La saga 'Kimetsu no Yaiba' está más que consolidada a nivel internacional y es, junto con 'Jujutsu Kaisen' o 'Ataque a los titanes', una demostración de cómo el anime contemporáneo ha logrado tener una proyección superior al del público nicho. En 2023, el estreno de 'Guardianes de la noche: Kimetsu no Yaiba - Rumbo a la aldea de los herreros' causó cierto desconcierto, al venderse como una secuela de la primera cinta, 'Tren infinito', la cual arrasó mundialmente en taquilla.
Cinta recopilatoria que engloba los últimos episodios de la segunda temporada más un adelanto del primero de la tercera, la propuesta provocó que con la siguiente película recopilatoria la estrategia de promoción fuese completamente distinta. De ahí, que 'Guardianes de la noche: Kimetsu no Yaiba - Rumbo al entrenamiento de los pilares' esté teniendo una mucha mejor recepción por parte del público, el cual ya sabe a lo que va y se deja llevar por una propuesta que logra sobresalir y demostrar que la reconversión a la gran pantalla le sienta de maravilla a la franquicia.
El film reconvierte el último episodio de la tercera temporada del anime, dentro del Arco de la Aldea de los Herreros, y lo combina con el primero de la cuarta tanda, que se verá en esta próxima primavera. A ello se suma que elige los momentos clave de la tercera temporada a modo de resumen introductorio, permitiendo a los seguidores de la saga basada en el manga de Koyoharu Gotouge vivir una proyección especial en cines y para los profanos poder seguir la franquicia desde un punto de vista casual.
Ayuda a que el final de la tercera temporada fue lo suficientemente potente como para poder aumentar su sentido épico en los cines. Haruo Sotozaki, quien ya se encargó de la magnífico 'Tren infinito', toma el desafío de readaptar el episodio final, enlazarlo con el primero de la cuarta temporada y crear una serie de resúmenes que den sentido cinematográfico a esta propuesta.
La saga demuestra que luce más épica en la gran pantalla
El resultado es un refinamiento de una perspectiva cinematográfica que debería comenzar a tenerse en cuenta y que tuvo a Michel Ocelot como principal precursor, el de darle entidad propia a las llamadas 'películas-paquete' y que estos recopilatorios se conviertan en largometrajes por derecho propio. Eso es, sin duda, 'Rumbo al entrenamiento de los pilares', que logra con creces ser una narración autónoma, que sabe servir de puente para el fandom del anime y ser a la vez un largometraje con una historia coherente y que puede verse de forma independiente.
Un ejercicio magnífico, que permite disfrutar de brutales y violentas escenas de acción y que recuerdan que 'Kimetsu no Yaiba' es uno de los títulos shônen más potentes de la producción actual de anime. Tanjirô vive un duro dilema personal a la hora de matar definitivamente a la Cuarta Luna Superior, un demonio que descubre que detrás de su cuerpo original tenía otro, pues acabar definitivo con él podría evitar muertes de inocentes, pero también supondría dejar a su hermana Nezuko a su suerte, la cual fue transformada en demonio por el pérfido Muzan Kibutsuji, antagonista principal de la saga.
Un dilema que los fans de la serie ya saben cómo termina, pero que invita a aquellos que siguen el anime de manera casual poder entrar de nuevo en este universo de cazadores y demonios. El resultado es fascinante y la manera en la que se enlaza con el siguiente arco estupenda. A ello se suma que su animación luce plenamente en la gran pantalla y en formato de película. Sin duda, supera con creces lo que fue 'Rumbo a la aldea de los herreros'.
Aunque se eche en falta esa historia original para la gran pantalla como fue 'Tren infinito', 'Rumbo al entrenamiento de los pilares' logra ser una correcta tercera entrega que incentiva tanto a ver la cuarta temporada como ver completamente la ficción. Una brutal historia que sabe dejar con ganas de más.