Son muchos los episodios desconocidos sobre la Guerra Civil Española y sus consecuencias. Pese a haber tenido una historia fascinante, lo cierto es que la vida del pintor, escenógrafo, dibujante y escritor español Josep Bartolí es desconocida para buena parte del público. El artista barcelonés huyó de España poco antes del final de la contienda fratricida a Francia, instalándose de manera forzosa en campos de concentración, creados inicialmente por el gobierno de Lebrun -último presidente de la III República Francesa-, que posteriormente explotó el mariscal Pétain.
Su huida de España, el horror que vivió en los campos -llegó a estar en siete- su huida de la Gestapo, su marcha a México, su amantazgo con Frida Kahlo o el convertirse en el primer dibujante de la revista estadounidense Hollyday convertía su vida y obra en una atractiva fuente de inspiración cinematográfica, que llega con un homenaje a su arte, pues 'Josep', ópera prima del dibujante de prensa e ilustrador Aurel, viene a descubrir a un hombre cuya fortaleza y pasión es deslumbrante.
Reconocida con el sello Selección Oficial del Festival de Cannes, aplaudida en el Festival de Annecy y galardonada con el premio a la mejor dirección en la Seminci de Valladolid, 'Josep' funciona tanto como biopic como una historia de memoria histórica, en la que el guion de Jean-Louis Milesi pone a la Francia democrática -cabe recordar que los campos de refugiados de republicanos españoles comenzaron antes del gobierno de Vichy- frente al espejo ante uno de sus episodios históricos contemporáneos más vergonzosos, con los que Aurel y Milesi aprovechan para hacer un paralelismo con la realidad actual.
Una animación espléndida, visceral, un gran homenaje al arte de Bartolí
Más allá de descubrir una situación histórica desconocida para el público español -tristemente, la cinta es, ante todo, producción francesa-, lo cierto es que 'Josep' goza de un estilo de animación excepcional, que evoca al propio arte de Bartolí para narrar su historia, como si fuese el propio artista el que ofreciese su testimonio. El filme brilla especialmente en aquellos momentos de ensoñación, en los que el pintor fantasea, viaja a través de sueños con pasión, pero también acaba siendo prisionero de sus propias pesadillas. Cuanto más libre es la animación, mayor es la majestuosidad del largometraje, que vuelve a poner al cine francés como ejemplo de vanguardia en este sector.
Y en medio de esa animación que homenajea a Bartolí, Aurel firma un filme que recuerda a la animación de cómics, al estilo de Hergé con su icónico 'Tintín', con momentos dignos de los Caprichos de Goya, entremezclando belleza y horror. Convertida ya en una de las películas francesas del año, la espina al visionar 'Josep' está en la incógnita de qué hubiera pasado si se hubiera producido en España, pues su historia y su estilo recuerdan al de 'Buñuel en el laberinto de las tortugas' y a 'Chico y Rita', lo que hubiera podido ser un aliciente para el reconocimiento de la animación española.
Más allá de ese planteamiento, 'Josep' es un largometraje notable, que rescata uno de los episodios más turbios de la historia que comparten España y Francia. Una cinta que viene a reivindicar el legado de Bartolí y que sirve de reflejo sobre el buen estado de salud del cine de animación galo.
Nota: 7
Lo mejor: Su estética y su continuo homenaje a la obra de Bartolí.
Lo peor: Habrá que esperar al doblaje -si tiene- en su distribución en España. Por lo pronto, la versión original en francés no luce tan bien. Justo como le pasó a Jorge Usón en la mentada 'Buñuel', se hubiera agradecido a un actor de doblaje experto, pese que Sergi López hace un intento loable. Otro gran pero es el que Silvia Pérez Cruz ponga su voz a Frida Kahlo, pues su acento mexicano no logra ser creíble en ninguna secuencia, ¿tanto costaba contar con una actriz de origen azteca?
