¿Y si volvieras a ser becario después de jubilarte?. Con esta premisa Nancy Meyers nos presenta 'El becario', una comedia apta para todos los públicos que nos muestra el día a día de Ben Whittaker (Robert De Niro), un viudo de 70 años que cansado de vivir la vida que se supone que le toca vivir: entierros, paseos y todo tipo de actividades que realizan las personas de su edad, encuentra la excusa perfecta para respirar hondo y quitarse unos años de encima. La suerte llama a su puerta cuando una compañía de venta online de ropa femenina busca a becarios jubilados, como parte de un programa de inmersión social y Ben se convierte en el candidato perfecto.
Rodeado de notebooks, smartphones y muchas dudas, nuestro becario consigue poco a poco ir haciéndose un hueco en la startup de moda dirigida por Jules Ostin (Anne Hathaway), una joven de éxito que ha conseguido levantar un imperio donde lo hipster y el postureo cobran vida, porque pudiendo ir en bicicleta por la oficina ¿para qué andar?. Así da comienzo esta divertida historia que no termina de aprovechar la idea del conflicto generacional, de la que se podría sacar mucho más jugo en el guion, pero que sí consigue conectar con el público fanático de este tipo de comedias en su resultado final.
Reparto sobresaliente
Gran parte de "la culpa", la tienen sin duda alguna sus protagonistas que encajan perfectamente con su personaje y que consiguen hacerte partícipe de la historia con su química y su compenetración. Vemos a un De Niro que parece disfrutar con las tramas que le toca vivir junto a Hathaway que vuelve a brillar y que nos recordará a muchos a su papel en 'El diablo viste de Prada', solo que en esta ocasión será ella la jefa, aunque con un estilo más moderno, que nos hará preguntarnos eternamente por qué hay tan malas críticas contra ella.
A todo esto hay que sumar a Jason (Adam DeVine) que se encarga de los becarios y que junto con el resto de compañeros se convertirán en el grupo que acompañará a nuestro protagonista en el entorno de trabajo y que darán algo de chispa a la rutina de la oficina. También está presente Fiona (Rene Russo), la masajista de la empresa (sí, habéis leído bien, de ahí que sea tan moderna), con la que Ben tendrá una trama secundaria y que le hará volver a creer de nuevo en el amor. Una historia que contrasta con los problemas que vive Jules con su marido, por el tiempo que le quita ser la directora de un proyecto tan importante y donde el becario consigue el nexo de unión para ayudar y ganarse el respeto y la confianza de su tutora.
Trama con prisas
Y precisamente ahí encontramos el principal problema, Meyers, su directora, que en su trayectoria se ha concentrado más en comedias con tintes dramáticos como en 'Cuando menos te lo esperas' o 'No es tan fácil', peca de rapidez y agota sus armas del conflicto generacional bastante pronto, convirtiendo el resto de la película en una dosificada caída libre del interés.
En definitiva, 'El becario', que a priori cuenta con una idea innovadora y que podría tener muchos más golpes de risas y diversión en el guion, se queda a medio camino por no saber terminar de aprovechar del todo la trama principal quizás con más giros, más vueltas de tuerca y sobre todo más humor. Pero consigue salvar la cinta gracias a unos protagonistas que se muestran soberbios durante todo el metraje, a los que podrás ver en cines a partir de este viernes 30 de octubre. ¿Y tú dónde te ves dentro de 10 años? ¡No te pierdas el tráiler oficial!