Con cada estreno que lanzan a los cines, Marvel va poniéndose poco a poco un listón cada vez más difícil de alcanzar. De momento no han tenido ningún traspiés, pero también estábamos hablando de personajes tan conocidos como Thor o Capitán América. Pero quién dijo miedo. Un buen día, la Casa de las Ideas anunciaba que una de sus próximas películas iba a adaptar 'Guardianes de la Galaxia'. No soy precisamente un lector asiduo de cómics, pero sabía quién era Iron Man antes de que se hiciera la película. ¿Pero un grupo cuyos componentes incluyen un árbol que habla y un mapache modificado genéticamente? Estaba en blanco, y probablemente hubiera muchos como yo. El riesgo por parte de Marvel era alto. El resultado del experimento se pone por fin ante nuestros ojos, e indica una vez más que las suposiciones de muchos parecen correctas: Marvel puede con todo, y más.
James Gunn ha sido el elegido para dirigir el salto del Universo Cinematográfico del estudio al espacio exterior. Era su primera oportunidad con una película de alto presupuesto, y esa frescura ha sido lo que mejor le ha venido al largometraje. La película se aleja mucho de lo que hemos visto hasta ahora, apostando por unas altas dosis de humor que funcionan perfectamente en un universo de lo más vasto y lleno de posibilidades. Porque al escenario de esta aventura intergaláctica no le falta detalle, en eso siguen dejando claro que, hasta cuando no se toman en serio, siguen mimando cada detalle de sus proyectos.
Nos trasladamos a finales de los 80, donde conocemos a un niño llamado Peter Quill, que un día es aducido por extraterrestres. Cuando retomamos su historia será ya un hombre hecho y derecho, convertido en un ladrón que encuentra un misterioso orbe en un planeta perdido. Ese objeto le embarcará sin querer en una gran odisea, en la que se cruzará con otros perdedores como él, unos inesperados compañeros de viaje en cuyas manos estará el destino del universo. He de admitir que siento debilidad por las historias sobre los orígenes de los personajes, pero 'Guardianes de la Galaxia' es mucho más que eso. Sí, se nos desgranará poco a poco quiénes son Gamora, Drax, Groot y Rocket, se nos presentará ligeramente el pasado de todos ellos, y el de Peter Quill por encima de todos, pero lo harán entre escenas llenas de momentos memorables, y con segmentos cargados de la acción más macarra que hayamos visto alguna vez en una película de Marvel. A destacar, sobre todo, la escena que transcurre en la cárcel, en la que todos los personajes nos demuestran de lo que son capaces y en la que una pierna ortopédica protagoniza el chiste del año (con permiso de Kevin Bacon).
Con 'Capitán América: El primer vengador', ya vimos que en Marvel saben hacernos viajar en el tiempo con mucho estilo, pero el caso de esta película es, literalmente, otro rollo. La cinta está tan cargada de guiños a la época que Peter dejó atrás, que necesitaremos muchos visionados para encontrarlos todos. Sirviendo como otro método para quitar hierro al asunto, el "Awesome Mix, Vol. 1" que el protagonista guarda como su mayor tesoro es una grandísima banda sonora, nunca podíamos imaginarnos que llegaríamos a escuchar 'Cherry Bomb' de los Runaways o 'I Want You Back' de los Jackson 5 en una película de este género, y que encima no pudieran sonar mejor. Carcajadas aseguradas cada vez que ese Walkman se enciende, y una gran labor de selección musical por parte del equipo de la película. Todo esto, sumado a una alta cantidad de tipos de planetas y seres alienígenas convierten a esta película en todo un homenaje al cine de ciencia ficción en sus años más dorados, a las aventuras espaciales que entretenían, nos hacían reír a mandíbula batiente y nos llegaban a conmover. Gran parte de esa frescura viene del toque "nerd" que James Gunn ha dado a la película, haciendo las delicias de los más "frikis", en el mejor sentido de la palabra, pero con la capacidad de romper barreras y entretener a muchos más que a sus espectadores objetivos.
Ha nacido una estrella
Ya desde que conocemos a su protagonista, quedaremos prendados por el rollo que gasta. Este Star-Lord que nos descubre a un Chris Pratt que parece nacido para tomar el papel principal y brillar con luz propia, recordándonos a esos héroes que dejan huella por mucho más que su capacidad para pegar mamporros. Su personaje está a la altura del líder que podíamos esperar para una aventura con reminiscencias a los primeros momentos de 'Star Wars'. Un gran acierto por parte de Marvel (y de Universal con 'Jurassic World') el haberle dado esta oportunidad. Este chico puede llegar muy lejos. Junto a él, los que mejor sabor de boca dejarán entre los espectadores serán Groot y Rocket, y no es para menos. Están diseñados para conquistarnos a golpe de risas, y son los personajes más inesperadamente geniales que hemos visto en mucho tiempo, sobre todo el mapache, que tiene las mejores líneas de diálogo. Inmensos los trabajos de Vin Diesel, que hace grande una frase tan sencilla como "yo soy Groot", y Bradley Cooper. Solo por eso merece la pena la versión original. Dave Bautista y Zoe Saldana cumplen también como Drax y Gamora, aunque presiento que pueden dar mucho más de sí y de sus personajes.
El lado oscuro queda un poco más cojo, desaprovechando a un Lee Pace entregadísimo, que podría haber dado mucho más juego. Karen Gillan tiene más opciones de lucirse, y no decepciona. Sorprende lo poco que lucen secundarios como Benicio Del Toro o Glenn Close, que deberían haber tenido un mayor tiempo en pantalla. Sin embargo, el protagonismo total es para los Guardianes, y como la película se pasa volando querremos ver más, mucho más de ellos. La película es la más diferenciada dentro del universo Marvel, aunque no podamos evitar recordar por momentos a 'Los Vengadores', pero orgánicamente tiene todos los ingredientes para funcionar al son del resto de engranajes del universo, con personajes que ya conocíamos y situaciones que, tarde o temprano, sabemos que afectarán a los demás miembros de este universo, que acaba de expandirse hasta casi el infinito, y que no solo no nos provocará mareos, sino que querremos repetir el viaje cuanto antes. Su director ha sacado su vena más "friki" para confeccionar esta película, y en el fondo es lo que mejor le podía venir para hacer justicia a esta panda de inadaptados.
Esta suerte de entretenidísima película de la ciencia ficción más divertida y trepidante quiere convertirse en la película más desternillante del verano, y es muy probable que lo consiga. James Gunn ha conseguido manejar tantos elementos con maestría en 'Guardianes de la Galaxia' que ha logrado una película tan completa que la sitúa sin dudarlo en la segunda posición de preferencia dentro del Universo Marvel, justo después de 'Los Vengadores'. Era muy difícil conseguir el éxito con personajes tan desconocidos, pero el estudio ha conseguido traernos el mayor soplo de aire fresco que hemos visto en todas sus películas, una cinta que conseguirá dar un vuelco al corazón de todos los fans de este género en sus décadas más gloriosas. Visto que también son capaces de acertar de lleno cuando no se toman nada en serio, empiezo a pensar que Marvel no puede hacer nada mal. Y ojalá no me equivoque si piensan preparar películas tan brutales como esta.
