El nuevo largometraje de Kenneth Branagh está basado en el famoso cuento de Charles Perrault. Hablamos de su innovadora 'Cenicienta'. Este film se une al resto de adaptaciones live-action realizadas por la propia Disney, basadas en sus propios clásicos de animación.
El film esta protagonizado por Lily James en el papel de Ella, la joven que sufrirá las desgracias y desdichas perpetradas por la madrastra interpretada por Cate Blanchett y sus hermanastras, Drizella y Anastasia, Sophie McShera y Holliday Grainger respectivamente.
La película nos muestra una nueva versión del cuento popular, en el que podemos ver la infancia de Ella, junto a su madre y su padre. La tristeza llega a la casa del comerciante cuando su esposa fallece, Ella promete a su madre ser bondadosa y tener coraje. El padre de Ella se vuelve a casar con Lady Tremaine pero tras un viaje comercial, el padre de Ella no vuelve y de esta manera Ella se convertirá poco a poco en la criada de la casa, siendo apodada como Cenicienta.
Un dato curioso ha sido que el éxito de este tipo de adaptaciones suele tener un éxito rotundo en pantalla, en este ocasión el film de Brannagh junto con James, Blanchett y Richard Madden, se convirtió en número uno en la taquilla estadounidense, algo que sin duda no ha dejado a nadie indiferente. Como se puede ver, mantiene la esencia del cuento original y la idea principal es la misma, pero lo que hace diferente a esta película del cuento original y del film de animación es la coherencia narrativa y visual que trae. Hay dos concepciones nuevas que rodean a la Cenicienta, el pasado y la independencia.
El pasado en la película es uno de los elementos fundamentales, ya que explica la manera en la que la chica ha llegado a tal punto y por qué lo soporta a pesar de todo, mientras la independencia da ese nuevo aire moderno, pese a estar ambientado en otra época mucho más antigua, que es que la mujer no se encuentra ligada obligatoriamente a un hombre o su único cometido es encontrar al príncipe, ella misma se vale por sus principios y valores, haciendo frente a su propia realidad ella sola, ni siquiera apoyándose de primeras en un hombre, o buscando huir de manera cobarde. Su propio apoyo es su personalidad.
Las interpretaciones más destacables son, sobre todo, la hasta ahora desconocida Lily James, conocida televisivamente por su participación en la serie de televisión 'Downton Abbey', la actuación de James va más allá de ser correcta, aporta humanidad a la casi perfección de Cenicienta, se puede ver en su manera de interpretar esa bondad e ingenuidad de Cenicienta, pero además es capaz de utilizar la tragedia como un arma de doble filo para su actuación, no quiere que sintamos pena por ella, sino al contrario, quiere que veamos que su fuerza es lo que le hace ser feliz, sino que uno de sus virtudes más grandes, también llega a ser su perdición, que en este caso es la bondad.
Cate Blanchett por su parte, se lleva de calle la película pero tampoco se le ha dado un peso fílmico extremo, sino que se le ha dado en su justa medida, acorde a la adaptación que se estaba haciendo. A diferencia de otros filmes como 'Maléfica', en la que la factoría Disney insiste en edulcorar a los villanos más malos, en esta ocasión se ha dejado a Lady Tremaine como una mujer manipuladora, mala pero con un pasado trágico, razonamiento que explica pero que no justifica sus actos.
Uno de los puntos negativos, es que no llega a humanizarse del todo los personajes del cuento, se presenta a una Cenicienta más humana, más actual pero sin apenas algún indicio de maldad o algún defecto, es demasiado buena pese a su independencia. El príncipe, representado a través de la figura de Madden, también obtiene ese ensalzamiento, que no se hace tan notorio al conocer otras facetas de él, no solo como príncipe, sino como hijo, enamorado, soldado, dota de cierto trasfondo su imagen.
Ademas, la evolución del film va siendo más rápida según va transcurriendo la acción, pero en un primer momento, sobre todo en las primeras escenas, tienen un ritmo lento y en ocasiones con falta de dinamismo, lo que hace que por algún momento se convierta en un poco aburrida, es cierto, que en la segunda parte del film coge velocidad y consigue remontar el ritmo fílmico a la perfección, un buen desenlace final.
La sutileza de la imagen
Los efectos técnicos, tanto sonoros como visuales, han sido uno de los elementos más importantes del film. El impacto visual de muchas escenas crean una fábula artística que se debe resaltar, por ejemplo, la escena del baile a nivel visual es muy rica, cuidando cada detalle, se puede ver el gran trabajo técnico realizado, dado que es una de las escenas que se quedan en la retina después de su visionado.
Es importante destacar esta parte, dado que muchos de los puntos positivos de la historia vienen a consecuencia de una buena puesta en escena, tanto del cuidado del escenario, como del vestuario como de la propia iluminación. Han sabido mezclar ese mundo de fantasía con la propia realidad, haciéndonos creer que dicho reino puede existir perfectamente. La musicalización de la escena ha sido importante también, pero llevada a un segundo plano, eso si, dejando claro la importancia que tiene, sobre todo en el clímax final del film, en el que cierta canción cobrará mucho significado, haciendo un guiño al largometraje animado original, en el que hubo muchas canciones que aun hoy son recordadas.
Sin duda, esta nueva versión de 'Cenicienta' de Kenneth Branagh ha abierto la puerta para realizar versiones de cuentos pero en su justa medida, es decir, no cambiando elementos fundamentales de los cuentos y difuminándolos hasta que parezcan otras historias. Una muestra de que se puede dar un nuevo enfoque a los cuentos clásicos, con valores modernizados, dejando de lado clichés arcaicos, pero respetando la esencia original.
