Jonah Hill y Channing Tatum repiten como protagonistas en 'Infiltrados en la universidad' para recordarnos la desbordante química que hay entre estos dos actores. Todos los que hayan visto ya 'Infiltrados en clase' sabrán a lo que me refiero.
Ya vimos al final de la primera entrega cómo el personaje de Ice Cube les avisaba a Hill y a Tatum de que su próxima misión sería en la universidad. Y claramente lo hicieron con esta segunda película que no tiene nada que envidiar a su predecesora haciendo a la vez desternillantes guiños sobre una posible tercera entrega.
No olvidemos que lo bueno de las secuelas de comedia es que tengan al menos un cameo o menciones de la original, pues aquí Phil Lord y Christopher Miller, directores de la primera cinta y de 'La LEGO película', han recordado bien la anterior etapa del instituto de 'Infiltrados en clase', por lo que la sucesión de menciones a la entrega original ocurren constantemente, junto a la aparición de dos carismáticos personajes principales que no defraudarán a los fans de la primera entrega.
Lo mejor de esta comedia es que tiene una gran capacidad de reírse de sí misma. Ya lo dice Ice Cube en la película con "Es el mismo caso, ¡haced lo mismo!", y lo es. Una nueva droga ha aparecido en la universidad causando una muerte, por lo que estos dos peculiares policías se infiltrarán de nuevo como estudiantes universitarios. Esta vez el que lo llevará mejor será Tatum, donde encajará perfectamente con el grupo de los atléticos, altos, atractivos y populares.
Básicamente, los directores han trasladado las fiestas y las fraternidades de las universidades norteamericanas para plasmar lo que todo el mundo cree que es dicha vida. Por ejemplo, un edredón que no se lavará en meses o una camiseta para emborracharse son solo algunas de las cosas que, según Hill y Tatum, deberían de tener un típico universitario.
El personaje femenino por excelencia
Por otro lado tenemos a Jillian Bell que interpreta a la compañera de habitación de Maya, la chica bohemia con la que tendrá una relación muy estrella Schmidt. Y, sin lugar a dudas, Bell se pone en la piel de uno de los personajes mejor explotados de la comedia que da un toque de frescura a la típica historia de policías y drogas.
El espectador fan de este género de comedia se encontrará con una película corta y fresca, con un gran química existente entre los protagonistas, donde 'hacer el payaso' está más que demostrado que si se hace bien, y con altas escenas de pura acción entre medias, hará a más de uno reír y mucho.