El cine español no solo está asistiendo al auge de la comedia familiar, sino que parece que todas las cintas que han apostado por este género se han puesto de acuerdo en ambientarse en Navidad. Ya vimos cómo 'Cuidado con lo que deseas' de Fernando Colomo replicaba elementos que tan bien le funcionaron a Santiago Segura con 'Padre no hay más que uno' o '¡A todo tren! Destino Asturias' mediante un toque de magia navideña, resultando una cinta perfecta para los más pequeños pero que para el público adulto era poco más que una producción rutinaria llena de lugares comunes del cine familiar. Y ahora, antes de que otras comedias navideñas como 'Mamá o papá' o 'Tengamos la fiesta en paz' lleguen a los cines, volvemos a encontrarnos con prácticamente lo mismo en 'El refugio', otra comedia situada en este mágico y festivo periodo que cuenta con numerosas estrellas cómicas como Loles León, Leo Harlem o David Guapo. Y este es precisamente su problema, que no tiene nada nuevo que ofrecer. Aunque no se puede negar que la película reutiliza con éxito esquemas de la comedia española que tantas alegrías en taquilla han dado en el pasado.
'El refugio' nos narra cómo varias personas quedan atrapadas en un hotel en plena montaña en medio de una fuerte tormenta. Entre ellos se encuentra una estrella de cine en horas bajas, su agente, un actor joven con miles de seguidores que está apunto de arrebatarle el papel de su vida, la novia del intérprete, su ex, la estricta dueña del hotel, su hermana obsesionada con la relajación y los ejercicios zen y un grupo de niños revoltosos. Vamos, un plantel de personajes de lo más variopinto que no tardan en desatar el caos en cuanto se percatan de la situación tan peliaguda en la que se encuentran.
Hay muchos elementos interesantes que podrían haber convertido a 'El refugio' en una comedia muy loca y divertida, sobre todo los perfiles tan cómicos de sus personajes, su gran reparto y la buena cantidad de ideas que tiene de cara a despertar la carcajada en el espectador. Sin embargo, todo se aprecia hecho con prisas y sin terminar de pulir, dejándote con la impresión de que todo pasa sin pena ni gloria por pantalla, que no tiene el resultado idóneo y que no termina de divertir.
Eso sí, si no eres muy crítico, tal vez te resulte altamente entretenida y disfrutable. Y es que la mayor parte de sus gags y personajes beben de muchas comedias de éxito de nuestro país, especialmente de las ya mencionadas comedias familiares de Santiago Segura. El contar con rostros como Leo Harlem, Loles León o Luna Fulgencio, la mezcla entre el tono familiar y el humor adulto, el no parar de situaciones desmadradas en el que todo deriva en la más absoluta locura, como bien ocurría en 'Padre no hay más que uno' o 'A todo tren'.
Además, cuenta con un reparto muy entregado. En especial, funciona muy bien el trío formado por Sara Sálamo, David Guapo y Mariam Hernández, que en su rivalidad amorosa bajo personajes desquiciados saben desenvolverse muy bien. Lo mismo con Loles León como la dueña de ese hotel donde no paran de suceder desastres, que gracias a su tradicional y maravillosa vis cómica se erige como la dueña de la función.
¿Era una comedia familiar?
Respecto a esa mezcla entre el humor familiar y el adulto hay un detalle que me chirría. Y es que el tono más amable y para toda la familia se nota metido con calzador, como si el proyecto original fuera una comedia adulta a la que en última instancia se le ha querido dar un cambio de rumbo. Por ejemplo, la mayor parte del tono para todos los públicos viene dado por una narración de la historia a modo de cuento por parte de Leo Harlem, quien cuenta los hechos desde fuera a los personajes de Marcos y Luna Fulgencio. Además, toda la trama de los niños dentro del relato del hotel es a la que más le cuesta encontrar el rumbo.
Esto me hace sospechar que ante la gran acogida de la comedia familiar en España en los últimos años se reconfiguró el proyecto, sobre todo valorando que su productora, Bowfinger, es también la responsable de 'Padre no hay más que uno' y 'A todo tren'. De ahí también que la película sepa ser tan precisa a la hora de recurrir a los esquemas del éxito de este tipo de cine, que al fin y al cabo, es lo que más la hace sobresalir.
Nota: 5
Lo mejor: Replica la fórmula de comedias españolas de éxito como las de Santiago Segura.
Lo peor: Se nota hecha con prisas y su trama es un caos de elementos que no funcionan.
