y comercial, 'Borrar el historial' es una deliciosa experiencia, maliciosamente divertida. Una sátira que vuelve a demostrar la habilidad del cine francés para encontrar el equilibrio entre la mirada de autor y el cine de masas.
Nota: 8
Lo mejor: La incomodidad que producen las escenas más cómicas.
Lo peor: Dejarse llevar por la apariencia que tiene de comedia comercial.
