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CRÍTICA

'Érase una vez en Queens': Sueños de extrarradio

Crítica de 'Érase una vez en Queens', dirigida y escrita por Eddie Huang. Protagonizada por Taylor Takahashi, Taylour Paige, Jorge Lendeborg Jr., Pop Smoke, Pamelyn Chee y Perry Yung.

Por Miguel Ángel Pizarro Más 21 de Mayo 2021 | 09:40
Colaborador de eCartelera. Apasionado del cine y la cultura en general. Cine europeo y de animación, mi especialidad.

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El multifacético empresario Eddie Huang se pasa a la realización. Tras haber creado su propia franquicia de restaurantes, diseñar ropa, trabajar como abogado en un bufete y ser autor del libro autobiográfico que inspiró a la aplaudida sitcom 'Recién llegados', ahora decide saltar al cine con 'Érase una vez en Queens', una película en la que pueden verse tanto su inspiración en su pasado como su relación -durante su juventud- con la cultura urbana.

Érase una vez en Queens

En cierta manera, 'Érase una en Queens' recuerda a esos títulos de adolescentes urbanos de los años 90, con secuencias que evocan a 'Mentes peligrosas', también de los 2000, como 'Thirteen' o 'Felices dieciséis'. Sin embargo, hay un elemento novedoso, los protagonistas son de origen asiático. Muy pocas veces ha podido verse la realidad de la comunidad asiático-estadounidense en los barrios obreros y de extrarradio. Ya esa perspectiva hace que la propuesta de Huang, el cual también escribe el guion, llame la atención. También el hecho de que su protagonista sea un as del baloncesto y evite caer en los clásicos estereotipos sobre los estudiantes asiáticos.

Un protagonista nada empático para una historia urbana que solo aporta vacía visibilidad

Pero más allá de estas novedades, no hay nada más destacable en 'Érase una vez en Queens', a la que la falta toda la chispa que sí hay en 'Recién llegados'. El principal problema que tiene es que su protagonista, interpretado por Taylor Takahashi, no produce nada de empatía y esta producción parece de esas en las que sus personajes principales deben encontrar la complicidad con los espectadores. Queda la duda de si es cosa de Takahashi o, directamente, de una mala dirección.

Érase una vez en Queens

Boogie, el cual da nombre a la cinta en su título original, tiene un carácter excesivamente arrogante y egoísta como para comprenderle. Cierto es que parece influencia familiar que sea así, pero ahí está otro fallo de Huang, en no confrontar debidamente los problemas de adaptación que tiene la comunidad asiático-estadounidense por los choques culturales que existen entre una cultura oriental y otra occidental. Esas fricciones estuvieron mejor plasmadas en 'The Farewell', incluso en la reciente 'Minari. Historia de familia', que huía de cualquier estereotipo de problema racial.

Y, claro, con un protagonista así, el público no logra conectar con la cinta. Tampoco ayuda a que las situaciones en las que se ve envuelto Boogie se hayan visto en otros títulos "urbanos" como 'Los chicos del Barrio', 'Straight Outta Compton' o, incluso, 'Honey'. Como manera de visibilizar a los canis y chonis asiático-estadounidenses cumple, pero poco más, desafortunadamente.

Nota: 4

Lo mejor: Visibiliza la realidad de extrarradio de la comunidad asiático-estadounidense alejada de clichés propios de este grupo étnico.

Lo peor: Acaba cumpliendo otros, los cinematográficos. Su protagonista tampoco ayuda a entrar en la trama.