¿Por qué nos da tanto miedo ir a los hospitales pero luego nos quedamos embobados durante quince temporadas de 'Anatomía de Grey'? El sentirnos protegidos en el sofá de nuestras casas, seguramente, es algo que ayuda, pero no olvidemos que en la serie de Shonda Rhimes todos los casos están inspirados en historias reales que los propios espectadores envían a la productora. ¿Qué nos dice esto? Que somos masocas y nos gusta ver al prójimo sufrir - aunque luego nos alegremos cuando se salven -.
TVE sabe de esta afición nuestra por la sangre y las vísceras y se ha propuesto devolver la tensión a este subgénero con 'Hospital Valle Norte', y lo demuestra desde su impresionante primera escena con un accidente de avión que muestra la amplia factura en producción que manejan y sienta una de las bases principales de la serie: el buen gusto a la hora de intercalar exteriores con los modernizados interiores del hospital, muy lejanos de, por ejemplo, 'Hospital Central'.
La serie cuenta en su estelar reparto con Alexandra Jiménez y José Luis García Pérez como principales protagonistas, y se presume de ella no tanto por su trama, una joven cirujana que llega al hospital para poner todo patas arriba con sus métodos poco ortodoxos, como del enfoque que se le ha dado... aunque en muchos momentos parezca que estamos viendo 'Centro médico' en las tardes de la pública.
Decía el propio García Pérez en una entrevista para 'yu, no te pierdas nada' en Los 40 que si algo llama la atención de 'Hospital Valle Norte' es la atmósfera que se respira en los quirófanos: estas secuencias son algo que nunca ha visto en España y que cree que va a marcar un antes y un después en este tipo de series. Ojalá los demás estuviéramos de acuerdo con él y pudiese acercarse mínimamente a lo que vemos en cualquier serie del otro lado del charco.
'Anatomía de Grey' y 'The Good Doctor', fuertes referentes de 'Valle Norte'
Si algo nos queda claro de este repentino regreso de la ficción televisiva a los hospitales, es que el detonante es el apabullante éxito de 'The Good Doctor' en el prime time de Telecinco. La serie de la ABC protagonizada por Freddie Highmore ha conseguido extraordinarios datos en su emisión y, sin duda, ha propiciado este nuevo estreno. ¿Qué relación guardan entre ellas?
El principal parecido es la sobreimpresión de aspectos detallados de la trama durante las escenas: los contactos en las llamadas, esquemas, mensajes, procedimientos de las operaciones... Como en la americana, se moderniza ese aspecto, haciéndola mucho más visual y, por qué no, más accesible para los millennials.
De 'Anatomía de Grey' bebe de su coralidad y sus líos de camas; ahora bien, si en la americana se dan pequeñas pinceladas durante la temporada, aquí se usa la brocha gorda desde el minuto tres, sobre todo, con la inclusión de dos personajes recién sacados de 'Médico de familia', interpretados por Gorka Otxoa, que ojalá nos creyésemos como cirujano y no pensásemos que está haciendo el mismo papel de siempre, y Teresa Hurtado de Ory. ¿Por qué teniendo el dinero y viviendo el momentum de televisión presente se siguen incluyendo este tipo de diálogos y subtramas?
Ahora bien, una cosa es usar algo como referente y otro hacer una copia idéntica: no puede ser que encontremos una escena en la que se usen los gorros de dibujitos de los cirujanos de 'Grey' y que se dé el play a la música en el quirófano como en la serie americana. Los espectadores tenemos una cultura del audiovisual que nos hace no tragarnos cualquier cosa que nos echen.
Una veintena de personajes nuevos al servicio de la medicina y el ligoteo
Si algo nos ha enseñado Shonda Rhimes es que en los hospitales se hace de todo antes que curar a los enfermos. "¿Es que en este edificio nadie trabaja?", pregunta mi madre día sí y día también viendo la serie; en 'Hospital Valle Norte', han recogido el testigo con un buen número de personajes que van a dar lugar a tramas de lo más variopintas.
Gusta el personaje de Alexandra Jiménez, una suerte de Miranda Bailey, pero no tanto su replica masculina, José Luis García Pérez, actor con el que cuesta mucho empatizar, quizá porque ya le tenemos encasillado como el típico capullo que al final seguro tiene buen corazón; sólo deseamos que no sea el Derek Shepherd de esta Anatomía patria y acabe enrollado con la protagonista. Por favor. Aún así, los enfrentamientos entre ambos es lo mejor de la serie: es una suerte contar con dos intérpretes de su altura.
Ojo que también en 'Valle Norte' tenemos un bar de reunión, 'El Lion', donde los trabajadores se reúnen después de la jornada y que va a dar pie a que la música sea incluida en las tramas, gracias a la intervención del personaje interpretado por Sergio Mur, el típico gallito de corral que también canta y toca la guitarra, además de ser cirujano del hospital.
Por otro lado, al tener los capítulos mayor duración que cualquiera de sus referentes, los casos de los pacientes se estiran y se hacen más largos; en este caso, contaban con Ramón Langa como estrella invitada, con una emotiva escena a mitad de capítulo que habrá hecho las delicias de los amantes del drama puro y duro. Además, la larga duración de los episodios implica que en este primera entrega estemos todo su tramo final sin pisar un hospital, algo que no sucede en la mayoría de series médicas. ¿Es algo bueno o malo? Aún es pronto para decirlo: lo decidiremos cuando descubramos el potencial de los personajes.
'Hospital Valle Norte' ha llegado con mucha ganas de innovar en la ficción médica y lo consigue cuando se vuelve moderna y se traslada a sus impresionantes exteriores; ahora bien, tiene que definir a qué público quiere orientarse: si quiere conquistar a las señoras que ya estaban enganchadas a 'Hospital Central' y disfrutan 'Centro médico', éste es el buen camino; pero, si quieren transgredir y que sea recordada, ha de dejar a un lado tanto rollo romántico y ponerse las pilas en los casos médicos, que deberían ser sus escenas estrella y acaban siendo las más flojas.
