La comedia es uno de los géneros más recurrentes en el cine y que abarca mayor número de variaciones y combinaciones. El romance, la acción, el drama y hasta en ocasiones el terror encajan a la perfección con las risas y el humor; sin embargo, cuando hablamos de la comedia gamberra, pocas expresiones de alegría suelen aparecer en el rostro. La frase "esto es una americanada" suele ser una de las principales denostaciones que sufren estas películas. En los últimos años hemos podido asistir a obras que se incluyen en este subgénero y que, pese a lo que muchos pudieran pensar, se han convertido en piezas a tener muy en cuenta.
'Mike y Dave buscan rollo serio' es la última película que se enmarca en esta clase de comedia. Gracias a ella asistimos al debut cinematográfico de Jake Szymanski, actor, productor, escritor y director con numerosos trabajos a sus espaldas, pero ninguno para la gran pantalla. Con guion de Andrew J. Cohen y Brendan O'Brien, responsables de la escritura de 'Malditos vecinos' y 'Malditos vecinos 2', la historia gira en torno a Mike y Dave Stangle, dos hermanos con la cualidad tan poco querida por los suyos de liarla siempre, especialmente en los eventos familiares. Por ello, y ante la boda de su hermana Jeanie, se verán obligados a llevar acompañantes al enlace que tendrá lugar en Hawaii. Para acelerar el proceso deciden poner un anuncio en Internet buscando a dos chicas perfectas. Este se hace viral y llega a los oídos de Alice y Tatiana, quienes no son precisamente el prototipo de mujeres que le presentarías a tu abuela. A partir de aquí, la juerga no ha hecho más que comenzar.
Cabe señalar que ya desde su comienzo el espectador conoce cómo terminará la historia. Dos chicos con mucho arte para originar el caos allá por donde pasan conocen a dos chicas aún peores que ellos que se valen de la bondad bobalicona de los protagonistas para tomarse unas vacaciones a un lugar de ensueño. No hay sorpresa con la resolución que tomará, pero eso no es un grave problema, ya que la película gana puntos en otros aspectos. Sin embargo, sí que se echa de menos un recorrido más llamativo e intrincado en su trama. Todos los pasos que va superando resultan muy predecibles, y es que en todo momento se conoce cómo va a ir sobrepasando las diferentes etapas y cuál será la evolución de sus personajes. Incluso el giro final que da inicio a la última parte de la película resulta muy premeditado, dado que casi no permite ser conscientes de las consecuencias que conlleva la última trastada de la pareja de hermanos.
La química entre los protagonistas, su punto fuerte
La película puede conectar con el espectador en mayor o menor medida y que este se haga partícipe de su comedia, pero si hay un punto que destaca sobre todos los demás, es la química tan visible y palpable entre sus protagonistas. Zac Efron y Adam DeVine protagonizan la descerebrada pareja de hermanos y, ciertamente, lo hacen a la perfección. Mientras que Efron se posiciona como el hermano más "asentado", DeVine lanza su cara más exagerada en numerosas ocasiones. Pero no molesta, es más, resulta necesaria dada la cinta que se está proyectando. Y es que en una comedia de este tipo el espectador no busca personajes creíbles, sino que le hagan reír a carcajadas en la sala; y ellos lo consiguen.
No obstante, si hay dos personas que brillan por encima de los demás, esas son Anna Kendrick y Aubrey Plaza. Las actrices interpretan a Alice y Tatiana, dos amigas que superan en líos y gamberradas a los protagonistas. Es más, podría llegar a afirmarse que ellas son las verdaderas reinas de la cinta y quienes llevan la mayor parte del peso. La química entre ellas también resulta muy satisfactoria, suponiendo, además, un perfecto contrapunto la una de la otra. Mientras que Tatiana tiene un carácter más rompedor, Alice se caracteriza por aquellos pequeños puntos de dulzura que tan bien ensamblan con el personaje de Efron. Y hablando de reparto femenino, hay que alabar la dedicación de Sugar Lyn Beard, la novia de la boda. La potencia de su personaje aumenta al tiempo que lo hace la película, incrementándose hasta alcanzar el clímax (y nunca mejor dicho) en la que podría considerarse la mejor escena del metraje: la del masaje.
Si hay algo por lo que esta película se caracteriza es precisamente por la sucesión continua de gags que la conforman. Ya desde sus primeros minutos consigue hacer reír a la sala, algo que se agradece y que, a fin de cuentas, es el principal motivo por el que un espectador acudirá a verla. La película no baja el ritmo, lo da todo desde el inicio hasta el final. No serán las bromas ni las situaciones cómicas más novedosas que hayamos visto en la historia del género, pero funcionan sin resultar repetitivas.
En definitiva, 'Mike y Dave buscan rollo serio' es una película cómica que no aporta novedades a lo ya visto. No llega a la altura de predecesoras como 'Supersalidos' o 'Paso de ti', pero tampoco lo planea. Precisamente ese es uno de los mejores aspectos que tiene, que no resulta pretenciosa en sus intenciones hacia el público. Quien acuda a verla sabe lo que se va a encontrar y tendrá casi 100 minutos plagados de diversión. Las risas están aseguradas, así que siéntense y disfruten.
Nota: 7
Lo mejor: La química entre los actores y la capacidad de hacer reír sin parar.
Lo peor: La falta de elementos novedosos que la hagan brillar.