'La verdad': Una serie cuyo principal ingrediente es la intensidad

'Los misterios de Laura' pasará a la historia de TVE por ser una de las series más vilipendiadas del canal público y por tener una legión de fans, que aunque quizá no muy numerosos, sí son extremadamente fieles. Y la razón era una madre de familia capaz de lidiar con unos gemelos muy revoltosos, un ex marido bastante tocanarices al tiempo que resolver crímenes. Laura Lebrel (María Pujalte) es una de las primeras policías femeninas que vimos en la tele con una clara superioridad sobre sus compañeros masculinos. Eso y que era un poco patosa sirvió para conquistar a muchos.

Dos décadas antes de que conociéramos a Laura Lebrel hubo un personaje en Antena 3 que se le parecía bastante. Por entonces era mucho más novedoso hacer algo así, y lo hizo Antonio Mercero. Lourdes Cano era una madre modelo, una empresaria modelo, una ex mujer modelo y la señora con más paciencia de todas las que pasaban por 'Farmacia de guardia'. Nos dejó marcados el personaje de Concha Cuetos y su serie. Tanto es así que convirtió en famosa la coletilla de "para dentro, Romerales" y seguro que a día de hoy todos somos capaces de silbar su sintonía.

Es de los personajes más recientes de nuestra lista pero no cabe duda que Amelia Folch es uno de esos que ha dejado huella, volvamos o no a verla en 'El ministerio del tiempo'. La mujer real fue una adelantada a su época y Aura Garrido nos ha hecho echarla de menos cuando aún no la conocíamos. Inteligente, divertida, con un enorme potencial para adaptarse en los tiempos y para ser la groupie oficial de los grandes escritores de la literatura española. Si Lope de Vega suspiraba por ella, cómo no vamos a hacerlo nosotros.

Lydia Bosch consiguió con 'Médico de familia' algo parecido al fenómeno que fue Jennifer Aniston con 'Friends': dio nombre a un corte de pelo. Su repercusión, evidentemente, fue mucho menor, pero basta para señalar lo que influyó su personaje, especialmente a adolescentes y jóvenes. Alicia era la tía enrollada que todos querríamos tener y la novia que muchos deseaban.

Luisa Martín pasó de ser una auténtica desconocida a una más en cualquier casa española de la segunda parte de los 90. La Juani, una asistenta doméstica, consiguió eclipsar al resto de miembros de la familia Martín con su delantal y su coletero de lunares. Reconozcámoslo: nos interesaba más su noviazgo con Poli que saber si Nacho y Alicia acabarían pasando por el altar. Vamos, lo de estos dos se daba por hecho, así que lo otro era lo que hacía que nos sentáramos todas las semanas con cierta intriga delante del televisor.

Para encontrar a otra secundaria al nivel de la Juani tuvieron que pasar unos cuantos años y que Telecinco estrenase 'Siete vidas' y nos encontrásemos con otra mujer de la limpieza que nos encandiló. Carmen Machi se convirtió en una estrella gracias a Aída, tanto que su personaje protagonizó uno de los primeros spin-off de una serie española. Años después 'Aída' sería una de esas series que también aprendió a sobrevivir sin su protagonista.

Aída hacía el tándem perfecto con Sole y se convirtieron en una de las parejas televisivas más queridas de la época: una jubilada y una señora que limpia casas para sacar a su familia adelante, ¿quién lo iba a decir? La republicana de 'Siete vidas' los traía a todos al hilo a base de collejas y contestaciones con las que ponía un poco de sensatez a ese grupo. Inolvidable Amparo Baró.

En una serie con una amplia mayoría de personajes femeninos como es 'Vis a vis' resulta complicado quedarse con uno sólo, pero lo vamos a intentar y elegimos a Zulema porque las malas también nos gustan, sobre todo cuando son inteligentes. Y Najwa Nimri lo borda como villana, pero tras esa fachada oculta humanidad y sensibilidad -que le había venido muy bien en varias ocasiones. Así es como se ha hecho un hueco en el corazón de los espectadores.

Merche no es una mujer, Merche son muchísimas mujeres. La esposa, la madre, la empresaria a edad tardía, la que empieza a estudiar con los hijos criados, a la que le diagnostican cáncer... Y todo eso antes de que España entrase en la democracia. Merche es un cúmulo de numerosas féminas que se merecen el respeto de forma individual, así que cuando le pasa algo sufrimos todos con ella, y cuando algo le sale bien lo disfrutamos. Son muchos los años que llevamos con Ana Duato y con 'Cuéntame cómo pasó' como para que Merche no nos haya dejado huella.

Ana Obregón es bióloga, pero lo cierto es que la mayoría de nosotros la conocemos por su trabajo en la televisión. Tras presentar 'Qué apostamos' su papel más memorable es el de 'Ana y los siete', algunas de cuyas escenas permanecen grabadas a fuego en nuestra memoria. ¿Hay alguien que no se acuerde cómo en el piloto la vimos deslizándose por una barra de striptease? Lo dicho, inolvidable.

Lina Morgan es una de las grandes cómicas que ha dado nuestro país y teniendo en cuenta que sus películas más exitosas son de los años 70 eso es mucho decir. En los 90 decidió meterse de lleno en la televisión, mientras que seguía con su teatro, y nos hizo reír a raudales. Si la tonta del bote es su papel más famoso en el cine Reme le va pareja en lo que se refiere a las series. Cuatro temporadas estuvo al frente de 'Hostal Royal Manzanares', suficientes como para ser uno de los personajes a los que más cariño cogimos en aquella época.

'Compañeros' es una de las series de adolescentes de la historia televisiva de nuestro país y no sería lo mismo si no tuviera a Valle. El personaje de Eva Santolaria era desgarbado, alegre y rebelde, pero también escondía un perfil reivindicativo a varios niveles que poco tenía que ver con la típica chica de instituto que habíamos conocido hasta entonces en las series. Dejó huella y marcó a toda una generación.

Es el personaje más reciente de nuestra lista y aunque no todo el mundo conoce a Paquita Salas (deberíais ponerle remedio) no podíamos dejar fuera a la representante más famosa de las series. Los Javis crearon un personaje tan imperfecto como necesario, con el que Brays Efe demostró que es una actriz 360. Paquita es indescriptible, pero difícil de olvidar.