Tres años hace que nos despedimos de 'True Blood' y algunos todavía echamos de menos su tufillo a sexo, sudor y sangre, su sobrenatural encanto sureño y sus dosis de giros imposibles. Por eso en el momento en que nos enteramos de que la misma pluma que está detrás de las novelas adaptadas por HBO también firma las obras que ahora está adaptando NBC a la pequeña pantalla, nuestro entusiasmo se disparó. Sí, NBC no es HBO y aquella serie de vampiros buenorros no tardó en desviarse de las novelas de Charlaine Harris, pero... ¿Una puede tener esperanzas no? El caso es que 'Midnight, Texas' es más mamarracha, más loca, más de meter en el sarao a todo hijo de vecino, más... todo. La serie protagonizada por la Melinda venida a menos que es Manfred (François Arnaud), es más y punto.
Eso es exactamente lo mejor/ peor, que tiene momentos que te despiertan un extraño cariño entrañable gracias a o a pesar de que vengan envueltos en un tonito de serie B innegable. Con 'Midnight, Texas' hay que acostumbrarse porque es todo así. Es un "pero qué puñetas estoy viendo", mezclado con la carcajada que se te escapa ante tanta locura, las miradas de incredulidad inspiradas por las actuaciones tremendas (de malas) de todo el elenco protagonista, y los momentos de emoción ante semejante circo. El piloto son 42 minutos de emociones encontradas y guiños a otras ficciones para las que siempre hay lugar en el corazón de todo seriéfilo. Y es que no puedes evitar acordarte de 'Entre fantasmas', pensando que la protagonista tendría numerosos consejos que dar al medium perseguido que hace las veces de guia a través del viaje que te pega Midnight, tampoco podrás evitar la imagen mental de Sydney Bristow y su vistosa peluca roja en otro de los "guiños" de esta nueva serie, ni podrás dejar de pensar en el gato de Sabrina en cuanto descubras que Fiji (Parisa Fitz-Henley) tiene uno igual.
¿Lo mejor? El misterio que abraza a algunos personajes, y que su punto de partida es sencillo pero eficaz: se produce una muerte en el pueblo más tranquilo del mundo... (¡Riverdale! No, Midnight) Y entonces la policía empieza a sospechar de absolutamente todo el mundo porque son los que menos idea tienen del asunto... (¡Riverdale! ... ¡Que no! ¡Midnight!). Lo cierto es que las similitudes entre estas dos series mamarrachas se acaban aquí, en un punto de partida más que visto en la ficción televisiva, que además se complica considerablemente en el pueblo que nos traemos entre manos. Porque además del asesinato, tenemos al medium perseguido, a la hija de papá que se pirra por el medium perseguido, a los Hijos de Lucifer, a uno que dicen que es humano y acaba pagando el pato (muy como Matt en 'Crónicas vampíricas'), a un cura obsesionado con su cementerio de mascotas (sí, has leído bien), a un ángel tatuador (literal)... Vamos, un nivel de mamarrachismo nunca antes visto.
Haciendo piña
Cada uno de los habitantes de Midnight es muy de su padre y de su madre, está muy solo y tiene algo que ocultar, tres elementos que componen un caldo de cultivo estupendo para todo tipo de conflicto dramático que sorprendentemente termina encajando a su manera. Y es que cada uno de los peculiares personajes de este pueblecito que espanta como pocas cosas a los habitantes de las conservadoras poblaciones más cercanas (no vamos a mencionar la frase "es bruja y además lesbiana"), acaba encontrando su sitio en un todo muy de cerrar filas ante los que son de tu equipo, que termina dejando buen sabor de boca. Total que esta serie puede ser ideal para ver palomitas en mano con la mente en modo trash y muchas ganas de dejarse llevar por la montaña rusa de elementos sobrenatulares que ofrece el rincón más absurdo de Texas. ¿Convencido? Toma nota: 'Midnight, Texas' se estrena este jueves 14 de septiembre a las 22:00 horas en SyFy España.
