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CRÍTICA

'Madame Curie': La radioactividad tiene nombre de mujer

Crítica de 'Madame Curie', dirigida por Marjane Satrapi y escrita por Jack Thorne. Con Rosamund Pike, Sam Riley, Anya Taylor-Joy y Aneurin Barnard. Basada en la novela gráfica de Lauren Redniss.

Por Miguel Ángel Pizarro Más 4 de Diciembre 2020 | 10:22
Colaborador de eCartelera. Apasionado del cine y la cultura en general. Cine europeo y de animación, mi especialidad.

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En un momento en el que las historias protagonizadas por mujeres están copando series, películas y libros, no es extraño que surja un nuevo largometraje sobre la vida y obra de la científica franco-polaca Marie Curie, ganadora de dos Premios Nobel, el de Física en 1903 -que compartió con su marido Pierre Curie y el físico Antoine Henri Becquerel- y el de Química en 1911 -que ganó en solitario, su nombre siempre ha sido un referente, pero, actualmente, su legado ha recobrado más importancia -si cabe- como figura feminista e impulsora de las mujeres en las carreras de ciencias.

Madame Curie

Cuatro años después del estreno de 'Marie Curie', biopic dirigido por Marie Noëlle, ahora Marjane Satrapi se atreve a narrar su historia con 'Madame Curie'. Rosamund Pike ofrece una interpretación entregada, se mimetiza con la científica, plasma esa batalla diaria que vivió por querer dedicarse a la ciencia siendo mujer, así como muestra esa otra parte, la íntima y personal, desde su amor por su marido Pierre, hasta cómo defendió su propia autonomía, incluso cuando tuvo que enfrentarse a la sociedad francesa.

Tanto la actriz de 'Perdida' como el resto del elenco brillan. Llama positivamente la atención cómo el guion de Jack Thorne retrata tanto el machismo, como a aquellos hombres aliados que defendieron el trabajo de sus colegas mujeres. Es más, Satrapi dirige muy bien los dúos, primero el tándem del matrimonio Curie y después el de los Joliot-Curie, al mostrar cómo la hija de los Curie -con una fabulosa Anya Taylor-Joy- no solo mantiene el legado familiar, sino que lo extiende, forjando su propio reconocimiento, tanto a solas como con su marido, quien muestra su compromiso adoptando el apellido de su esposa, algo inusual en la época.

Madame Curie

Rosamund Pike destaca en un biopic convencional

Con un reparto fabuloso y unos personajes que transmiten pasión, ¿qué sucede en un relato que podría ser uno de los títulos feministas de la temporada? Pese que se muestre cómo Marie Curie sirvió de referente, tanto a sus propias hijas como a una generación entera de mujeres (y también de hombres), un problema que tiene 'Madame Curie' es que un biopic demasiado clásico, que carece del alma de otros trabajos de Satrapi como 'Persépolis' o 'Pollo con ciruelas'.

Comete los mismos errores que la cinta de Noëlle, quiere abarcar tanto el legado de Curie, que termina yendo por lo convencional. Y sí, sale un filme medianamente correcto, pero siendo un personaje tan importante y con varias adaptaciones de su vida al cine, se echa en falta algo más de innovación. Tampoco ayuda que esté rodado en inglés. Una vez más, haciendo referencia al filme de Noëlle, este estuvo filmado en francés y contó con una actriz polaca como protagonista. Quizás, en antaño, era más fácil contextualizar que una historia ajena a la realidad anglófona estuviera grabada en inglés, pero actualmente, eso solo es un hándicap que, si el filme no es lo suficientemente bueno, provoca cierta sensación de artificialidad, como ocurre en este caso. Una película decente, pero que no está a la altura de la importancia y el legado de la gran pionera en el campo de la radiactividad.

Nota: 6

Lo mejor: La interpretación de Rosamund Pike.

Lo peor: Carece de la personalidad suficiente para sobresalir respecto a otros biopics de la científica.

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