En 2012, Álex Montoya dirigió un corto polémico, titulado 'Lucas', en el que Javier Butler se dejaba cautivar por un perverso individuo interpretado por Luis Callejo, el cual le convencía para subir fotos suyas a Internet para contactar con chicas de la edad del chaval, todo ello sin que la madre del protagonista, encarnada por Eva Llorach. Nueve años después, Montoya desarrolla más esta premisa, con el que su segundo largometraje, de título homónimo y que fue presentado en la sección ZonaZine del 24 Festival de Málaga.
La premisa es, básicamente, la misma, aunque Montoya ahonda más en ella, especialmente en lo relacionado a las motivaciones del joven protagonista, interpretado solventemente por Jorge Motos, quien toma el relevo de Butler. Porque, efectivamente, en el salto del corto al largo, Montoya hace un cambio de caras, con Callejo pasando el testigo a Jorge Cabrera y a Llorach, cuyo papel hereda Irene Anula.
Y en su narración es donde surge la parte incómoda. Montoya, quien escribe el guion junto con Sergio Barrejón, sabe jugar las cartas de la ambigüedad respecto a dejar al descubiero las motivaciones de las acciones de los personajes. Muy especialmente en el caso del joven Lucas, personaje hierático y árido donde los haya. Aunque, quien termina destacando es Cabrera y, finalmente, Jordi Aguilar.
Thriller incómodo sobre una situacion muy real
Ahí está la esencia de la cinta, en jugar con el espectador y perturbarle. Montoya no juzga las acciones de sus personajes, dejando al público como juez de su segundo proyecto para la gran pantalla, el cual es más notable que se predecesora, 'Asamblea'.
Su ambigüedad puede ser incómoda, pero 'Lucas' es una notable apuesta cinematográfica, lo que invita a visionarla, generando también debate y conversación. Un drama hipnótico que va tornando al thriller de forma espontánea, semejante al aroma que desprende una planta carnívora sobre sus presas.
Nota: 7
Lo mejor: La interpretación de Jorge Motos.
Lo peor: Tiene secuencias tan ambiguas, que da la impresión de que Montoya no sabe dónde quiere ir.