Riccardo Milani es uno de los directores más populares del cine italiano, gracias a su fina habilidad para dirigir propuestas feel-good, en 2017 dirigió dos de las películas más taquilleras de su país. Poco conocido en España, el director se estrena con 'Como pez fuera del agua', una propuesta que va más allá de la clásica comedia comercial, con una visión muy acertada sobre la división de clases sociales que trae un debate muy necesario. Película candidata a tres premios David di Donatello.
Giovanni lidera un think tank del Parlamento Europeo dedicado a estudiar la situación de los suburbios italianos para ayudar, con fondos económicos, la actividad empresarial para personas con dificultades. Considerándose un hombre comprometido socialmente, su mundo se vendrá abajo cuando su hija Agnese, de 13 años, se enamore de Alessio, un chico de barrio, de Bastogi, uno de los más conflictivos de Roma. Convencido de que ese joven de clase baja no le conviene a su hija, Giovanni encontrará en la madre de Alessio, la volcánica Monica, una inesperada aliada, ya que ella, que sabe mucho de la vida, no confía en las buenas intenciones de la gente de la clase de Giovanni.
Una comedia con buen trasfondo social
Milani trae una clásica historia de lucha de clases reconfigurada en una interesante comedia con trasfondo social que invita al debate. El director, que coescribe el guion junto con Paola Cortellesi (actriz protagonista), Giulia Calenda, Furio Andreotti, logra traer personajes muy bien delineados, en el sentido de que, desde el primer momento, el público sabe identificarlos y, además, conectar con ellos. Ese hecho logra que la trama fluya de forma completamente espontánea, gracias también a una trama que aprovecha su cobertura de comedia feel-good para mostrar las, aparente, invisibles barreras sociales que cohabitan en una misma ciudad.
Ahí reside su principal virtud, en mostrar cómo esa clase burguesa practica, sin saberlo, una especie de despotismo ilustrado neoliberal. Es más, los guionistas, con Milani a la cabeza al ser director, deja en evidencia la hipocresía de un grupo de gente que no sabe escuchar las necesidades de aquellos a los que, supuestamente, quieren ayudar. Ahí entra en escena la figura de Monica, madre de Alessio, que trabajaba como cajera de un supermercado de barrio, hasta que la automatización llegó y acabó en el paro.
Sin embargo, Milani da cierta opción a la esperanza, al buscar la conciliación y concordia de ambas clases sociales a través del diálogo, invita, por un lado a que los grupos burgueses progresistas conozcan de primera mano las necesidades de la gente del barrio y, por otro lado, también recuerda que las políticas de progreso y de oportunidades pasan porque los principales destinatarios las sepan ver, la necesidad de crear una especie de asistencia legal y burocrática. Con ese trasfondo, esta comedia feel-good acaba logrando tener una trama más compleja de lo que aparenta inicialmente.
Milani acierta con su nueva propuesta comercial
También ayudan sus dos actores protagonistas, que ya coincidieron en 'Mamma o papà?', remake que dirigió Milani de la aplaudida comedia francesa del mismo nombre. Antonio Albanese sabe meterse muy bien en su papel de burgués concienciado que, realmente, rechaza relacionarse con esa clase baja a la que quiere ayudar. Después está Paola Cortellesi, musa y esposa del director, cuya visión más pragmática le otorga una mirada muy real a su personaje.
'Como pez fuera del agua' acerca al público español una realidad social no tan lejana como es la italiana (que demuestra que, además, dicha situación es aplicable a la realidad española y europea en general). Gracias a un acertado equilibrio en la comedia, los momentos humorísticos surgen de forma completamente espontánea, Milani desembarca con éxito en salas españolas.
Nota: 7
Lo mejor: La trama social que tiene de trasfondo.
Lo peor: Algunas situaciones cómicas necesitan más contexto.
