Aunque, actualmente, formar parte de una saga consolidada dé cierta seguridad en lo referente por apostar por una película en cines; de tanto en tanto, llegan propuestas originales que ofrecen historias diferentes que sorprenden gratamente, precisamente por atreverse a arriesgarse. En esa línea, se estrena 'Un héroe samurái: La leyenda de Hank', dirigida a tres manos por Rob Minkoff, Mark Koetsier y Chris Bailey y se inspiró en 'Sillas de montar calientes', la comedia wéstern de Mel Brooks, el cual participa en el doblaje original de la cinta.
'Sillas de montar calientes' narraba cómo en un pueblo del lejano Oeste, un avaricioso gobernador buscaba que los habitantes del pueblo Rock Ridge abandonasen la villa para vender los terrenos a una compañía de ferrocarriles. Para ello, el individuo nombró sheriff a un hombre negro que estaba condenado a la horca, a sabiendas que el pueblo lo va a rechazar por su color de piel. Comedia de 1974 que rompían tabúes para la época, atreverse a llevar al público familiar ese tipo de premisa se antojaba una tarea casi imposible, especialmente para los espectadores de 2022.
Ahora bien, el guion de Nate Hopper y Ed Stone, el cual adapta el original firmado por Mel Brooks, Norman Steinberg, Andrew Bergman, Richard Pryor y Alan Uger (los cuales también aparecen acreditados en calidad de guionistas en la cinta de animación), reconvierte la sátira en una fábula que no pierde ese toque de humor gamberro. El filme cambia el lejano Oeste por el Japón feudal y los protagonistas pasan a ser animales en lugar de personas, en un país poblado por gatos, donde los perros no son bienvenidos. Estas modificaciones permiten ver la propuesta de una manera más actual, permitiendo también a los guionistas romper ciertos límites del humor que no hubieran sido posible de haber tenido a humanos como personajes principales.
Divertida propuesta para toda la familia
Y es gracias a ello, que 'Un héroe samurái' tiene los elementos que la convierten tanto en una comedia con un toque canalla, con una historia épica y muy propia del cine de samuráis, así como también una propuesta de intrigas políticas. Una combinación muy mezclada con un estilo de animación notable, con varias secuencias con un estilo muy diferente (los flashbacks son una delicia y evocan a la estética de cintas como 'Los Mitchell contra las máquinas' o 'Los tipos malos') que vuelven a recordar la importancia de innovar con un estilo que trae ciertos elementos del estilo de la caricatura pero llevados a la tecnología de animación CGI, dejando una mezcla potente y que se agradece, al estar lejos del imperante estilo hiperrealista que había ido imponiendo en estos últimos años, 'Lightyear' de Pixar es el ejemplo más reciente.
Al igual que 'Sillas de montar calientes', 'Un héroe samurái' tiene ese mensaje a favor de la tolerancia, aunque que esté soterrado bajo la fábula de la eterna lucha de perros y gatos. A ello se le suma el carisma de sus personajes principales. Hank resulta ser un héroe tremendamente imperfecto, lo que permite conectar más con un protagonista que termina aprendiendo de sus propias lecciones, algo que no hubiera sido posible sin unos secundarios a la altura, como Jimbo, el mentor de Hank, o Emiko, la adorable gatita persa blanca que sueña con ser samurái de mayor. Eso sin olvidar al malo malísimo de la historia, Ika Chu, el cual tiene ese punto de malvado carismático y extravagante que funciona muy bien en este tipo de propuestas.
'Un héroe samurái: La leyenda de Hank' es una divertida historia de aventuras, con un toque de humor negro, una animación innovadora y unos personajes que piden a gritos una secuela. Una propuesta que trae cierto espíritu del cine de animación de inicios de los 2000, con momentos propios de 'Shrek' pero con otras secuencias épicas dignas de la reciente 'Raya y el último dragón'. Una propuesta ideal para combatir el calor en familia en la gran pantalla.
Nota: 7
Lo mejor: Su estilo de animación, sus protagonistas y la combinación humor y gesta épica.
Lo peor: Algunos gags pecan de ser demasiado escatológicos o infantiles, lo que desluce algo su lado cómico.