En 2018, la actriz y guionista Erica Schmidt creó un musical inspirado en la celebérrima pieza teatral de Edmond Rostand, 'Cyrano de Bergerac', junto con Aaron Dessner, Bryce Dessner, Matt Berninger y Carin Besser. Tres años después, el cineasta británico Joe Wright, tras retomar las producciones de época con éxito con el biopic de Churchill 'El instante más oscuro', decidió llevarla a la gran pantalla. Eso ha provocado la llegada de 'Cyrano', nominada al Oscar al mejor diseño de vestuario, con Peter Dinklage convertido en el galán con destino trágico de la Francia de 1640.
Sí que es cierto que Joe Wright tiene mano para las adaptaciones de época, su versión de 'Orgullo y prejuicio' es una de las más aclamadas a nivel cinematográfico. También ha demostrado ser innovador en el género, muestra de ello es su particular visión de 'Anna Karenina', rodada prácticamente en un único escenario. Con lo cual, parecía lógico que su regreso con 'Cyrano', tras el traspié que supuso la fallida 'La mujer en la ventana', fuese por la puerta grande. El resultado es mucho más irregular de lo que cabría esperar.
Han sido tantas las adaptaciones que ha tenido la obra de Rostand, que una nueva tiene que aportar un toque diferente a lo visto anteriormente, que no es poco. Las adaptaciones de la obra de 1950, con el gran José Ferrer a la cabeza; o de 1990, con Gérard Depardieu recordando que, ante todo, Cyrano debe desprender esencia francesa, son las más recordadas en la gran pantalla, hasta el punto que el último acercamiento a la obra fue para narrar cómo Rostand creó la célebre pieza, la entrañable 'Cartas a Roxane', logrando así evitar la comparación directa.
Aparentemente, el 'Cyrano' de Wright tenía mucho que decir, pues es un musical y lo más importante: cambia el aspecto estético del filme, pues el problema que tiene el protagonista no está en una larga y afilada nariz, sino en su diminuta estatura. Sí, este cambio funciona, le dota a la cinta de mayor autenticidad. Aquí se ve que el musical original de Schmidt estuvo hecho a la medida de su cónyuge, Peter Dinklage, quien siempre se sintió identificado con el héroe de la obra de Rostand y reproduce muy bien esa frustración por amar en secreto, así como la idealización de ese anhelo. Realmente, es el actor de 'Juego de tronos' lo mejor de una propuesta que termina quedándose a medias en sus ambiciones.
Un musical hecho a la medida de Peter Dinklage
El problema que tiene esta versión es que es un musical con temas que no logran quedarse en la mente, carece de momentos como el 'I Dreamed a Dream' de 'Los miserables', el 'Tonight' o el 'America' de 'West Side Story' o el 'Memory' de 'Cats' (que no logró levantar su fallida adaptación cinematográfica). Tampoco consigue crearlos, como sí sucedió con 'La ciudad de las estrellas: La La Land', con 'Another Day of Sun', 'City of Stars' o 'Audition (The Fools Who Dream)'. Con lo cual, en su apartado musical, produce la sensación de quedarse en tierra de nadie.
Y si falla su parte musical, el filme se cae casi completamente. Sin momentos memorables, la película avanza por una trama que tampoco logra llamar la atención. En su intento de modernizarla, el guion de Schmidt termina creando una fábula mucho más liviana que el drama que debería ser. Las secuencias de mayor peso dramático no transmiten esa pasión y ese dolor por el amor no correspondido. El triángulo amoroso tampoco funciona, Haley Bennett hace lo que puede con su Roxanne, pero carece de química con el otro galán de esta partida, Kelvin Harrison Jr. Su Christian dista mucho de lo que pudo verse en las versiones de Vincent Pérez o el de William Prince.
En su afán de ser también una adaptación contemporánea, este 'Cyrano' también se queda en tierra de nadie. Con Sicilia como escenario, el largometraje exigía ser una producción de más época. Esa disonancia en su cuidado diseño de producción se ve reflejada con un vestuario más propio de los remakes en imagen real de Disney, excesivamente colorido para un relato trágico. Todo ello aumenta la sensación de adaptación irregular, a lo que hay que añadir una fotografía excesivamente luminosa para tratarse de una historia de amores no correspondidos e intrigas.
'Cyrano' consigue tener momentos brillantes gracias a la interpretación de Peter Dinklage. Desafortunadamente, no es suficiente. Un intento loable de actualizar una obra clásica atemporal que, desafortunadamente, se queda a medio gas. Eso sí, sus bellos escenarios naturales serán un deleite visual para aquellos que le den una oportunidad.
Nota: 5
Lo mejor: La interpretación de Peter Dinklage y las bellas vistas de Sicilia.
Lo peor: Su parte musical no logra ser memorable. Su vestuario es más propio de Disney.
