Cuatro años después de dirigir 'Que baje Dios y lo vea', Curro Velázquez vuelve a la realización con 'Cuerpo escombro'. Se trata de una comedia bastante atrevida y que toca un tema sensible, dado que aborda la realidad de las personas discapacitadas de diversa índole. Dani Rovira se mete en la piel de Javi, un emprendedor que ha invertido mucho en un robot de ayuda con el que potenciar la inteligencia artificial desde el ámbito doméstico.
Su vida se tuerce cuando el proyecto es descartado por no tener en cuenta a las personas discapacitadas. Eso le sumirá en una carrera contrarreloj para encontrar empleo y poder evitar que el piso de sus padres, que había sido utilizado de aval para el proyecto, vaya a perderse. Sin embargo, eso le obliga a hacerse pasar por una persona que sufre parálisis cerebral. Una mentira que irá haciéndose más grande hasta que, por supuesto, explote en un gran alud de embustes.
Realmente, describir la trama de la cinta refleja fehacientemente el curso de la historia, aunque habría que agregarle que, para rizar más el rizo, Javi termina teniendo un idilio con su jefa en la empresa a la que consigue engañar para que le contraten. Por supuesto, el estilo y ejecución que bien puede recordar al de las comedias feel-good que buscan concienciar a través del humor y con un protagonista de dudosa moralidad, un ejemplo es 'Sobre ruedas', en la que un ejecutivo fingía estar en silla de ruedas para conquistar a una mujer que vivía en esa situación.
Una comedia con buenas intenciones
Sin embargo, la manera en la que termina desarrollándose el filme hace demasiado hincapié en cómo ocultar la mentira y cómo el protagonista va siendo cada vez más víctima de su propio engaño. Eso, por supuesto, deja entrever el resultado. Sin embargo, el guion que firma el propio Curro Velázquez, no aprovecha ciertos recursos que presenta al inicio, como el proyecto robótico que no sale adelante al inicio de la cinta. A ello se suma que se sabe qué tipo de consecuencias puede haber si se descubre el pastel.
A pesar de ello, el filme tiene ciertos momentos de luz, en los que no sólo logra sacar buenas carcajadas; sino que también visibiliza una realidad a través de la comedia. La secuencia de la discoteca a la que van personas con discapacidad es uno de los momentos más notables de la cinta. También reconocimiento a Dani Rovira en un papel nada sencillo y que sabe defender.
'Cuerpo escombro' es una comedia que sabe ofrecer a su público una producción en la que se saca alguna sonrisa y que busca traer a primera línea una realidad que pocas veces se refleja desde una perspectiva ligera como es la comedia.