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CRÍTICA

'Color Out of Space': Mil colores tiene la noche

Crítica de 'Color Out of Space', la nueva adaptación del relato de Lovecraft. En cines a partir del 7 de agosto.

Por Javier Parra González 7 de Agosto 2020 | 10:30

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Después de haberse reinventado como estrella de culto gracias a obras como 'Mandy', Nicolas Cage vuelve al género de terror más puro de la mano de uno de los realizadores que Hollywood parecía haber olvidado: Richard Stanley. Nacido en Sudáfrica y habiéndose refugiado en el documental desde el año 2001, el director regresa a primera línea de batalla gracias a 'Color Out of Space', la nueva adaptación de 'El color que cayó del cielo', el relato de Lovecraft que ya había sido llevado a la pantalla en los años ochenta.

Color Out of space

Teniendo en cuenta que estamos ante una serie B que ha conseguido llegar a los cines, existen varios aspectos a destacar de ella, los cuales la convierten en una de esas rarezas harto disfrutables en pantalla grande, y que muchos apuestan por ella como un futuro título de culto que ya ha alcanzado una legión de seguidores. El primero de ellos, es el hecho de que constate el regreso en plena forma de Stanley, quien no rodaba un largometraje desde mediados de los noventa, cuando fue apartado del rodaje de 'La isla del Dr. Moreau', la cual acabaría en manos de John Frankenheimer y cuya polémica fue contada con todo lujo de detalles en 'Lost Soul: The Doomed Journey of Richard Stanley's Island of Dr. Moreau', documental de 2014 dirigido por David Gregory.

Este paréntesis no dejaría al margen de todo a Stanley, quien habría continuado ligado a la industria como documentalista y guionista (suyos son los libretos de 'Imago mortis' y 'Los abandonados'), siendo esta nueva propuesta una demostración de que en él sigue presente la forma de hacer cine con la que empezaría a ser conocido como cineasta de culto. Han pasado treinta años entre el estreno de 'Hardware', su ópera prima, y el estreno de 'Color Out of Space', y la forma en la que el director sigue entendiendo el cine de género es algo que ha cambiado más bien poco.

Color Out of space

Cósmica pesadilla

En aquella, nos llevaba hasta un siglo XXI post-apocalíptico, pieza clave para comprender el cyberpunk y que nos presentaba a varios aventureros debiendo detener a un robot que podría acabar con el ápice de humanidad que sobrevive en la Tierra. En esta, una granja familiar será en epicentro donde se desate la acción, cambiando ciencia ficción distópica por el horror cósmico que nos trae de la mano de Lovecraft. Aquí, cerca de la ciudad ficticia de Arkham (situada por el escritor en Massachusetts), los Gardner acaban de mudarse al emplazamiento donde un meteorito cambiará el estatus lumínico del lugar, convirtiéndolo todo en un lienzo colorista bajo el que se esconden una serie de horrores que se irán desatando a modo de onda expansiva.

Llegando a coquetear con los preceptos de la Nueva Carne y del eco-terror, y trayendo a la memoria otros títulos recientes de la ciencia ficción como 'Aniquilación' de Alex Garland, 'Color Out of Space' viene a dejar claro que Stanley ha conseguido superar al paso de los años y no quedarse obsoleto a la hora de plasmar el horror en pantalla, un horror que viene disfrazado de una paleta cromática que bien podría ser el resultado de una ingesta de LSD, el principal motivo por el que el título conecta con la pesadilla lisérgica de Panos Cosmatos que fue 'Mandy', donde Nicolas Cage también sucumbía a un terror ancestral y criaturas que se escapaban de toda imaginación acompañado de tonos rosas, violetas y rojos.

Color Out of space

No existe en ella una autodeterminación como si quisiera desmarcarse de la anterior adaptación, aquella que en 1987 se llamó aquí 'Granja maldita', dirigida por David Keith y que contó con Will Weathon como protagonista. Mientras que los efectos y maquillaje de aquella fueron uno de los aspectos que la convirtieron en uno de los títulos que plasmaron aquella esencia del puro terror ochentero (que tuvo como productor asociado a Lucio Fulci), en esta podemos ver ciertas conexiones (aunque sea a modo de guiño) con el cine de Stuart Gordon y Brian Yuzna, los dos grandes nombres que están detrás de otras adaptaciones de la obra de Lovecraft.

Dejando a un lado el histrionismo de Cage, quien no deja de ser carne de meme reconvertida en nueva estrella del fantástico, los ecos a 'Society' o 'Re-sonator' se hacen presentes cuando 'Color Out of Space' apueste por una serie de momentos de lo más bizarros, los cuales determinan su pura esencia como producto de serie B, etiqueta que no viene a desmerecer la categoría de un producto que, como título contemporáneo de horror cósmico estará a la altura de las expectativas, el cual ya ha abierto camino a una trilogía creada por el propio Richard Stanley, cuya próxima obra a adaptar será el 'El horror de Dunwich', una de las mejores noticias posibles para los conocedores de la obra de Lovecraft.

Nota: 7

Lo mejor: Cómo se nos presenta cual modesta producción que estalla en mil colores y formas (y deformes) sin importarle caer en el ridículo y abrazando lo grotesco.

Lo peor: Si crees que Nicolas Cage no puede soportar el peso dramático de su personaje, tal vez no sea tu película.