Si hay un director que tiene experiencia en ahondar en el retrato de grandes figuras artísticas españolas, ese es Alexis Morantes. A través del documental, ha sabido mirar a importantes rostros históricos de la canción como Camarón de la Isla, con 'Camarón: Flamenco y revolución'; Alejandro Sanz, con 'Sanz: Lo que fui es lo que soy', o Héroes del Silencio, con 'Héroes: Silencio y Rock & Roll'.
Ahora, el gaditano da un paso más y decide realizar un retrato cinematográfico de uno de los rostros más importantes de la comedia española: Miguel Gila. Lo hace con '¿Es el enemigo? La película de Gila', con la que Morante se llevó el mejor a la mejor dirección española en el 50 Festival de Cine de Huelva, además de haber sido presentada en los certámenes de Sevilla y San Sebastián.
Biopic con el que se muestra cómo España va perdiendo el miedo a ahondar en sus figuras célebres más icónicas. En cierta forma, '¿Es el enemigo? La película de Gila' sigue la tendencia de la magnífica 'Saben aquell', con la que David Trueba rindió tributo a Eugenio. En este caso, se da un paso más arriesgado, al tratarse de una figura tan esencial para entender el humor contemporáneo español como es Miguel Gila y su famoso homólogo '¿Es el enemigo?'.
Aunque la vida de Gila daba para una miniserie o una saga de películas, Morante acierta a la hora de enfocarse en un momento muy concreto de su vida: su juventud y su experiencia luchando en la Guerra Civil Española. Este momento es la piedra angular de lo que luego fue tanto su famoso monólogo como su estilo de humor. Morante, quien firma el guion junto con Raúl Santos, recuerda cómo la época de mayor disfrute de la juventud, entre los 18 y los 22 años, fue la que le tocó vivir a él como soldado del bando republicano.
La cinta tiene el reto de rendir tributo al humorista, pero también a la persona, sin olvidar el drama que supuso vivir de primera mano una experiencia tan traumática como la Guerra Civil. Morante logra despojar de cualquier mirada política su relato, enfocándose en lo humano y, sobre todo, dejando en evidencia lo absurdo de la guerra y cómo son los ciudadanos de a pie los que pagan los platos rotos principalmente. Dado que debe ser una tragicomedia, Morante opta por un tono que evoca al cine de Berlanga, con claro guiño a 'La vaquilla'.
Óscar Lasarte, un auténtico descubrimiento que trae el espíritu de Gila
El resultado es una correcta cinta con la que se rinde tributo al lado más desconocido de Gila y el más importante. Su monólogo y su aparición en la televisión de los años 80 y 90 marcaron a varias generaciones. Sin embargo, en la memoria colectiva, son muy pocos los que recuerdan el origen de dicho humor. De la misma manera, se rememora lo fundamental que fue Gila para la configuración de esa mirada tan características que le dio a la comedia española y de la que bebieron grandes figuras como el mentado Berlanga.
Para ello, Morante opta por contar con un rostro desconocido para encarnar a Gila. Óscar Lasarte, con una amplia experiencia en teatro y cortometrajes, defiende un papel en el que le da ese toque de aparente ingenuidad a un hombre que conoció el lado más bárbaro del ser humano. Sin duda, todo un descubrimiento, al lograr ese equilibrio entre comedia y drama, ofreciendo una mirada llena de esa humanidad que tanto busca plasmar el cineasta.
Lasarte, está muy bien acompañado por reconocidos rostros como Natalia de Molina, Salva Reina, Carlos Cuevas, Adelfa Calvo o Vicente Romero. Cada uno representa una mirada personal distinta de aquellos que marcaron la vida del mítico humorista y también dibujante de historietas.
'¿Es el enemigo? La película de Gila' es una correcta producción con la que se busca recordar y honrar la figura del icónico comediante. Una cinta que sirve también para descubrir a ese gran talento que es Óscar Lasarte y que aspira a ser uno de los nuevos rostros reconocidos de la industria española. Un largometraje que invita a ahondar más en el pasado de Gila y en recordar que, en las guerras, la humanidad es la perdedora de ambos bandos.