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CRÍTICA

'Juntos y revueltos': Un viaje eterno a África

Adam Sandler y Drew Barrymore se vuelven a embarcar en una comedia insípida donde ningún actor del reparto llega a sobresalir en su actuación en un soporífero viaje a África.

Por Custodio Guerrero Quesada 28 de Junio 2014 | 10:09

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Frank Coraci, director de 'Click' o 'Zooloco', ha vuelto con una comedia, de casi dos horas de duración, con una trama débil y unos clichés de familia típicos para poder arrancar la carcajada fácil, aunque solo se quede finalmente en el mero intento. Drew Barrymore y Adam Sandler repiten en el papel protagonista de una película de Coraci 16 años después del estreno de 'El chico ideal'.

Juntos y revueltos

Se puede decir que Coraci tiene una gran experiencia en comedias con sus siete películas (con esta incluida) protagonizadas en su mayoría por Adam Sandler. Alguna que otra puede llegar a ser divertida si te pilla en un buen día y otras, como 'Juntos y revueltos', pueden llegar a aburrirte.

'Juntos y revueltos' cuenta la típica historia de una pareja, Lauren y Jim, que tienen una cita a ciegas que resulta no ser como esperaban. Pero el destino hace que coincidan en el mismo viaje de vacaciones hacia África, donde tendrán que compartir una habitación con sus respectivos hijos. Lo que viene siendo el uso de clichés familiares, bromas fáciles y peculiares de una comedia que llegan a cansar y un uso de unos Oompa Loompas de la película 'Charlie y la fábrica de chocolate' "modernizados" y nada acertados.

Y a estas alturas de la historia cinematográfica ¿a quién se le ocurre usar en una comedia familiar la típica historia de chica 'mal arreglada' que cuando cambia de look es un pivonazo consiguiendo así enamorar al chico que le interesa?. Todo ello en un ambiente también innecesario para poder ver las maravillas de África vendiendo así un poco de turismo del país.

Juntos y revueltos

Además, la película nos desborda con subtramas y personajes secundarios redundantes para arrancar sí o sí la carcajada que buscan, consiguiendo totalmente lo contrario con dichos personajes sin alma ni gracia. Un ejemplo claro son los Oompa Loompas liderados por Terry Crews, un grupo musical que se dedica a cantar lo que acaba de ocurrir en la mayoría de las escenas.

Juntos pero revueltos

Las actuaciones dejan mucho que desear. Los hijos no destacan en nada y menos los padres, Adam Sandler y Drew Barrymore. Sandler no ofrece nada nuevo de las ya numerosas comedias en las que ha participado y Drew Barrymore tampoco lo consigue hacer si se dedica a quemar bromas en la película como la de dar un golpe con el marco de la puerta a su hijo cuando lo lleva en brazos. Pero he de confesar que sí que consiguieron arrancarme una sola sonrisa en toda la película y se trata de una escena que involucra solo música, cámara lenta y a Katy Perry. Todo ello porque me pilló de sorpresa.

En conclusión, 'Juntos y revueltos' quiere llegar a ser la comedia familiar del año quedándose como el cameo de Shaquille O'Neal en la comedia: pasando desapercibida e innecesaria. Aunque sí que podría llegar a gustar a un público que no se canse nunca de las tramas de siempre de la típica comedia familiar del sábado noche.